Luego de ese día me prohibí tener interacción con él, realmente había caido bajo y era consciente de eso, ahora me sentía un completo maldito pecador... Y el infierno era mi lugar sin duda alguna. Me sentía descepcionado de mi mismo, no merecía vivir, ni mucho menos tener un hijo como YoonGi, inteligente, dedicado, servicial... y tan sexy...
Golpeé mi cabeza intentando borrar aquel pensamiento mientras salía del trabajo, sabía que YoonGi estaría esperando por lo que decidí tardarme un poco más de lo habitual. Luego de varios minutos, casi cincuenta y cinco, emprendí camino a casa pues ya eran las 12 de la noche y debía volver al trabajo mañana, por lo que debía dormir. Al llegar podía ver las luces del comedor encendidas por la ventana, él seguía despierto, esperando a por mi. Suspiré y bajé la mirada un instante, siendo consumido por mis pensamientos.
"Por su hombre." - Pensé y solté una risa embobado para luego reaccionar, negando varias veces ante mi malicioso comentario y caminar hasta la puerta. Cuándo estuve frente a esta respire brevemente y abrí, para adentrarme dentro de casa, buscandolo con la mirada, hasta que lo visualicé, lavando los platos, podía escuchar sus sollozos bajitos, elevé mi ceja confundido.
Me acerqué lentamente, podría ser un infeliz, pero seguía siendo su papá y me preocuparía por él como cualquier otro padre. Luego toqué sutilmente su hombro y él volteó asustado hacia mi, para después limpiar sus lágrimas con su muñeca. - Creí que no volverías a casa hoy... - susurró con sus ojos llenos de lagrimas y yo simplemente lo abracé con fuerza para consolarlo.
- Lo lamento mucho... - Le dije y sentí como se aferraba a mi, soltando un pequeño llanto silencioso, lo alejé un poco de mi para secar sus lágrimas y sin esperarlo para nada... Él me besó, y yo, siendo hipnotizado por sus belfos, correspondí, abrazando su cintura automaticamente y apegandolo a mi casi al instante.
Llamenme loco o bipolar, pero no pude resistirlo de nuevo y esa noche hicimos el amor... exacto, no fue como la noche anterior, por fin asimilé que él era YoonGi, mi YoonGi. No ella... Y siendo consumidos por el deseo, le hice el amor.
Sí ya había caido una vez... ¿Por qué no hacerlo de nuevo? De igual manera, el diablo estaría esperando por mi en el infierno. Y así era cada noche, llegaba, YoonGi fingia abrazarme solo por cariño y lo hacíamos.
Prácticamente habíamos ocupado toda la casa, desde la ducha, su habitación, la cocina, la mesa del comedor y el sófa. YoonGi era mío ahora y yo era suyo. Él logró llenar el vacío que YoonJi había dejado, era idéntico a ella en todo aspecto, solo un poco más robusto, pero era exactamente ella.
Ya no quería dejar a YoonGi, él era perfecto para mi... Y él jámas me dejaría a mi... ¿Verdad? Eramos el uno para el otro, pero solo en secreto, porque sabía que nos matarían a ambos, y eso era lo que me carcomía por dentro. Sí el tan solo fuera una chica...
¡Y no fuera mi hijo! no olvidemos eso.
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Volvemos a los caps cortitos como antes. No quiero que termine esta serie, pero bueno, ya quedan cada vez menos capitulos. (Dos más o menos)
Tengan linda noche.
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Edipo - KookGi (Terminada)
RandomYoonGi se enamoró de su padre. - no copiar ni adaptar. - contenido gay y homofobico. - los nombres no me pertenecen.