Mañana de pensamientos

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Al despertarme, contemplé el techo de manera pensativa.

Aún no aceptaba la idea de aquella máscara tan perfecta, aquella de la sonrisa más contagiosa. Misma que albergaba un dolor que es soportado por algunos cuantos. Sin embargo, la serie de preguntas que cree y sabía que jamás me serían respondidas me acompañaron en mi desayuno.

¿Por qué existe la necesidad de mostrar que todo está bien? ¿Cuál es la causa de la debilidad personal? ¿Crianza? ¿Las juntas sociales? ¿Ser diferente a la sociedad? ¿Por qué callarse mientras uno se ahoga? ¿Qué tan desconfiado hay que ser para no decir el motivo de una tristeza?

Solo pude deducir que la desconfianza y la tristeza se crean a partir de pequeños momentos que se van juntando hasta que sucede un suceso mayor que compromete y arrincona tu ser. Como si tu tristeza te sometiera con una espada a la pared y tú fuerza mental fuera la clave para salvarte. Obteniendo así una situación la cual tu mente tenga que decidir si luchar por si misma o clavarse la espada como cual cobarde encuentra la salida más fácil.

Entonces, ¿Qué tan débil hay que tener la mente para buscar eso? O ¿Qué tan dañada?

Jamás entenderé porque buscar la salida fácil, pero, esa vida no fué mía. No puedo opinar en algún tema que no tengo la más mínima idea, quizás tuvo un terrible infancia o un suceso desesperante.

Lo que si es cierto es que nadie jamás entenderá las luchas internas de los demás, así como los padres no entienden los problemas de ésta generación y siempre será así. Queremos ser diferentes, pero siempre caemos en un ciclo repetitivo, solo porque los nuevos problemas serán diferentes a los de ésta época.

No somos buenos entendedores al final de cuentas, porque los sueños quizás jamás mueran, pero nuestros ideales actuales sí; ya sean para bien o para mal, cada quien elegirá su camino. Lo bueno, lo normal, lo mediocre o lo malo.

Ya ni sé que pensar sobre esto, ni si quiera me incumbe el tema; quizás sea por la sorpresa de lo que hizo, pero no soy quien para juzgar.

Me dispuse a revisar mi teléfono y tenía varios mensajes de Carolina, le respondí de la manera más normal posible antes de colocar mi teléfono en modo avión.

En mi cabeza, el tema de la chica quedó obsoleto cuando recordé lo de Carolina.

Aún me preguntaba ¿Por qué lo hizo? Si la amé con todo mi ser, era raro, pero quizás no fuí lo suficiente.

Cada excusa viable y denigrante hacia mi pasó por mi cabeza, tales como: no fuí lo suficiente, quizás esperaba más de mí, fué muy poco lo que le ofrecí, quizás solo jugó conmigo desde el principio.

Estás cosas fueron pasando por mi mente y pude notar como par de lágrimas jugaban en mis párpados hasta escaparse, y sin pensar en voz alta me comenté a mi mismo.

—Quizás nadie está preparado para que lo amen de verdad.

Me sorprendí por mis palabras, y de manera continua mis pensamientos fueron diferentes, la gracia que causó mi bipolaridad por mis propios comentarios me distrajo por unos segundos hasta que volví a pensar de manera repetitiva esa frase que me salió de la nada.

¿Hay que estar muy dañados para no poder dejar que te amen de verdad? ¿Cuál es el motivo del autosabotaje?

Todos le tienen miedo y a la vez esperanza a la felicidad, miedo porque sea muy poco lo que dure y esperanza porque la mayoría cree que merece ser felices y no notan sus acciones, y los otros porque están cansados de estar hundidos y quieren sonreír de verdad; aunque sea por una vez.

No hay más que decir, ese es mi pensar, y de manera egoísta no cambiará.

Cada quien tiene sus convicciones, y la mayor parte del tiempo no cambian hasta que ocurren cosas que hacen cambiar las opiniones.

Mientras pensaba en todo esto, sonó la puerta, me sorprendió cuando me dí cuenta que era mi padre.

Le pregunté que hacía en la casa y me dijo:

—Ya es medio día, vine a comer— Me dijo extrañado de que yo estuviera a esa hora en la casa.
—No me dí cuenta— Dije mientras pensaba que había perdido la mañana —Estaba algo ocupado con una tarea.
—Está bien, ¿Cómo estás?
—Bien, como siempre...

Un día, a día.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora