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Habia una vez un titiritero, le decían el "titiritero de la noche", todos sus shows y todas sus obras, eran siempre a la misma hora.

El joven emprendedor, se le conoció por primera vez cuando tenia 10, su puesto era pequeño de cartón y dibujado con crayón.

Sus marionetas eran simples y humildes, algunas hechas de telas viejas y calcetines.

El niño salio a la calle con su cajita de cartón, levanto su puesto, y se oculto dentro, para luego con una vela iluminar su show y asi empezar a crear sus historias

Las primeras eran simples pequeñas y creativas. Simples y cortas, contaba del como un muchacho se llego a enamorar de una princesa. Sus historias eran cortas y con un final simple, eran historias inocentes las cuales por la ternura atraía a alguno que otro cliente. El pequeño titiritero le gustaba salir de noche a hacer su show, a las pocas personas presentes en la plaza, el solo salía y contaba su historia, incluso si no habia nadie presente el contaba sus chistes, sus juegos y seguia con la historia.

A medida que el tiempo pasaba el titiritero seguia yendo a la misma plaza, a la misma hora, de 9:00 pm a las 12:00 cuando las campanas empezaban a sonar, a la tercera campanada el titiritero mas rapido que pronto se iba sin dar ninguna explicación. Aunque dejara su historia a la mitad o no terminara de contar algún chiste.

Nadie sabia nada del titiritero nocturno, solo se sabían su horario mas nunca su dirección o su nombre real. Aunque para muchos era solo un niño queriendo jugar a los muñecos en la noche. Se preguntaban quienes serian los padres de ese niño tan desubicado y tan descuidado que paseaba por la plaza a esa hora, como siempre con una sonrisa, vistiendo un enorme saco negro que llevaba arrastrando por el piso y un carrito de compras oxidado que tenia todas sus marionetas, sus escenarios y su cajita de cartón llena de rayones de crayón mientras que aun le costaba ver un poco por ese enorme sombrero de copa algo polvoriento que cargaba sobre su cabeza

Con el tiempo si fue teniendo espectadores de sus historias, oyentes que se detenían a escuchar sus chistes y sus diálogos, y sobre todo cada vez que obtenía una ganancia, se podia ver, pues siempre compraba tela para la cortina de su escenario, compraba en vez de crayones marcadores, cambiaba a una caja as grande y nueva, y sobre todo, acomodaba a sus títeres con las mejores telas que podían tener

Y con el tiempo tambien fue mejorando sus historias, ahora mas allá de clásicas historias de romances, creaba historias de miedo, las narraba y actuaba perfectamente, tambien historias de aventuras y de miles de tragedias, al publico les encantaba escuchar de sus historias, sus personajes tan icónicos y tan adorables.

Nadie, absolutamente nadie, pensaría que ese pequeño niño que era conocido por llevar un saco viejo muy grande y un sombrero de copa gigante mientras contaba sus historias.

Seria conocido actualmente en las Vegas, ciudad del pecado mismo, donde se le encontraría actuando para un teatro en especial, donde sus chistes eran mucho mas atrevidos y sus historias mucho mas "picantes" de lo que solían ser antes

- "Saben que es lo que le digo a nuestro querido manager cada que lo veo?"

- Que le dices, Copito? jeje

- "Que se joda a su puta abuela si cree que te dejare con ese bastardo avaricioso jajajajaja"

- Copito, no puedes andar diciendole asi a la gente, por dios pero que boquita tienes

- "Mi boquita? Por que no me lo dices despues de quitar tu mano de mi pantalón, precioso"

- Eres incorregible jajajaja

Mientras el publico reía ante su actuación y ante el monologo que presentaba, observaban con una sonrisa al joven de 29 años de edad, con el cabello rizado con mechones alborotados quien tenia los ojos de pupilas rojas cual rubí, con un camisa de botones blanca con un chaleco azul marino, con botones dorados y unos pantalones ajustados los cuales combinaban perfectamente con sus zapatos de vestir con tacones. Su títere era uno de madera que movia su mandíbula, podia mover tambien sus manos y ojos hasta incluso podia parpadear perfectamente, era sorprendente que el joven pudiera manejar a la perfección todas las complicadas piezas que conllevaba este títere de cabellos blancos y pestañas pintadas del mismo color, este al igual que Vene llevaba un traje solo que mas sofisticado y hasta tenia un baston con el cual hacia la broma a Vene de atar su corbata con este baston para acercarlo a su rostro y darle un beso en la nariz.

- Awww Copito, harás que me ruborice si continuas siendo tan pícaro jajaja

- "Que? Acaso no puedo ser cariñoso con la persona que siempre tiene sus manos dentro de mi pantalón y me masajea? Que injusto"

Como siempre una noche exitosa, al llegar a su hogar una casa enorme, este paseaba por los pasillos con su maleta llena de los títeres colgando, el venezolano se notaba agotado, y como no, antes cuando era niño solo tenia que hacer esta clase de shows en la noche, ahora era casi que todo el tiempo y no tenia muchas horas de sueño que digamos.

Ahora el joven apenas llegaba a su hogar este solo desempacaba todos sus títeres para luego ir a un cuarto en especial. A guardar uno por uno en sus estantes cubiertos por unos vidrios especiales cada uno con el respectivo nombre de estos.

- Buenas noches, Duquesa... Hoy fue un show muy entretenido... Buenas noches, Blitz los dejaste totalmente sin aliento jaja..... Buenas noches Moxxie y Millie, descansen Hmmm Y quien me estaría faltando...? Jejeje.. Solo bromeo.. Vamos ven aquí, Copito..

Dice cargando a su títere estrella de cabellos blancos, el latino solo reía al ver su cara para luego darle un beso en la frente, gracias a ese títere es que el pudo llegar tan lejos despues de todo, un día que estaba haciendo unos de sus espectáculos nocturnos de adolescente, este mostro a su querido copito y mas de uno pareció enamorarse de su personalidad tan astuta y picara y sobre todo por como este actuaba tan humanamente. El latino realmente estaba agradecido con sus títeres pues estaba consiente de que sin ellos realmente el no estaría donde estaba ahora.

- Buenas noches, mañana será otro día... Descansen bien..

Dice mientras aseguraba sus estantes para luego despedirse con la mano soltando un pequeño bostezo, apagaba las luces mientras les daba la espalda para luego lanzarles un beso y irse de ahí a su estudio, donde debería de escribir un nuevo guion y nuevos diálogos a sus personajes, crear nuevas historias.

Asi era rutinariamente, despues de cada show, el latino volvía a su hogar a descansar, con todo y sus títeres, jamas seria capaz de dejar sus títeres en un lugar como su camerino para alguien le viniera a robar estos. Y despues de revisar minuciosamente sus titeres, este se retiraria para empezar a escribir y hacer nuevas ropas a sus "compañeros de trabajo" hasta como siempre lastimosamente quedar dormido sobre su escritorio. Al día siguiente seria despertado por su agente y volvería a su rutina

Pero quien diría.. que esta vez.. Su rutina seria especialmente interrumpida por algo inexplicable o debería decir... Alguien?

🎭🎩°El Titiritero°🎩🎭 ||RUSVENE||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora