Leyendo Amor entre reinos

La realidad de la Potter-Weasley

El libro se cerró y el Gran Comedor volvió a su estado normal. La comida apareció en las mesas cuando Dumbledore aplaudió tres veces y los estudiantes, y Ron y Hugo, no dudaron en atacar las bandejas y fuentes. Charlaban animadamente de los últimos sucesos o simplemente de temas de interés común.

Narcissa fue invitada por Lily a sentarse con ellos, lo que causó varias miradas en la mesa de los leones, pero a los más allegados a los Potter no les importó. La señora Malfoy fue recibida con los brazos abiertos por los visitantes y se creó un ambiente aún más familiar entre ellos. Scorpius veía sonriente a su abuela, era lo más feliz que la había visto en mucho tiempo.

Pronto la cena terminó y cada uno se dirigió a su sala común, despachos en el caso de los profesores, o a la Sala de los Menesteres. Fue un trayecto tranquilo, T/n iba a caballito de Peter y Hermione y Ginny la imitaban con sus respectivas parejas, aunque la Granger estaba un poco reacia ante la idea.

Peter charlaba con Alex mientras la Potter poco a poco caía dormida en la espalda del rubio. Habían sido unos días bastantes largos, reviviendo lo que hacía poco habían dejado. Alex le contaba un poco sobre Eleonor, su esposa, y de cómo se habían conocido. El pelinegro tenía un brillo especial en sus ojos cuando hablaba sobre ella, el cual Peter conocía muy bien.

Caspian iba bromeando con Edmund, Sirius, Remus, Lunático y James. Remus cargaba a Teddy quien ya había caído en un profundo sueño. Tonks conversaba con Lily y Narcissa, las tres con enormes sonrisas.

Llegaron a la Sala de Menesteres y Peter y Remus llevaron a sus respectivos cargamentos, Teddy y T/n, a dormir. Peter después la despertaría lo suficiente como para que lograra cambiarse o, en su defecto, él ayudarla.

Los demás estaban reunidos en la pequeña sala común que tenían y que conectaba a todas las habitaciones. Harry y Ginny miraban a sus hijos seriamente al igual que el resto de los padres. Todos tenían curiosidad por saber un poco más de la hija mayor de Harry y Ginny.

Harry: No nos hagan esperar más. Hablen, por favor.

Ginny: ¿Qué ocurre con ella?

James S., Albus y Lilu se miraron entre ellos mientras que los demás solo respiraban profundo. T/n G. era un tema bastante tenso que tocar en la familia, pero sabían muy bien que para ayudarla, tenían que hablar.

Albus: Si se llega a enterar, nos mata. *Advirtió*

Aurora: Es un tema bastante sensible para la familia entera, no es fácil para ninguno de nosotros.

Lily: ¿Tan malo es?

Fred ll: No, depende del punto de vista.

James S.: Déjennos explicarles esto nosotros. *Señaló a sus hermanos y a él mismo* T/n G. es alguien que da la vida por la gente a la que ama. Su carácter es parecidísimo al de la tía, tal vez un poco peor.

Lilu: Siempre nos ha protegido de todo.

Albus: Cuando fui sorteado en Slytherin, ella fue la primera en saltar a defenderme. No le importó si los de su casa la veían mal o decían cosas de ella. Siempre estuvo allí conmigo.

Lilu: Siempre que tenía una pesadilla, ella iba a mi cama y se quedaba a pasar la noche a mi lado.

James S.: Me ayudaba a escabullirme para buscar dulces a medianoche y mamá nunca se enteró. *Miró a su madre* Porfa no me castigues por eso en el futuro.

Ginny descartó la idea. Ella solía hacer lo mismo con Fred y George.

James S.: Todo empezó a cambiar cuando ingresó a Hogwarts. No tenía muchas ganas de ir por alguna razón que aún nos cuesta entender. Cuando volvió para Navidad era una chica totalmente diferente. Ya no sonreía tanto, se alejó mucho más de papá y de mamá y no salía de su cuarto.