A Sky Full Of Stars | +18 | L1

Capítulo 44

"Salimos, no mueras mientras no estamos.

Estas sola en casa, así que nada de deambular."

- Taylor

Tan solo esa nota estaba pegada en la puerta de la habitación donde pase la noche. ¿Por qué no me despertó para acompañarles? Veo la habitación una última vez para salir y seguir el pasillo por donde vine hasta llegar de nuevo al salón del centro.

Después de recorrer parte del segundo nivel di con la habitación que fue designada para mí. Luego de una ducha que se sintió muy refrescante y ponerme ropa cómoda y ligera por el calor. Me dispuse a deambular, algo que Taylor no quiere, pero yo nunca le hago caso. Con la yema de los dedos recorro las paredes para sentir la textura de ella.

Mientras camino por los pasillo viene a mi mente el sin fin de preguntas sobre las protagonistas que hacen lo mismo que yo, claro que la mayoría termina en pequeños sucesos paranormales, cosa que yo no deseo. También puedo encontrar a una persona que viva entre las paredes, ¡Okey! Eso no será posible y debo de dejar de pensar en esas cosas.

« ¿Cuál será su habitación? »

Esa es una muy buena pregunta, si la vi ayer en la noche lo más seguro es que haya pasado la noche aquí. A menos que tenga también una casa como la de Liana, aunque siento que sí ella tendría una casa aquí sería más natural como la de Valencia.

Recorro los pasillos mientras pienso cuál de todas las puertas es la que alberga a Anielle. Tampoco puedo abrir puerta por puerta en busca de ella. Tampoco cuento con el número de su celular por lo que tampoco puedo ubicarla. ¿Por qué no tengo su número de celular? Esa es una muy buena interrogante, debo de pedírselo cuando vuelva a verla.

Estando en el segundo nivel recorro hasta donde es permitido, pero puede más mi curiosidad como siempre. Paso a un lado de una escalera para adentrarme, el olor es diferente en esta parte de la casa pero es el sonido de las olas que claman mi atención así que me adentro a un salón grande con una ventana abierta con vista al mar mediterráneo.

― ¿Te gusta la casa? ―volteo a ver a Anie que aparece de la nada.

« ¿No estaba sola? »

― Es maravillosa.

La pregunta es, ¿Desde hace cuánto es que ha estado siguiéndome? «Tal vez no lo hacía, solo te vio y te siguió. Para evitar que te pase algo» Frunzo mis labios unos segundos porque hablar conmigo misma es algo que hago mucho últimamente, mientras sacudo mi cabeza para aclarar un poco mi mente.

Se acerca a una distancia prudente para copiar mi acción. Miramos el paisaje que se abre frente a nosotras. Giro mi rostro para verla, segundos después ella hace lo mismo. Da un largo suspiro para soltar el aire mientras se nota cansada, me sonríe para alejarse saliendo del salón, la sigo para verla perderse en el pasillo.

« ¿Por qué se va? »

La sigo sin saber porque, la sigo porque algo me dice que lo haga. Esta casa es enorme y creo que me perdí, por tantos pasillos que hay. Mientras siento que estoy por alcanzarla acelera el paso como si jugara conmigo. Me voltea a ver un segundo con una sonrisa en su rostro para subir las gradas al tercer nivel.

Subo detrás de ella porque solo deseo atraparla y que ya no juegue conmigo. Al estar en el tercer nivel me doy cuenta porque Taylor dijo que no podíamos subir. Todo está por completo cubierto con tela que cuelga del techo y algo que evita que el suelo se manche y hay estructuras de metal por el pasillo principal.