La Estrella De La Mañana (Destino II)

Preludio - La Estrella de la Mañana

Mucho antes de que la historia comenzara, poco después de que Él terminara con la creación, ocurrió una atroz batalla en los cielos, una batalla que cambiaría para siempre la historia. Su nombre era Lucifer, cuyo significado era "La Estrella De La Mañana", él era la mano derecha de Dios. Era el más sabio, el más amado, el más hermoso. El error que Dios cometió entonces fue darle el poder de la inteligencia y el libre albedrío. Sobre todo, el libre albedrío, ese que le permitió tener sus propios pensamientos e ideas, ese que le permitió notar las fallas de Dios al gobernar su creación. Y entonces, se comenzó a preguntar porque Él había decidido que habría dos niveles de "humanos", aquellos dos que vivirían como reyes en el edén, con todo a su disposición, el don de la inmortalidad y sin preocupaciones, y el resto de los mortales, que vivirían en la Tierra, teniendo que proveerse su propio alimento y sostén, y teniendo una vida limitada, sin conocimientos de ciencia ni tecnología. Porque aquellos que eran casi semidioses, de todos modos, vivían en la ignorancia, obligados a cumplir una estúpida regla de "no comer del fruto prohibido". Claro, aquel fruto prohibido que era, nada más y nada menos, el que le daría el conocimiento y el entendimiento de todo lo que pasaba a su alrededor, y más allá.
Sus cuestionamientos no se hicieron esperar. Pero Él estaba lejos de ser un líder carismático, abierto a escuchar ideas nuevas. Las cosas se hacían como Él lo decía y punto. El no ser oído por su Dios hizo que se sintiera frustrado, ¿acaso no era él su mano derecha? ¿Acaso no lo había creado para ayudarlo, para hacerle notar sus errores y sugerirle mejoras? Poco a poco, esa frustración se fue convirtiendo en algo más: rencor. Y ese rencor fue creciendo poco a poco, hasta llegar el punto en que deseó el trono del cielo, para poder llevar a cabo sus nuevas ideas de reinado. ¿Y quién dijo que los deseos no pueden cumplirse? Si él era lo suficientemente astuto como para lograr su cometido. Y así fue como comenzó a "buscar aliados" entre los serafines y querubines. No había sido nada difícil la tarea, él también tenía una gran capacidad de persuasión. Pero cometió un grave error: subestimar a su Dios, creer que Él no sabía lo que se estaba gestando a sus espaldas. Para cuando encabezó la rebelión en el cielo, Él estaba al tanto de cada uno de sus movimientos. Fue así como obtuvo una atroz derrota.
Él no solía ser un dios piadoso. Mucho menos podía perdonar la traición de su Serafín más amado. El castigo para el rebelde y todo aquel que se animó a seguirlo fue el destierro para siempre.
Desde entonces, Lucifer ha perdido sus alas y se ha escondido en las profundidades de la Tierra, buscando la manera de demostrarle a Él que sus métodos eran mejores, que podía reinar un mundo perfecto haciendo exactamente lo contrario a lo que Él hace. Y buscando venganza, de paso. Por eso fue que tentó a Eva a probar del fruto prohibido, porque siempre es mejor saber, que vivir en la ignorancia. Pero no se iba a conformar con eso.
Tiempo después del destierro de los semidioses del Edén, cuando el mundo parecía haber encontrado la estabilidad y reinaba la paz y el hombre y la mujer habían conseguido vivir entre los hijos de la Tierra, como un par de mortales más, se le presentó una nueva posibilidad de demostrar su punto de vista. Y no la iba a desaprovechar.
Por aquel entonces, el edén estaba reservado sólo a Él y a esas crIaturas "mágicas" que no debían cruzarse nunca con los hijos de la Tierra. Aquel edén que esperaba celosamente al momento del juicio final, después del cual, los justos podrían habitarlo.
Pero Él, que todo lo sabía, podía ver que la paz que reinaba en el mundo no sería eterna. Él sabía que aquel Serafín que había perdido su lugar en el cielo, aún andaba por ahí buscando alguna posibilidad de destruir su creación, por eso, decidió enviar a algunos de sus Querubines a cuidar aquello que no quería perder. Así fue que decidió enviar a Shemihaza, quien era el principal y en orden con relación a él, Artakof, Kokabel, Eel, Zequel, Baraquel, Asael, Harmoni, Shamsiel y Sahariel, Aquellos Querubines se convirtieron en Vigilantes de la Tierra y la humanidad. Durante algunos años, todo marchó a la perfección, pero lo que Él tanto temía acabó pasando irremediablemente.
Lucifer se las ingenió para acercarse a los Vigilantes y, como trabaja una hormiga, a paso lento pero constante, logró hacerlos sucumbir ante el poder y hacerlos desoír las órdenes del altísimo. Así convenció a los Querubines de mezclarse con los humanos, teniendo relaciones íntimas con las mujeres y enseñándoles sus conocimientos sobre arte, ciencia, magia y tecnología. Porque el ser humano merecía saber los secretos de su creador, porque no era bueno para el ser humano vivir en la ignorancia.
Asael enseñó a los hombres a fabricar espadas de hierro y corazas de cobre y les mostró cómo se extrae y se trabaja el oro hasta dejarlo listo y en lo que respecta a la plata a repujarla para brazaletes y otros adornos. A las mujeres les enseñó sobre el antimonio, el maquillaje de los ojos, las piedras preciosas y las tinturas. Shemihaza enseñó encantamientos y a cortar raíces; Harmoni a romper hechizos, brujería, magia y habilidades afines; Baraquel los signos de los rayos; Kokabel los presagios de las estrellas; Zequel los de los relámpagos; Eel enseñó los significados; Artakof enseñó las señales de la tierra; Shamsiel los presagios del sol; y Sahariel los de la luna.
Pero todo aquello no derivó más que en desastre. Todos aquellos conocimientos hicieron a los humanos recelosos y ambiciosos, y surgieron más disputas entre hermanos y, luego, las guerras. Y de aquella unión entre los Querubines y las humanas nacieron hijos gigantes, que pronto acabaron con toda la cosecha de los humanos y se volvieron contra ellos. Y la Tierra se tiñó de sangre.
Después de todo, Él tenía razón al no querer enseñar sus conocimientos a los hombres. Ellos aún no estaban listos para toda esa información, faltarían unos cuantos miles de años más para que el ser humano pudiera usarla en pos de un mundo mejor, y no para destruirse los unos a los otros.
El castigo para aquellos Vigilantes fue perder sus alas y su condición de Querubines, y fueron encerrados en cárceles bajo tierra durante 100.000 años. Era momento de hacer borrón y cuenta nueva. Por eso Dios ordenó a Noe construir un arca gigante, donde pudiera cargar a macho y hembra de todas las especies sobre la tierra. El agua, que todo lo purifica, fue la solución que encontró. Un enorme diluvio acabó con todo lo que había sido corrompido.
Derrotado, Lucifer se volvió a confinar en las profundidades de la tierra. Pero no está muerto quien pelea, ¿No es así? Quizás, el problema estaba en su creación en sí. Si quería demostrar un punto, bueno sería hacerlo con mundo creado a su propia manera. Si Dios pudo crear el mundo y a las criaturas que la habitaban, ¿Por qué no podría hacerlo él? Pero su creación sería diferente. Sería un mundo donde los humanos y los dioses convivan como hermanos, un mundo donde todos sus habitantes posean los mismos conocimientos y habilidades que él y sus querubines, un mundo donde el pecado no exista. Sería un mundo perfecto...
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**ADVERTENCIA AL LECTOR**
Esta historia es la segunda parte de "Destino", de modo que, si lo has leído, o si la leíste hace mucho tiempo y no recuerdas, te recomiendo que primero te pases por mi perfil a buscarla. No sera una historia autónoma, haré muchas referencias a esa primera parte, incluso retomaré acontecimientos de "Destino" pero vistas desde puntos de vista de otros personajes.
Aclaro: "Destino", también tiene un epílogo de un único capítulo, "Más allá del felices por siempre", realmente no creo que sume mucho a la historia, pero, también, es ocurre antes de esta historia.
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Lo prometido es deuda, y aquí estamos, con la segunda parte de esta historia que tanto ame y que no puedo dejar atrás.. Empezó un poco rara, ¿no es así? Esto es sólo una pequeña introducción a lo que será el desarrollo de esta historia. Parte de la historia aquí contada proviene del "Libro de Enoc" un poco modificada, por cierto, para que encaje en la historia que quería contar. Por cierto, ya voy a advirtiendo que voy a tomarme un poco de licencia artística para esta historia, donde ni lo bueno será realmente tan bueno ni lo malo será realmente tan malo. Y si, con esto me estoy refiriendo a Dios y a Lucifer. En este preludio traté de plasmar un poco eso.
Espero les agrade esta segunda parte. Como ya advertí en la última actualización de "Destino" esta será una historia bastante diferente, un tanto más "oscura", más tirando a una historia de terror, de las que tanto me gustan. También vale volver a advertir, (por si no has leído las notas a la primera parte de esta historia) que, en esta segundar parte, nuestras heroínas no serán las protagonistas, aunque si tendrán mucha relevancia, sobre todo al final. ¿Quién protagonizará esta historia? Bueno, la respuesta a esta pregunta estará al comiendo del primer capítulo (que pronto subiré). No te digo cuál es su nombre porque podrías adivinar de quien estamos hablando.
Sin más que decir, les mando un saludo enorme, esperando que me acompañen también en esta nueva aventura.
Hime Mily