— Capitán Miller —
TERCERA PERSONA
La castaña llegaba riendo con el mismo chico del avión, pero no se percató de la mirada que aniquilaba al chico de su lado, brindada por nada más y nada menos que Simón Miller.
Por alguna razón algo se removió dentro de él por lo que frunció el ceño y avanzó hacia ella, la castaña le dedicó una sonrisa a su acompañante antes de que Miller llegara.
— Fue muy divertido el viaje con tu compañía — lo dijo en su tono sutilmente, mientras el chico quedaba hipnotizado por sus palabras — Espero coincidir contigo la próxima vez.
— ¿Me darías tu num...?— sus palabras quedaron en el aire.
— ¿Señorita Eira? — interrumpió Simón — La estuve esperando, disculpa me la tengo que llevar.
Eirá se quedó mirando confundida al hombre antes de asentir y volvió su vista a su compañero de asiento.
— Espérame solo un momento — habló la castaña — ¿Me das tu teléfono?
El chico se apresuró a sacarlo causando risa en la castaña que le pareció cautivador a los dos hombres.
Simón rodó los ojos al verla anotar su teléfono y se resignó al ver que ya se lo había dado.
— Soy Eira, por cierto.
— Harry, fue un gusto — dijo el rubio dejándola ir.
La castaña avanzó hacia Simón, con sus dos maletas que el chico se apresuró a quitárselas para caminar a su par.
Nadie hablaba, era un silencio tanto incómodo.
— No deberías darle tu número a desconocidos. — aconsejó el capitán — Soy Simón Miller, capitán de la FEMF.
— Entonces supongo que no te lo daré — respondió la chica — Soy Eira Diora, la nueva teniente.
El capitán se sorprendió por su respuesta, claro que la conocía o más bien la recordaba, la pequeña Eira era tierna y dulce hace años, lástima que la conocían como la rechazada y todos tenían prohibido acercarse o ser amigos de ella.
Decían que era una maldición que tenía la chica, primero sus padres y luego ella misma, la pequeña hacía todo por la aprobación y eso ocasionaba que nadie quiera estar con ella al verla tan fácil de manipular, cuando la chica se fue, todo se volvió extraño, todos lo sentían, faltaba una pieza.
Las chicas siempre se alejaban de ella y eso hacía que los chicos las siguieran, él le dedico una sonrisa de disculpa cuando la chica quiso acercarse, eran sólo niños tontos que creían todos lo que los demás decían.
— Espero podamos llevarnos bien, escuche muy buenas referencias de usted.
— Lo dudo, trabaje mucho para tener buenas referencias.
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YOURSELF | CANCELADA
Fanfic¿Rechazada? Es una palabra que conoce de memoria. ¿Amor? Solo cree en el amor propio. Eira llevaba una vida feliz hasta que el destino la obligó a unirse a aquellos que la rechazaron. Ahora se deleitará jugando con los sentimientos de los hombres, a...