ZARETH. (Completa).

9) Ignorado.

Una semana siendo ignorado y tengo para decirles que no es algo muy bonito. Se siente del asco totalmente, con todo lo de la ley. Ha estado ignorandome y ni siquiera me dio tiempo de decirle lo que siento para que pueda ignorarme con gusto. Dios, esto es terrible.

En las prácticas no me llama a la atención, prefiere dejarme hacer lo que quiero. En la universidad suele evitar los lugares por donde paso, si acaso pasa y si me ve se devuelve como un misil sin retroceso.

Pero el domingo en la iglesia fue que me marco. Nuestras miradas se cruzaron y ella quitó la mirada y prefirió irse con sus amigas de la iglesia por no irse con el equipo porque obviamente estaba yo ahí.

El equipo está sospechando de que algo pasó entre nosotros y no quiero pensar en su padre, si se da cuenta de algo va hacer más difícil para mí, aunque dudo que algo pueda ser más duro que ser un ser ignorando, por eso me decidí..

Hoy hablare con ella, le diré lo que siento y si me va a ignorar pues que lo haga con gusto sabiendo lo que siento por ella, total, no hay nada que perder.

—¡Llegas tarde! —Alex se acercó a mi con Chris.

—Y eso es extraño —concordó Chris.

—Estuve pensando y se me olvidó que debía de venir a la universidad.

Los abracé a ambos por los hombros, mientras entramos a las instalaciones repleta de personas.

—¿En como conquistar a Xia? —preguntó Alex, burlesco como siempre. Yo solo suspiré frustrado. ¿Por qué le da tanta risa mi situación? Y disque mi amigo. En fin.

—Quiero poder lograrlo —hice un puchero triste y ellos se burlaron de mí.

—Dudo que lo logres si te vive evitando cada que te ve —aclaró Chris entre risas, al ver como su pequeño cuerpo se dirige a su clase.

—Es una injusta, pero aún así me encanta.

—¡Nooo! —se echó a reír Alex y Chris le siguió el coro.

Seguimos hablando y riéndonos hasta que llegamos a mi aula y entre, ellos se fueron a las suyas. Me senté en uno de los últimos asientos y acto seguido entro el profesor de la materia "Teoría de los compiladores" muy casual para ser un hombre casi en los cincuenta.

La clase entera me la pasé cómo vieja chismosa viendo y escuchando los chismes de la semana pasada; sin embargo, los apuntes de esa materia los tome de un compañero de aula.

Hubo cambios de hora, así que salí rumbo a los casilleros por mis cuadernos de "Lenguaje C", encontrándome con mis amigos en el proceso.

—¡Chris! —le llame al verlo cruzar por un pasillo, lejos de mi.

—¿Si? —se acercó.

—¿No te ha interesado alguna de las chicas del cuarteto dinámico? —murmure al abrir mi casillero. El me miró y pareció pensarlo.

—¡Claro que sí! —contestó Alex a mi izquierda—. Es obvio que le gusta Yaris, es imposible que no le guste ninguna de las famosas Girls —cerró su casillero de golpe y nos miró sin interés.

—Alex tiene razón, todas son muy lindas, pero no creo que me gusten para una relación seria ni para nada más, solo son unas lindas nenas, en especial Yaris, pero no son mi tipo porque tengo novia —cerró su casillero después de sacar sus cuadernos, muy digno de estar con su "novia".

—Entonces. ¿Los únicos dementes somos Alex y yo? —confirme mirando a las personas caminar de un lado a otro.

—Asi es. Nos vemos en el almuerzo —movió su mano en el aire mientras se va a su próxima clase.

—Dios nos ampare —suplicamos Alex y yo al mismo tiempo que tomamos caminos diferentes.

Iba casi llegando al salón de "Lenguaje C" cuando la vi doblar para su segunda clase, por lo que trote hasta ella y la intercepte en el camino. Ella al verme dio un respingo porque iba muy metida en su mundo.

—Tenemos que hablar —dije seriamente. Ella solo esquivó mi mirada—. Xia..

—¿De que quieres hablar? —me miró finalmente, después de unos minutos.

—Sabes perfectamente de que quiero hablar —di un paso al frente, pero una de sus regordetas y pequeñas manos se hizo presente en el medio, tratando de impedir que avance más—. ¡No puedes ir por ahí ignorandome solo por eso! ¡Me disculpe así que no está bien! —tome su pequeña mano entre las mías y corte la distancia que ella trazó, tomándola por sorpresa—. No es justo Xia. Ni siquiera me dejaste decirte lo que..

—Zareth —me calló—. No te estoy ignorando por lo que pasó, sino por..

—¡Mi amor!

El abrazo que me dio Lily no lo vi venir porque estuve muy concentrado en Xia y casi me caigo por el impacto. Ella ya ha arruinado el momento, mire a Xia y su cara se contrajo mientras retoma su camino a pasos rápidos.

—¡Xia!

Salí de los brazos y de los intentos de besarme de Lily para seguirla, pero me quedé de piedra cuando doble una esquina y vi como Sebastián O'Donnell la abraza por el cuello y se van hablando. ¿Que hace Él en la universidad?

Me di vuelta enojado y vi a Lily, la cual me sonríe con maldad, haciendo que ese pequeño acto me haga querer hacer una locura, pero me contuve. Por lo que uno tiene que pasar.

—¿Que rayos te pasa? —me acerque peligrosamente a ella. Ella alzó su mirada a mi—. ¡Pensé que habíamos dejado las cosas claras cuando te dije que no quería volver a verte! —ella sonrió triunfal.

—Si no estás conmigo no estarás con nadie más, cariño —declaró y me tiro un besito antes de irse.

¡Dios! Esa tipa si es mi karma, pensé que se quedaría en los Ángeles, pero tengo una suerte maravillosa al tenerla de vuelta para dañarme más la vida.

Es mi ex, pero ella esta encaprichada conmigo viendo tantos hombres en el mundo. Ta' bien que no me pueda olvidar del todo, pero ¡caramba! Ya que me deje en paz.

Ahora con más vera tengo que hablar con ella y decirle que no es lo que piensa gracias a Lily. Me estruje la cara para luego entrar al aula y me senté en mi lugar a ver pasar las horas hasta que tocaron el timbre indicando cambio de hora.

Tome mis pertenecías y me dirigí a los casilleros, una vez guarde mis cosas fui a la cafetería y desde la puerta fue mirando a ver si la veo. Vi a los chicos haciéndome señas así que asentí.

En la mesa de nosotros está Sindy muy sentada en las piernas de su novio tóxico. ¿Qué les dije? Son personas que se aman y se dañan al mismo tiempo y solo ellos se entienden. Dos mesas más adelante está el cuarteto de las chicas, pero sin Sindy.

No perdí tiempo y fui por ella. Al acercarme ella no me vio porque está muy metida en su mundo bebiendo de su jugo de naranja.

—Holas chicas —saludé al sentarme.

—Hola, Big boy —dijeron ambas chicas entre risas, haciendo que me avergüence un poco por el apodo, eso hizo que Xia lleve su mirada a mi y se atragante con el jugo.

—¡Dios! —Yaris le dio varias palmaditas en la espalda—. ¿Estas bien? —ella asintió.

Bueno ta' bien que no sea tan lindo para ella, pero no para querer morirse con solo verme.

—Xia, escúchame.. —ella me hizo callar cuando levantó su mano a la altura de mi rostro.

—No quiero hablar ahora —volvió a meterse en su mundo—. Y tú eres el menos indicado para iniciar una conversación ahora —recalcó monótona.

—Me debes una explicación y es lo que busco.

—Te estoy ignorando por lo que pasó. ¿Contento? —replicó frustrada.

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Cuando el hombre cayere, no quedará postrado,
Porque Jehová sostiene su mano.

Salmos 37:24.
⛹️🏀✨