ZARETH. (Completa).

14) Sábado.

Por fin el aclamado sábado ha llegado, y hoy el juego estará potente, por lo que no me extrañó que el equipo completo este en mi casa, pero lo que si me incómodo un poco fue la presencia de Lily.

Aunque habíamos hablado del tema del bebé no la quiero metida en mi casa, no cuando lo de Xia y yo depende de un hilo, y creo que fui muy claro cuando le dije que solo le depositare el dinero necesario para ayudarla, sólo eso.

Estaba saliendo de la cocina con las botellas de refrescos cuando la puerta de la entrada sonó, indicando que hay alguien afuera esperando a que le abran.

—¿A quién esperas, Zareth? —preguntó Alex de meti'o.

—A nadie.

Puse las bebidas en la mesa y fui abrir la puerta, solo espero que no sea un vecino que venga a reclamar por la bulla o algo parecido. Al abrir me lleve la sorpresa de mi vida al ver a Xia en la puerta y no negaré que me dieron nervios.

Ella va vestida con un vestido ajustado a su cuerpo color gris, chaqueta verde con el logo del equipo y sus Vans verde con su corto cabello rizado. ¿Cuando lo corto?

Ella al verme me dio una sonrisa y yo le di una sonrisa de vuelta, se ve tan hermosa con to'o lo de la ley que olvide por un momento la incomodidad de Lily.

—¿Quién es, Zae? —cerré los ojos al escuchar como Lily se dirige hasta aquí.

Ella se quedó muda mirando a Lily e inmediatamente se puso incómoda. ¿Ven porque no quería que este aquí? Xia parpadeo saliendo de su trance de incomodidad y me miró.

—Xia..

—¿Esta Zoe? —me quitó la palabra de la boca. Puse mis labios en una línea recta.

—Claro, pasa —me hice a un lado y la deje entrar.

Al estar en la sala se sorprendió al ver a todo el equipo reunido y se formó un incómodo silencio, después de todo es la entrenadora sustituta e hija del entrenador.

El cual si se entera de que su hija está en mi casa me colgará. Solo espero que los chicos no sospechen de nosotros y se lo digan a su padre, aunque mis amigos ya lo saben, pero no hablarán.

—¿Están viendo el juego y no me invitaron? —preguntó recelosa.

Los chicos se relajaron al escucharla más amigable y rápidamente la acoplaron al grupo.

—¡Entrenadora, sientese aquí!

Unos de los chicos la llamo para que se siente a su lado y no negaré que me entraron los celos. Ella me miró y vió mi reacción, por lo que me sonrío levemente con maldad.

—¿Por qué no? —se acercó a él.

Zoe bajo estrepitosamente las escaleras y al estar abajo chocó con Xia, abrazandola en el proceso e impidiendo que se siente con aquel y nunca me había sentido más feliz por el comportamiento de Zoe, hasta hoy.

—¡Viniste! —chilló muy feliz y yo solo vi todo en silencio, ni con Lily fue así.

—Una pequeña amiga solicito verme —le picó la nariz a Zoe y está se echó a reír.

—¡Vamos! —agarró la mano de Xia, feliz de la vida y la arrastro rumbo a su habitación, sin prestar atención a nadie más que a ella.

Me sentí feliz por ella, por lo menos Xia la tendrá fácil con ella, aunque no pude decir lo mismo de una llamada Lily.

Me senté en mi asiento a ver el juego con los chicos, pero no le presté atención solo me la pasé pensando en Xia y en lo comprometedor que se vio lo anterior con Lily, sin contar con el hecho de que esta en mi casa, eso no me deja tranquilo.