una esposa para el herrero

capitulo 6

Ella caminaba detras de los demas observando el panorama el bosque que rodeaba el area daba la proteccion suficiente para esconderlos de los ojos curiosos, todos incluida ella, usaban las mascaras para cubrir su identidad ya que era muy peligroso dada la omportancia del trabajo de los herreros se dividieron en grupos para abarcar mas terreno.

Ella iba a conseguir semillas para la epoca de cultivo no solo de frutas y verduras sino tambien conseguir plantas medicinales,un par de varones iban con ella y otra mujer que recién habia llegado ala aldea la cual ya estaba embarazada y necesitaban tener las pantas para su parto.

No solo habian conseguido las semillas sino que tambien habia convencido a un mercader de hacerle un descuento en algunos sacos de arroz y cajas de té.

Habian quedado de encontrarse en una posada ala cual llegaron y enco taron ya algunos esperando pero ya habia anochesido y seria muy peligroso salir asi que decidieron pasar la noche ahi mientras cenaba oyo el rumor de un demonio merodeando la zona lo cual los puso nerviosos ya que al ser maestros en la elaboración de armas no contaban con la capacidad de empuñarlas pusieron incienso de glicinas para que no se acercaran ala zona esperando que hubiera algun cazador en la zona o en camino a esta.

Despues de media noche ella oyo ruidos en la area cercana ala posada ella se despertó y sigilosamente miro por la ventana atravez de la cortina que la cubria mirando no solo a uno sino a 5 seres extraños merodeando el area el olor hacia que se les fuera imposible acercarse por suerte habian llevado suficiente incienso consigo en caso de ser necesario,los dueños solo los habian mirado extraño pero despues de una explicacion ambigua los dejaron prenderlo.

Era la primera vez que veia a uno de esos demonios lo cual no solo le causaba miedo su aspecto no era humano y sus ojos mostraban ese deceo de matar,pero tambien le daban curiosidad en su antigua vida esa informacion le fue negada y ahora un nuevo mundo detras de la ignorancia de la mayoria de la gente se le mostraba.

Recordaba a su esposo hablar sobre como funcionaba la creacion de la espada y la relacion con el espadachin,solo le habia dsdo una respuesta simple,tambien el jefe le habia dicho sobre los demonios y el creador de estos,paso el resto de la noche observandolos en silencio.

Ala mañana siguiente partieron a casa apenas salio el sol debian recorrer la mayor distancia posible para estar en un lugar seguro en caso de que necesitaran pasar la noche en otro lado,en la aldea Hotaru estaba haciendo una rabieta el jefe le habia explicado que su esposa habia sido enviada al exterior con otros miembros de los herreros pero el como siempre estaba perdido en las montañas y bosque no tuvieron tiempo de avisarle sobre la situacion,ahora estaba refunfuñando en el suelo se supone que la rimera vez que ella saliera de la aldea debia hacerlo con el.

Por suerte el resto del viaje paso en tranquilidad no volvieron a saber ni toparse con algun otro demonio en su caminoel jefe los estaba esperando en la entrada y respiro con tranquilidad al verlos llegar con mas cosas incluso de las podian cargar.

Uno de los hombres que habian ido con ella le ayudo a cargar las cisas que ella habia conseguido que eran ropa,harina de arroz,fruta y algunas baratijas que le haian llamado la atencion Hotaru estaba sentado en la entrada a su hogar y al verlos se levanto tranquilamente para salidarla

-esposo regrese-ella se acerco para abrazarlo lo habia extrañado

-que bueno que regresaste aunque pudiste dejar algo mas que una simple nota-el solo se dejo abrazar pero su rostro se movio en otra direccion

-no te enojes-se acerco a una de las bolsas-mira consegui esta yukata se te vera muy bien-ella la habia comprado apens la vio penso en el ya  casi seria su cumpleaños y hotaru merecia ropa nueva ya que la que tenia siempre terminaba rota o manchada hasta el punto que no podian hacer otra cosa mas que tirarla

-hhmmpp espero que tambien hayas traido harina para hacer dangos-

-si mira-señalo el bulto

-señor haganezuka-el varon que estaba ahi lo saludó para que notara su presencia

-que quieres??-

-su esposa esta sana y salva no tiene por que preocuparse-

Hotaru lo miro segun el jefe y sus fuentes el era uno de los que habian pedido la mano en matrimonio de Keiko en caso de que su actual matrimonio con Haganezuka no funcionara asi que de entre su ropa saco unos cuchillos y lo vomenzo a perseguir

-maldito alejate de ella-ella solo los miraba el pobre herrero corria por su vida de un furioso Hotaru,ella entro ala casa para lavarse las manos y cocinarle algo ya que habia estado fuera por varios dias.

Al final el herrero sobrevivio al intento de asesinato y huyó de ahi dejando ala pareja en el comedor,Hotaru comia unas bolas de arroz mientras ella le acariciaba la espalda tranquilizandolo el aun entre dientes maldecia haciendo que ella solo riera por lo bajo.

Hotaru la miraba cepillar su largo cabello mientras tarareaba una cancion el estaba ya listo para dormir pero al recordar al jefe y su "ella aun puede arrepentirse de ser tu esposa asi que trata de ser bueno con ella" evitaba que se quedara dormido de echo tenia ya varios dias sin dormir,ella trenzo su cabello y se acomodo en el futon compartido lo miro y le sonrio

-sucede algo Hotaru??-

-hiciste falta aqui??-el trataba de ser sincero sin ser grosero

-me extrañaste??-

-y que si lo hice-fruncio el seño

-yo te extrañe-se acerco a el con la intenvion de abrazarlo y enterrar su nariz en su pecho sorprendentemente el se dejo-para la proxima vayamos a un viaje juntos

El se sorprendio ella queria viajar con el,sentia que tal vez su actitud y comportamiento era muy brusco ppr lo cual casi todos lo evitaban aunque no era su culpa ser asi pero ella habia echo que esto funcionara su vida juntos,su matrimonio lo cual hacia que un sentimiento calido se albergara en su pecho.

El la abrazo acercando sus cuerpos a un mas en un abrazo intimo enterrando su nariz en sus cabellos oliendo su shampo mientras ella sonreia ya que era la muestra de afecto mas grande que el habia echo desde que estaban casados.