Deviniendo

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¿Quién iba a decir que aceptando tal cosa, el fugitivo hallaría una solución habitacional al menos temporal? Pero así fue. Nyktalgia luego de ser penetrado por el grandote, decidió no recibir su dinero, pues se percató de que a pesar de su apariencia no pertenecía al rebaño de fanáticos deportivos; era un ser más afín a su deseo que a los rituales banales de aquellos con esa misma pasión por el huntball. En cambio, le pidió al solitario reptiloide, veinte o cuarenta horas de alojamiento en su apartamento.

--Bienvenido a mi apartamento-- le anunció el escamoso encendiendo la luz al mismo tiempo que encendía su música en un volumen tenue:

--Gracias por pagarme con este bello ambiente-- le dijo Nyktalgia mientras era escoltado por la gran zarpa del anfitrión que lo animaba a entrar impulsándolo por la espalda baja a caminar al living-room.
--Ni lo digas, Nicky, a mí me sirve más que vengas aquí conmigo-- declaró el hombre decorando la habitación con una ilusión holoproyectada donde parecían estar de un segundo a otro dentro de un monte salvaje. --Quizá preferiste que te pague así porque te gustó tanto como a mí lo que hicimos en aquél baño, ¿o es que te echaron de tu casa?

Nyktalgia no previó que tendría que inventarse un cuento para resguardar su identidad de las preguntas del trandoshano llamado Grorn, pero al menos estaría a salvo de las autoridades en ese lugar.
--Es porque me echaron de mi casa-- mintió el joven humano mirándose en un espejo que no fue opacado por el holo-espejismo. Se notó despeinado y sin maquillaje, necesitaba ducharse.

--Entiendo, Nicky, es una pena, porque eres un chico muy hermoso, debo confesarte que me recuerdas a algunas hembras humanas con las que hubiera querido estar-- le dijo Grorn admirando la figura del paliducho, quien se peinaba con sus manos frente a su reflejo. 
--Eee... gracias-- se incomodó Nyktalgia.
--¿No quieres irte a arreglar a mi baño? Tengo un peine de mi ex-novia, y también otras cosas que no sé si usas como maquillaje... Podría prestarte algo de su ropa por mientras te quedas, pues sin querer rompí el cierre trasero de tu vestimenta-latex.

Obviamente el forajido aceptó todo lo que el trandoshano le estaba ofreciendo; incluso se duchó dejando que el tosco hospedador le mirara enjabonarse y demás, tan sólo exigiendo privacidad para arreglarse y vestirse, así luego sorprenderlo en la sala, acicalado y aderezado...

Obviamente el forajido aceptó todo lo que el trandoshano le estaba ofreciendo; incluso se duchó dejando que el tosco hospedador le mirara enjabonarse y demás, tan sólo exigiendo privacidad para arreglarse y vestirse, así luego sorprenderlo en la s...

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--Su ropa te queda demasiado bien, Nicky-- le comentó tornando la expresión a una muy pervertida, relamiéndose la boca y con irrebatibles ganas de hacerle otras cosas más íntimas que sólo mirarlo y tocarle la espalda. --¿No crees que si te cocino un platillo de 700 créditos galácticos, podrás luego de comer, darme otro poco de tu cuerpo?-- añadió quitándose la remera púrpura con el logo de su equipo de huntball.

Nyktalgia caminó muy femenino hacia él, hasta ponerle una mano en su torso desnudo, de músculos definidos; no sentía que tuviese que hacer mucho esfuerzo para seducirlo, sino tan sólo dejarlo ilusionarse.
--Me parece una buena idea, pero si quieres más de mi cuerpo, te pediré que no uses tu saliva como lubricante, sino alguna crema adecuada-- el joven asesino puso la condición.
--¿No te gustó nuestra travesura a escondidas, bonito?
--Sabes bien que me ha gustado mucho, y no me esperaba que fueras considerado conmigo en esa situación; estoy aquí porque has sido muy atento conmigo a pesar de tu carta de presentación-- le explicó al trandoshano además recordando la sensación de abarrotamiento interior que lo llevó a una explosión orgásmica que no había previsto con quien consideró un simple bruto más de los clubes deportivos. --Sólo quiero asegurarme de que no me lesiones mi frágil piel con tu poderoso miembro de macho-alfa.

Las palabras de Nyktalgia enamoraban exageradamente fácil el alma del reptiloide, como si a ojos del grandulón, el joven fuese un ángel cósmico, hipnótico, deseando conocer las perversiones terrenales; perversiones de bestias insaciables como Grorn.
--¡¡Ya mismo iré a cocinarte muy rico!!

La tarde transcurrió sin sobresaltos, con Nyktalgia deviniendo mujer para obtener cosas del galán cortejador. Y aunque la Peisithanatosis en la exósfera no estaba dando señales de ningún tipo, el humano disfrutó su personaje engatusador, girando alrededor del fascinado pretendiente también para divertirse con las reacciones que podía sacarle; todo era tan sencillo.
--Me gustaría saber si volveré a verte pronto, Nicky, dime que cuando te vayas nos volveremos a encontrar nuevamente-- suplicó Grorn encantado con su misterioso y atractivo visitante.
--Déjame tu canal para holo-comunicaciones, y yo te contactaré de nuevo próxiamamente.

Al llegar la noche, definitivamente Nyktalgia ya era un invitado, pues el dueño del apartamento estaba obsesionado con las cosas que podía charlar con el afeminado; ambos sabían de técnicas de combate, del odio por la policía que, en el caso de Grorn nació cuando mataron a su hermano en una cancha de huntball usando picanas... Sobre darihuana y dónde conseguirla de calidad por las callejas del bajofondo, eso también. Pero definitivamente el forajido no sabía nada de ese deporte del cual el trandoshano era un apasionado incondicional; lo cual no le importaba al escamoso, pues él veía al chico como a una potencial novia, y para él las novias no tenían por qué saber de deportes con pelota. Comenzó a fantasear con tenerlo de novia mientras disfrutaba del sentido del humor avispado y refinado que el humano tenía, siendo capaz de ponerle condimentos pérfidos si el remate lo ameritaba.
--Es tan llano de mente-- pensó Nyktalgia al mismo tiempo que le reconocía las habilidades pragmáticas al musculoso de grandes fauces.  Y en ese momento su pulsera le indicó una llamada de Guda Seks.

--Permiso, Grorn, tengo una llamada de una amiga-- avisó él para que el escamoso se fuera a su balcón a fumar como excusa para la privacidad.

--Aquí Guda, ¿cómo vas, Nyktalgia?
--Ya me estaba preocupando que no llamaras.
--Disculpa, estuvimos haciendo un largo duelo con Larmoyana, pero bueno, ...
--Te entiendo, Guda, sólo decía.

--Bien, pues aquí estuvimos pensando en que deberás hacer la misión con Larmoyana y el droide mecánico de la nave, LE-77. El templo jedi los espera en las coordenadas que te llevarán esta noche, 23 horas, plaza Pálpato Ceedioh.
--Obtendremos el disruptor en el nombre de Prasog y Nadira...
--Ya no sólo eso, Nyk; cuando lo tengan en frente, sobrecarguen su fuente utilizando la energía del templo, y déjenlo estallar hasta destrozar todas las manzanas que su alcance permita.

--Guda, al hacer eso...
--Los planes cambiaron, Nyk, pues ahora culparemos a los jedi; me explico... Si la explosión no los destruye junto a su templo, entonces deberán dar explicaciones sobre la tragedia que, ya te digo, matará a muchos, pero, junto a ese museo donde se esconden los aprendices de Rey, hay una formidable seccional policial, por lo que el atentado será una oferta 2x1.
--Entonces serán repudiados por la mirada pública pese a tener los medios de comunicación de su lado-- razonó Nyktalgia la conclusión del nuevo giro en el guión. --Me gusta.

*El comunicador finaliza la transmisión*

La herencia de KyloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora