Tiempo después del incidente de Superior Spiderman, nuestro trepamuros favorito ha tenido que cargas las consecuencias por los crímenes que cometió Otto mientras este estaba en su cuerpo. Esto significó que para Peter, todos comenzasen a odiarlo y a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Habían pasado pocos días desde los hechos ocurridos con Loki y sus secuaces y de que los 3 Moon Knights se unieran a Parker Industries tomando cada uno distintos trabajos que a pesar de todo se reducían a ser los guardias de los niños, sin embargo, también se pudo ver que Jane Foster se había adaptado completamente a la vida en el Penthouse y que también estaba demostrando ser muy feliz con su nueva situación de ser una de las nuevas parejas de Spiderman y con el tiempo convertirse en su esposa y madre de sus hijas e hijos.
Sin embargo, había algo que Spiderman llevaba tiempo pensando y más desde aquel día en el que Punisher había asesinado a Kingpin, algo que hacía que este se arrepintiese de haber tomado una terrible decisión que no solo le había costado su matrimonio con la pelirroja llamada Mary Jane Watson, también que le había costado los recuerdos de la pelirroja sobre él y de todo lo que habían vivido a lo largo de los años y el precio más terrible y doloroso de todos: la pequeña quien se habría convertido en la hija de la pareja, Mayday Parker cuya alma había caído víctima de las garras del demonio Mephisto al no haber dicho claramente a Spiderman y a Mary Jane el precio que ambos pagarían por salvar la vida de la tía May y que todo el mundo olvidase la identidad del arácnido.
- Amado. - dijo Fénix algo preocupada al ver el rostro de seriedad de Spiderman y con el mismo mirando al exterior. - Llevas con esa cara desde hace varias semanas cuando crees que ninguna de nosotras o los niños te estamos mirando. Sin embargo, puedo sentir que sientes dolor y angustia por algo, algo que hace que apenas puedas dormir y descansar... Dime, Peter, ¿Qué es lo que te ocurre, amado mío? Sabes que puedo ayudarte en lo que sea que te preocupa.
- Siempre sabes que decir para alegrarme el día, ¿Cierto, mi pajarita en llamas? - dijo Peter agradecido con una sonrisa y besando los labios de la legendaria ave de fuego. - Es algo que llevo sobre mis hombros desde hace mucho tiempo y que siento que es algo que debo arreglar, sin embargo... ¿Cómo sería capaz de meteros en este enorme problema en el que estoy y poneros en peligro a ti, a las demás y a los niños? No quiero poneros en peligro a ninguna de vosotras y tampoco a nuestra hija y a nuestro hijo... No puedo...
- Peter... - dijo Jean quien venía a la cocina al ver que las luces estaban encendidas y nada más escuchar hablar a Peter. - Somos una familia y sabes que los problemas de uno solo de nosotros son los problemas de todos, por lo que no temas pedirnos ayuda, cariño. - dijo Jean caminando hacia Peter y dándole un tierno beso en los labios. - Y no te preocupes si es algo peligroso, somos superhéroes, ya vivimos una vida llena de riesgos y de peligros por lo que un poco más no va a cambiar las cosas.
