𝑬𝒙𝒑𝒆𝒓𝒊𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂 𝑺𝒍𝒆𝒏𝒅𝒆𝒓 𝑴𝒂𝒏

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¡Hola, mis niños! Estos días he estado leyendo experiencias al invocar a Creepypastas y me he centrado en el personaje de Slenderman.

Con todo lo que he leído me he dado cuenta de que existen muchos creepypasteros que han invocado o han tenido experiencias cercanas con ellos, pero nunca se puede saber si lo que afirman es cierto o no, tanto desde el punto de vista que pueden estar mintiendo o la mente les ha podido pasar una mala jugada. Y, aunque personalmente creo que los creepypastas nunca saldrán de nuestras pantallas, hay uno que no estoy tan segura: Slenderman.

Antes de hablar de esto, insisto que NO tengo claro de que exista, pero a veces se me sale la sospecha de "y si sí?".

Como buena creepypastera, mi personaje favorito siempre fue Slenderman (aunque también me ha provocado noches de insomnio), y le he intentado invocar innumerables veces. (cuando eres una niña y te gusta mucho un personaje, sea como sea, no atiendes a razones y lo único que quieres es verlo y hablar con él). PERO nunca pasó nada, no escuché, vi, ni sentí nada.

Entonces, ¿qué experiencia voy a contar?

Experiencia Slenderman:

Unos años más tarde después de hacer estas invocaciones en vano (quizás 1 o 2 años más tarde), una mañana me desperté de una horrible pesadilla y estaba tumbada de lado en la cama mirando hacia la pared más cercana a mi cama. Mis ojos estaban llenos de lágrimas por el miedo de la pesadilla (que nada tenía que ver con Slenderman). Siempre dejo la puerta entreabierta, por lo que entraba un poco de luz en mi habitación e iluminaba vagamente esa pared. Abrí los ojos y mi sorpresa fue que vi una sombra: una cabeza sin pelo y los hombros, como si estuviese agachado o de rodillas a mi lado, frente a mi rostro. Rápidamente me tapé con las sábanas (por instinto) y estiré mi brazo para encender la luz (el interruptor está justo al lado del cabecero de mi cama). Me destapé y ya no había nada. Subí la persiana y me quedé pensando: quizás fue la luz que entraba por la puerta que reflejó alguna sombra mía en la pared, pero era imposible, esa forma era tan humana y tan perfecta, yo no estaba tumbada de manera que pudiera confundirse esa sombra con mis rodillas o alguna otra parte, así que no sé, quizás me equivoco y mi cabeza se imagina ese momento como que vi una forma humana pero realmente solo fue una sombra mal interpretada que nada tiene que ver con un fantasma. Lo dejé pasar un poco, aunque de vez en cuando me acuerdo de eso y me da escalofríos (debo decir que no tuve síntomas de nada ni en ese momento ni en días posteriores, no tuve frío, ni un mal presentimiento, solo me acuerdo de que estaba llorando como una magdalena y justo vi esa sombra que me paró el llanto del susto que me dio).

Bien. Esto no acaba aquí. Cuando yo tenía 12 años me mandaron escribir una historia inventada para el colegio, y a esta edad yo era fanática de Slenderman, así que me inventé un origen alternativo a la historia original de Slenderman. La profesora leyó esta historia en clase cuando se la entregué, cosa que me hizo sentir orgullosa y que hice un buen trabajo y le tomé cariño a la historia. Algo normal y lógico, ¿no? Bueno. Un día (quizás 3 años después de escribirla) perdí esa historia, me acordé de ella y quería releerla porque me gustaba mucho cómo la redacté, y cuando la conseguí encontrar, la guardé dentro de una funda de plástico y la metí en un archivador bajo mi mesa de la habitación y me prometí nunca sacarla de ahí para no volver a perderla, porque como dije, me gustaba mucho leerla. Pero un verano, cuando quise verla de nuevo, fui al escritorio, busqué y busqué y no estaba. La busqué por TODA la casa y nada, no la di encontrado. Sé que no la moví de su sitio por lo que he dicho: no quería perderla otra vez por el cariño que le tenía y lo orgullosa que me hacía sentir.

Y claro, lo primero que pensé fue en que él se la llevó, pero ¿él es un personaje ficticio no?

No es la primera vez que cuento esto, pero me vi obligada a borrar el capítulo por miedo a mensajes de la gente que le encanta dar miedo y exagerar. Es una experiencia, hace 3 años que pasó esto, pero bueno, es un suceso que siempre me dejará un mal sabor de boca y la duda de: "¿dónde mierda está esa historia?" Quizás algún día la encuentre y toda esta paranoia no ha sido más que la superstición sobre la razón, pero hoy en día sigo sin encontrarla a pesar de seguir buscando, y mis esperanzas de encontrarla ya casi se han desvanecido.

Esto es todo.

Lo que he contado es real, no puedo confirmar que sea un suceso paranormal, pero para mí, hoy en día, no puedo dar una explicación lógica.

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