MI HARÉN EN EL MULTIVERSO DE DC Y MARVEL

#67 UNA MAÑANA TRAVIESA [R18]

#67 UNA MAÑANA TRAVIESA [R18]

Hummm, se siente bien. Tan bueno...

¡Mucho calor! Este sentimiento excitante es demasiado bueno. Los recuerdos de la última noche están frescos y alguien me está lamiendo la polla.

Abrí los ojos y vi a Jenny chupándome la polla. A mi izquierda, Harley duerme con el culo en alto. Oh. Bonita vista de la mañana. Puedo acostumbrarme a esto. Además, una mamada matutina de mi hermosa hermana como bono. Esta vida... Me alegro de estar vivo...

Agarré la cabeza de Jenny, un poco por encima de mi polla, "Abre la boca y sosténla. Te voy a follar la cara".

"Prométeme follar fuerte mi garganta..." dijo Jenny haciendo un puchero mientras jugaba con la punta de mi polla.

"Ese es el plan, dulce pastel", respondí.

"¿Y correrse en mi garganta?" Jenny empezó a mordisquear la punta de mi polla.

"¡Joder! Listo, ahora, abre la boca y sosténla... Sí, así", ajusté la cara de Jenny mientras abría la boca.

[Punto de vista en tercera persona]

Agarrando la cabeza de Jenny, Alex comenzó a mover sus caderas hacia arriba y hacia abajo, empujando su polla dura como una roca dentro y fuera de la boca de Jenny. Jenny estaba haciendo un ruido de arcadas cada vez que su dura polla golpeaba el extremo de su garganta.

La saliva brotaba de su boca sin cesar. Las arcadas y los gemidos se hicieron más y más fuertes con cada segundo que pasaba.

Alex aumentó su velocidad, follando implacablemente la garganta de su hermana. Ni siquiera le dio a Jenny tiempo para respirar o un descanso.

Jenny tampoco se quejó y tomó todo el dolor y el placer con una expresión emocionada. Su mano izquierda ya estaba frotando su coño mojado y empapado de semen. Anoche, después del sexo, ella y Harley no se lavaron y se fueron a dormir con el semen de su hermano dentro de su coño.

Es tan fuerte. Tan duro... ¡Joder! Su mano fuerte está agarrando mi cabeza. Ni siquiera puedo moverme. Su polla va a destrozarme la garganta. Oh, Dios, me estoy volviendo loca...' pensó Jenny.

"Tu boca se siente divina, hermana", murmuró Alex con placer. Una nueva ola de excitación recorría su cuerpo cada vez que su polla tocaba la garganta de Jenny. No pudo evitar elogiar: "¡Muy bien! Quiero que me despiertes así todos los días".

Lo haré todos los días. Mis agujeros son solo para ti... puedes follarme cuando quieras, mi amor", quería decir Jenny, pero en este momento, no tenía la libertad de hablar porque estaba complaciendo a su hermano al máximo.

"Niña traviesa, no has lavado mi semen, ¿verdad? Quiero que te folles con los dedos, que empujes cada gota de mi semen hasta el fondo de tu matriz", dijo Alex.