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Lee iba en el auto en silencio -Te pusiste perfume princesa?- Le preguntó su padre haciendo que se encogiera de hombros.

-Qué?

-Hueles muy diferente, ya te transformaste?- Le cuestionaba con cierta ilusión en su voz.

-No, un amigo me abrazó antes de irme..creo que me dejó su olor- Su padre soltó un leve gruñido mostrando su molestia.
Tenten se mantenía callada, de vez en cuando hablaba con su padre y evitaba hablar o mirar a Lee. El viaje fue bastante tranquilo y silencioso, algo que le gustaba al moreno ya que no había burlas, insultos, ni chistes sobre él.

Llegaron a ese lugar, varios recuerdos muy tétricos e incómodos llegaron a su mente, no los dejaron pasar por la puerta principal por lo que se tenían que despedir afuera -Bien, te veré en tres días- Su padre abrazaba a Tenten. Los dos ignoraban la presencia del azabache.

Hablaron unos minutos, Lee trataba de decir algo, sin embargo lo interrumpían con algún comentario -Mucha suerte hija, vas a salir de aquí siendo la más fuerte de todos- Su padre le daba el último abrazo.

-Si, gracias- La chica se acercó a la puerta principal -Cuidado al regresar

-Si- El mayor veía muy orgulloso como la menor caminaba hacia el edificio.

-Su-suerte Tenten- La nombrada lo ignoró por completo entrando al edificio -Si, como sea- Susurraba para sí mismo.

-Lee, sube al auto, ahora- Obedeció al mayor. El viaje de regreso fue uno de los peores que había tenido con su padre, lleno de insultos e indirectas de que era un completo inútil.

-Ya entendí, puedes dejar de decirme así- Un nudo se formaba en su garganta mientras que su vista iba pegada a la ventana.

-Diecinueve años y aún no te has transformado- Repetía decepcionado el mayor -No entiendo cómo demonios puedes ser mi hijo, me avergüenzas frente a toda la familia, tu primo Kitsu ya se transformó y tiene catorce años

-Tengo veintiuno- Dijo con un hilo de voz -Y es muy buena esa noticia, ya celebraron a Kitsu?

-El próximo sábado será la celebración..ni creas que faltarás

-Pero si dices que soy una decepción y que soy una deshonra para la familia..para qué voy a ir?

-Para mostrar respeto y felicitar a Kitsu mocoso idiota

-Irá toda la familia?

-Es obvio que si- El mayor tenía la mirada pegada a la carretera -Irás unos quince minutos, después inventarás que tienes tarea o algo así y te vas a ir

-Entonces para qué voy? Me voy a ir en cuanto llegue

-Para hacer acto de presencia, luego te vas, entendiste?...No voy a permitir que te vean en esa celebración, sigues siendo una deshonra con tu transformación incompleta

-Bien- Y esa fue la última palabra que dijo antes de dos horas de insultos hacia él. Un dolor muy fuerte comenzó en su cabeza seguido de un pitido molesto en sus oídos, no podía escuchar la voz de su padre.

No sabía si sentirse aliviado o preocupado.

Pasaron las horas y después de algunas paradas para ir al baño, comer algo y cambiarse por fin llegaron a la escuela, nunca estuvo más feliz de ver ese tétrico edificio de ladrillos desgastados.

Tomó sus cosas de los asientos traseros del auto -Adiós- Dijo mientras bajaba, el mayor encendió el auto sin responderle y se fue -Con cuidado- Susurró aún con el fuerte dolor de cabeza molestándolo.

Eran las 5:38pm cuando llegó a su cuarto soltando un suspiro, al entrar Shukaku lo recibió saltando sobre su cara -Yo también te extrañé- Lo tomaba en brazos mientras dejaba sus cosas en el suelo. El olor del pelirrojo seguía muy fuerte por lo que podía deducir que estaba en el baño -Gaara sigue aquí?- Daba besos y mimos al gato.

La puerta del baño se abrió dejando ver a un pelirrojo semidesnudo con una toalla en la cintura. Un suspiro de sorpresa provocó que el menor cerrara la puerta rápidamente -Ya...ya llegaste- Las mejillas le ardían -Pensé que llegarías más tarde

-S-si..la despedida fue rápida- Se aclaraba la garganta sintiendo las mejillas arderle -Puedo salir del cuarto para que te cambies

-No, está bien- El pelirrojo abría la puerta de nuevo mostrando su cuerpo semidesnudo -M-me pasas mi ropa?Está en la cama- Lee se aproximó a la cama ajena para tomar lo pedido y entregárselo al chico en el marco de la puerta -Gracias- Gaara cerró la puerta del baño tras él.

Carajo, jamás pensó que el menor sería tan lindo semidesnudo, la piel tan clara del chico dejaba mucho de qué hablar...qué nunca salía al sol?!

Por qué era tan pálido?

Eso no le quitaba lo lindo, en definitiva no. Gaara salió del baño aún con el cabello húmedo -Cómo te fue?- El menor se sentaba en su cama, el gato se zafó del agarre del azabache para ir a tumbarse a un lado de su dueño.

-Horrible, cómo de costumbre- Lee fue directo a tirarse en la cama ajena asustando al gato por su peso -Fue un viaje lleno de insultos e indirectas de que soy un inútil- Palmadas leves en su espalda lo hicieron soltar un suspiro de cansancio -Estoy cansado...

-No dormiste en el camino?

-No, los insultos de mi papá no me dejaron dormir y me duele mucho la cabeza- La ligera mueca de dolor llamó la atención del menor.

-Te duele desde hace mucho?

-Desde ayer, después de dejar a Tenten- Gaara dejó que Lee se acomodara en su cama -Voy a dormir un rato

-Bien- El mayor se hizo bolita abrazando una almohada, como si de un niño pequeño se tratara. El animal fue directo a acostarse en las piernas del azabache -Solo no lo molestes Shukaku- Éste lo ignoró por completo haciéndose bolita.
Gaara se acostó al lado de Lee notando la tranquilidad en el cuarto -No había notado tanta tranquilidad en el silencio del cuarto- Se dijo a sí mismo, el menor puso su mano izquierda en la espalda ajena notando la respiración del azabache muy pesada -Parece que si estuvo difícil el viaje

Una escuela inusual (LeeGaa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora