lost feeling ✮ daerin

12

El domingo pasó rápido, Kang se dedicó a estudiar y pensar en el día de ayer.

Hoy no haría nada en particular, así que se la pasó todo el día en casa dando vueltas en su cama sin parar, parecía que estaba poseída.

...

Llegó el lunes, se levantó con los ojos rojos, se preguntarán por qué, pues aquí está la razón.

Flashback

A la niña se le ocurrió la gran idea de bajar las escaleras corriendo, todo el día de ayer estuvo feliz por lo que pasó en la fiesta de cumpleaños de su amiga, entonces su felicidad estaba hasta el cielo, que no le importó lo que hiciera en todo el día.

Dicho esto, corrió rápidamente que su pie se dobló y salió volando la pobre criatura.

Se lastimó su brazo y pie, que estuvo toda la noche llorando del dolor.

Fin del flashback

Se alistó como siempre, y ya estaba camino a su escuela.

Llegó y entró a su salón, no quería soportar el calor que hacía allá afuera.

―Hola Kang― se escucharon dos voces particulares entrando al salón.

―Hola Minji, hola Hanni― saludó con su mano.

"Qué extraño ver a esas dos juntas sin pelearse o haciendo alboroto".

―¿Y eso que llegas temprano Hanni?― volteó a verla curiosamente.

―Ummm, Minji me amenazó― volteó a ver a Minji con una cara de disgusto.

―¿Yo que?― Minji se paró de su asiento.

―Me amenazaste, dijiste que si no llegaba temprano le dirías a mi mamá que no hago las tareas― le aventó un pedazo de papel a Minji.

Minji agarró la bola y estaba dispuesta a lanzarla de vuelta, así que salió corriendo detrás de Hanni.

―Ya se me hacía raro que estuvieran tan tranquilas― murmuró Haerin.

Volvieron a entrar sus amigas, pues ya había tocado el timbre para empezar la jornada de clases.

Cómo siempre, Hanni no se callaba, no entendía nada las matemáticas así que Minji se acercó a su asiento y empezó a ayudarla. A pesar de que se tratarán mal, se querían y apoyaban mutuamente.

Haerin solo se apresuró a terminar, ya quería estar en el receso con Danielle. Terminaron las demás horas y ya habían salido a su descanso, estaban las tres juntas caminando, Haerin solo buscaba a Danielle con la mirada, un hábito que había tomado, sin ser acosadora.

―¿Buscas a Danielle, cierto?― dijo Minji mientras caminaban, la menor asintió con la cabeza.

―Está justo allá― apuntó a una bola de estudiantes, parecían estar charlando.

―No iré, no quiero interrumpirla― agarró el brazo de Minji y se dieron la vuelta.

―Haerin, podemos ir las tres juntas si quieres verla, vamos― se paró y miró a Haerin negar.

―Esta bien gatita.

Se sentaron en una banca, estaban charlando tranquilamente mientras que Haerin estaba perdida en sus pensamientos.

¿Por qué Danielle no la buscó hoy? Siempre las dos hacían lo mismo, claramente Danielle no tenía por qué hacerlo siempre, pero ya era costumbre entre las dos. ¿Por qué cada vez es más diferente con ella? Algunas veces la trata de una forma que no tiene explicación, cómo si un día le importara y al otro no.

Estaba tan perdida en sus pensamientos que no se dio cuenta de que ya había acabado el receso.

―Haerin bonita, ya tenemos que volver― le dijo Hanni tomando su mano delicadamente.

―Ah...si, vamos.

                                    ☾
...

Las siguientes clases eran las más largas. Educación física, historia y química. Duraban lo mismo que las demás, pero se sentía una eternidad estar en esas respectivas clases.

Salieron a la cancha a jugar, no le gustaba jugar, pero al menos podría distraerse un poco.

―Tomen, aquí están algunos balones, pueden jugar lo que sea que les guste, estaré aquí si quieren venir a platicar también― dijo el profesor tomando asiento en una banca.

Ese profesor era el único que le caía bien a toda la escuela, siempre daba consejos y ayudaba a los que tenían problemas.

Haerin y sus amigas se pusieron a jugar baloncesto junto con otras compañeras de ellas.

Haerin era demasiado buena cuando se trataba del baloncesto, incluso las otras estaban sorprendidas por cómo jugaba.

―Wow Kang, lo tenías bien escondido― dijo Hanni acercándose a ella.

―Yo solo aprendí viendo algunos vídeos pero nunca jugué en público por vergüenza, esta es la primera vez― se limpió el poco sudor que tenía en la frente con un pañuelo que tenía en su bolso.

―¡Pues juegas bastante bien! deberías enseñarme, ¿verdad Minji?

―Claro, juegas muy bien Haerin― se acercó a la mencionada y le susurró ―No le enseñes a Hanni― Haerin sólo empezó a reír mientras Pham las miraba sospechosamente.

―Tengo que ir al baño, ahora vuelvo― dejó a sus amigas jugando y se fue rápidamente.

Al llegar al baño entró con la respiración agitada, había estado caminando y jugando mucho. Abrió ligeramente la llave del agua para lavarse las manos y limpiar un poco su cara con una toallita, hasta que sintió unos brazos sujetandola por detrás. Ya sabía de quién se trataba pues siempre la agarraba de esa manera.

―Haerin― una voz feliz salió detrás de Kang.

―Hola Danielle, ¿todo bien?― no le prestó atención y seguía limpiándose, pero pudo ver por el espejo como danielle apoyaba su cabeza en su hombro.

―Está todo bien, solo perdóname por no irte a buscar― la abrazó con más fuerza.

―No te preocupes por eso, no tienes por qué ir a buscarme, tienes a tus amigos y yo puedo esperar, de todas maneras yo estaba con Hanni y Minji― dejó de limpiarse y vió nuevamente en el espejo como danielle estaba recargada.

"Muy linda"

―Claro, gracias, y a todo esto... ¿Por qué estás tan roja y respirando de esa forma?― se separó de Haerin y esta la volteó a ver quedando frente a frente.

―Tengo educación física y pues estaba jugando un poco― sonrió.

―Ya veo, estás muy rojita― sonrió y se acercó agarrando los cachetes de la menor para después por impulso, dejarle un pequeño beso en sus mejillas.

―Que linda eres Haerin― quitó sus manos y volvió a abrazarla.

Haerin iba a colapsar, lo mejor era escuchar cumplidos por parte de Danielle, pero ahora venía acompañado con un beso. Lo bueno era que no se daría cuenta del sonrojo gracias a que había jugado tanto.

―G-gracias, tu también lo eres unnie― susurró tímidamente.

―Tengo que regresar, nos vemos en la salida, ¿si?― Danielle la miró y Haerin asintió.

Salió del baño feliz y triunfante, los abrazos de Danielle hacían que su corazón latiera sin parar, solo esperaba que esta no se de cuenta.