Una historia mal contada

Capitulo 14 "Mentiras y mas Mentiras"

Lay

Me desperté tarde, estaba sudando, me toque la frente y vi que era sudor frío... me levante y me fui a ducharme, mire la hora en mi teléfono y eran las 12 pm, me había quedado dormida, me desnude e intente no mirarme en el espejo, me daba asco mirarme las cicatrices de mis muslos, intente no pensar mucho y deje que las gotas de agua templada que rodaban por mi piel me relajaran, me quede mucho rato mirando a la nada, después de lavarme el pelo y el cuerpo salí de la ducha, me vestí con un conjunto cómodo y me seque y planche el pelo.

Baje al salón en busca de mi madre, pero ella no estaba por ningún lado, fui a la cocina y encoentre un plato con waffles y chocolate, al lado había una carta que ponía:

"me he ido a trabajar, te e cogido la llave y te he cerrado la puerta con llave, recuerda que no puedes salir y que tengo cámaras puestas, que aproveche mi amor" a veces no entendía sus cambios de humor.

Después de desayunar subí a mi habitación, no tenía nada que hacer, no habían mensajes de Mark y tampoco Derek. Estaba sentada en él puff de mi habitación, mientras miraba por la ventana, estaba preocupada por Jackson, no sé cómo pudo pasar todo esto. Me levanté para coger mi móvil, pero de repente un sonido de un pequeño golpe en la ventana llamo mi atención cogí el móvil y me gire para ver que era, y otra vez, estaban lanzando piedras en mi ventana, una de ellas dio tan fuerte que hizo una grieta en la ventana, fui a ver quien era, abrí la ventana y me asomé, eran Jackson,Derek y Mark, dios como me alegraba de verles, se me dibujo una sonrisa en la cara, los tres estaban ahí mirándome

–¿Que hacéis aquí? – les pregunte, mi sonrisa no se esfumó en ningun momento.

–Rescatándote de tu torre Rapunzel –Responde Derek, Jackson estaba sonriéndome, Mark en canvio, estaba preocupado

–¿Cómo voy a salir? Esto está un poco alto, ¿No? –, no me apetecía matarme, de repente, Mark se fue y cuando volvió a aparecer tenía una escalera.

–Si quieres puedes bajar por aquí, la otra manera sería que salieras por el sótano, pero dudo que esté abierto– dijo, Mark colocó la escalera justo debajo de mi ventana, tenía miedo y me temblaban las manos, pero, aun así, pude poner un pie en el primer escalón de la escalera, luego el otro, luego me di la vuelta y sin pensarle comencé a bajar las escaleras hasta que mis pies tocaron el suelo

Me di la vuelta y me fui a abrazar a Mark, y luego a Derek.

–La puerta del sótano también esta cerrada con llave–le comenté, me gire para mirar a Jackson, él estaba sonriéndome, sin pensarlo me lancé sobre él para abrazarlo, él no se lo esperaba, así que se echó para atrás, pero igualmente me abrazo –estaba preocupada por ti, ¿Qué te ha pasado? ¿Quién te hizo eso? – me separe y le pregunté.

–Malo... eh- yo... – noté que no podía expresarse bien así que le corte

–Tranquilo, no tienes por qué explicármelo ahora si no quieres o puedes– Jackson asintió y Mark se me acerco

–espero no haber tardado, ayer me preocupé mucho– me dijo preocupado, lo notaba muy raro iba a responderle cuando derek me corto y dijo:

–Será mejor que nos pongamos en marcha, tengo un plan y he descubierto algo- luego de decir so nos pusimos en marcha, mes sente en el asiento de copiloto, Mark y Jackson se sentaron detrás

–Dime, ¿Que has descubierto? –le pregunte a Derek cuando arranco el coche, él se puso a pensar y finalmente respondió

–Sé que tienes el ordenador de Katia, seguro te habrás dejado llevar por los emails de su correo, si es si, lo hiciste mal porque el email es falso, alguien sabía que entrarías – me sorprendi tras sus palabras, alguien sabía que iba a entrar en el ordenador de Katia?

–¿Qué? ¿Como que "Alguien" sabía que yo iba a entrar en su email, y como lo sabes? –el abrió la boca para responder, pero una furgoneta me llamó la atención, esa furgoneta me sonaba de algo.

–Lay, ¿me estás escuchando? – Derek interrumpió mis pensamientos

–Lo siento, ¿qué decías? –

–Digo que lo sé porque he intentando entrar yo con mi ordenador, Mark me dio la contraseña, y te digo, que la información no es igual que la del Gmail que tú viste, hay emails sobre el mismo sujetó y Katia, pero los mensajes son diferentes– se me pusieron los pelos de punta.

–¿Me estás diciendo que coger el ordenador de Katia y entrar en su email estaba planeado, es decir, ya sabían lo que iba a hacer?-- no creo que sean tan listos como para saberlo, creo que, seguramente, lo escucharon, o vieron como Katia me dio las llaves de su apartamento, pero, ¿Quién? Como siempre vuelve a ser un misterio, como todo.

–No hubo nadie en la misma habitación que tú y Katia cuando te dio las llaves?-- me puse a pensar

–Si, bueno, entro la doctora y un hombre que me echo de la habitación muy bruscamente– le dije confundida y con el ceño fruncido.

–pues seguramente alguno de esos dos– dijo Mark y Derek siguió conduciendo–

Llegamos a casa de Derek y me sente en el sofá, mientras que Derek fue a coger su ordenador y me quede a solas con Mark y Jackson.

–Los malos, en tu casa, tu madre... – Escuche mormurar a Jackson, este se cortó en cuanto dijo "tu madre", ella que tenía que ver en todo esto?

–Que pasa Jackson? Que pasa con mi madre?-- le pregunte, no quería explotarle la cabeza con preguntas, pero necesito saber cosas.

–ella... em... con malos– me quede helada, espero haberlo entendido bien.

–¿Mi madre estaba con los malos?-- Jackson asintió, y yo me quede de piedra, mire a Mark que estaba a mi lado y lo vi con el ceño fruncido, como si no llegara a entenderlo bien.

–¡CHICOS!-- el grito de Derek en la habitación llamo mi atención, nos levantamos todos rápidamente y fuimos a la habitación de donde prevenía el grito de derek. Una vez en la habitación vimos que Derek tenía una carta en la mano.

–No está mi ordenador, y para colmo, donde lo dejé lo único que hay es esta carta– Derek estiro su mano para pasarme la Carta

–Que mierda...– maldije, cogí la carta y empecé a leer:

–No corras de ellos pequeño cervatillo, siempre te van a encontrar.
Besos, Mamá

–¿Que mierda le pasa a tu madre?- protesto Mark

–"Cervatillo" –murmure, mareada, de repente sentí como si todo se me cayera encima y no pudiera sostenerme más de pie, empezó a sentirme débil y me caí al suelo.