𝙏𝙀𝙍𝙍𝘼𝘾𝙊𝙏𝙏𝘼 𝙀𝙈𝙋𝙀𝙍𝙊𝙍⚊ HAIKYUU/KNB

CINCO

―¿Cuál es el dúo especial?―Yasuhiro toma la mano de Kuroo que colgaba por su hombro, entrelazando sus dedos y acercándose más el uno al otro.

―No llegaron con ellos, se quedaron repitiendo exámenes.―Kuroo murmura, dándole un beso en la sien, ignorando el sonido de arcada que soltó Yamamoto ante la muestra de afecto.―Yamamoto, si no te adelantas, haré que corras cien vueltas alrededor de toda la preparatoria.

Taketora pasa junto a ellos corriendo.―Hasta luego.

Yasuhiro bufa divertido ante la escapada de Yamamoto.―El ataque rápido del par de Karasuno ¿De verdad es tan rápido?

Kuroo se inclina levemente, aun caminando.―Para nosotros los simples mortales.―Yasuhiro pone los ojos en blanco, sacándole una sonrisa.―Ese ataque es bastante rápido...Pero, para mi lindo príncipe, ese ataque es pan comido.

En broma, Yasuhiro finge estar ofendido.―¿Príncipe?―Mira de reojo.

Kuroo abre sus labios con sorpresa, antes de carcajearse, sacando su risa de hiena.―¡Oh! ¡Es cierto! ¡Este humilde sirviente se disculpa!―La mano libre de Kuroo agarra con cuidado ambas mejillas de Yasuhiro, haciendo que sus labios se juntara, antes de girarlo levemente, para darle un pequeño beso.―Olvidé que mi bello gatito es un hermoso Emperador.

La punta de las blancas orejas de Yasuhiro se tornan rojizas, siendo contrario a su rostro que solamente resopla divertido. Kuroo ama esa pequeña particularidad de Yasu. Su rostro no se coloca rojo de la vergüenza o del enojo, lo que delata su estado son las puntas de sus orejas.

―Espero que no sea un ataque fácil de recibir...Me gustaría algo diferente.―Murmura, ambos deteniéndose en las puertas del salón del gimnasio.

Yasuhiro rápidamente se despoja del pantalón largo para quedar en el pantalón de entrenamiento, toma sus zapatos y va al gimnasio para cambiarlos y entrar, y así seguir calentando. Lev aun apestaba en las recepciones y en los pases, pero los remates ya están pasables.

En una de esas recepciones fallidas, el balón salió hacia otro lado, Lev se acercó y se arrodilló para recogerlo, sin embrago, se quedó mirando algo más con el balón en las manos.

Yasuhiro eleva ambas cejas. Sube la mirada hacia lo que sea que estuviera mirando Lev. Resopla cuando nota que son dos de Karasuno, por lo que se acerca para pedirle el balón a Lev.

―Lev.―El mestizo despega la mirada de los recién llegados.―El balón.―Estira sus manos, recibiendo el balón que le entregaba el menor.

El silbato que anunciaba el inicio de los juegos hizo eco en el gimnasio principal de Nekoma. Yasuhiro y Lev se acercaron al banco con los demás, para sacar las pecharas con el número correspondiente.

La pechara azul oscuro, con el reluciente número diez adelante y atrás, se posaba sobre su camisa negra, sus largas coderas cubrían desde sus muñecas hasta más arriba del codo, y lo mismo con las rodilleras, que cubrían desde arriba del tobillo hasta desaparecer en el pantalón corto del uniforme. Kuroo se posó a su lado, ya cambiado y con el numero uno reluciendo.

―Muy bien, como somos un número impar, al ser los anfitriones se decidió que nosotros jugaremos contra el equipo que gane entre Karasuno y Fukurodani.―Explica. Se acerca con un tablero mediano, explicando la formación que usaran.―Nekomata-sensei ya preparó la formación para los primeros partidos; Fukunaga, Kai, Inuoka, Yamamoto, Lev, Yakkun y Yasu, serán los primeros en el partido.

Yasuhiro se acerca con cuidado hasta quedar detrás del entrenador y el profesor de Karasuno, siendo ignorado totalmente al bajar por completo su presencia. Se quedó apreciando el partido, viendo los números y estadísticas de Karasuno, notando que son unos cuervos bebes que les falta por crecer y poder volar con total libertad.