Inmarcesible || DaeJae

Lo que amor significa.

Estando recostado boca abajo sobre la cama mientras la sabana me cubría hasta la cintura, observaba a DaeHyun quien dejaba suaves caricias en una de mis manos.
Al ambos cruzar miradas nos sonreímos hasta que yo me senté mientras me cubría bien.

-¿A donde vas?

-Debo ir un momento al baño -aclaré inclinandome a dejar un corto beso en sus labios- ya regreso.

Dicho eso me levanté y caminé hasta el baño de la habitación. Ya dentro cerré con seguro para así acercarme al espejo y observarme.
Cuidadoso tomé con una mano la sabana que me cubría y con la otra dejé caricias sobre las notorias marcas que DaeHyun me había dejado.

Al sentir mi corazón acelerado de solo recordar ese encuentro sonreí pero pronto negué mientras hacia lo que debía hacer. Tras volver y no verlo en la cama pero tampoco su pijama, me cubrí bien y salí al pasillo viendo que no estaba ahí, sin embargo, al casi entrar de nuevo escuché el sonido del fregadero de la cocina.
Sin pensarlo mucho me vestí y salí caminando hasta dar con este viendo justo como se tomaba dos pastillas.

-¿Sucede algo? -cuestioné acercandome- ¿estás enfermo?

-Pensé que seguías en el baño -respondió DaeHyun quien se sentó un instante- he estado con dolores de cabeza, creo que a causa de estres.

Pensativo de eso coloqué mi mano sobre su frente al igual que hacia lo mismo conmigo para comparar la temperatura.

Siendo obvio que este tenia más temperatura, lo ayudé a levantarse y a guiarlo de regreso a la cama en donde lo abrigué.

-Solo descansa, deja que yo me encargue.

-Lo que debes hacer es recostarte -solicitó DaeHyun quien tomó mi mano- por favor.

-Solo descansa..

Al soltarme me levanté y me coloqué el suéter que llevaba al llegar ahí. Ya listo salí en dirección a la cocina en donde revisé lo que este tenia en la nevera y estantería.
Susurrando una disculpa tomé lo necesario y me lavé las manos empezando a prepara algo liviano para que este cenara.

Entre tarareos seguí cocinando por un rato más hasta regresar y verlo sentado en la cama tocando su cabeza.

-¿Sigue el dolor?

-Dudo que se vaya pronto -aclaró el pelinegro- perdón por las molestias...

-No es problema -aseguré sentándome a su lado colocando la bandeja de comida en mis piernas- te ayudaré a comer.

-¿Y lo tuyo?

-Yo cené antes de venir -aclaré con sinceridad- esto no es mucho pero te puede ayudar para que el medicamento no te caiga tan pesado al no haber comido nada antes.

DaeHyun me observó un momento y en cada una de mis acciones.

Sin esperar mucho lo ayudé a comer mientras sacas temas de conversaciones variados. DaeHyun respondía en cada ocasión que podia.