Capítulo 8:
Fiestas, estudio, trabajo, entreno, compras... Fue un maravilloso año. Después de la fiesta de graduación, nos despedimos de todos. Recibimos los mayores honores, agradecimientos y discursos de parte de todos los invitados. Aún con resaca del día anterior podía recordar cada cosa que nos paso, esas cosas que nunca olvidaré de ese hermoso-horrible lugar. Recién despertaba escuchaba un nuevo mensaje, más bien tenía una nueva notificación:
"Louise ha añadido una nueva foto".
Nuestra última foto en equipo, como nuestra promo de graduación. La odiaba por como me miraba, pero la amaba porque era nuestra última, a pesar de lo tanto que detesté a esos idiotas y a algunas de esas zorras, formaron parte de mi historia en Los Ángeles. La sorpresa llegó, y es que me mudaré fuera del país, viajaré a Londres, Inglaterra. Pero no iré sola, como siempre digo, mi alma gemela siempre me acompaña.
Empacando mis últimas cosas tenía en mente cada recuerdo vivido a lo largo de mi vida. Cada sonrisa y cada lágrima derrama en estas paredes, las que pertenecían a mi habitación. Por un lado sería un poco difícil olvidar 17 años de nuestras vidas aquí, tuvimos de las mejores experiencias, pero estábamos en busca de mejores. No es fácil, extrañare este lugar, extrañare cada mañana despertar y ver por la terraza a lo que ya estaba acostumbrada. Despertar con un hermoso paisaje, un buen olor a desayuno recién hecho y escuchar melodías de parte de mis hermanos en el delicado piano. Creo que terminaré llorando, estoy demasiado melancólica.
-¿Lista?- escuche a mis espaldas.
-No lo sé- Louise esperaba que pudiera dejar este lugar rápidamente, pero ahora que me voy entiendo lo importante que era para mí.
-Extrañaremos estos lugares, no importa a donde vayamos.
-Me hará falta cada cosa- nos abrazamos recordando nuestra infancia y adolescencia aquí.
Mi madre interrumpió y entro a mi habitación, o la que fue mi habitación.
-Mírate, cuanto has crecido, y dejarás este lugar para convertirte en señorita. Ya no es la pequeña niña que jugaba a las muñecas con Louise hasta quedarse dormidas.
-Eso creo que es parte de crecer.
-Deberías bajar con tus maletas, el vuelo sale en menos de una hora.
Hablaba con Louise de cada recuerdo que se nos venía a la mente, todos eran especiales en ese momento. Se nos fue un buen rato hablando y ya eran las 9:15 y el vuelo era a las... ¡10am! PERDERÍAMOS EL VUELO.
-¡El chofer llegó Selena!- gritaba mi madre desde la primera planta de la casa.
Corrimos bajando nuestras maletas para llegar al aeropuerto, nuestros padres nos acompañarían para despedirse de nosotras. Ya en la limosina íbamos de camino, había un gran tráfico por la temporada, no llegaríamos a tiempo con este retraso. Me relajé y esperé que avanzáramos en la carretera. Faltaban dos minutos para que nuestro vuelo saliera.
-Gracias por todo papá, cuida a Mike y Rose, los quiero, y a ti también mamá- abrazando a todos rápidamente porque no saldría a tiempo.
-Prometemos visitarte mi amor- fue lo último que dijo mi madre.
-A los pasajeros del avión H17 con destino a Londres, Inglaterra, se les pide de favor abordar en estos instantes.
Tomé a Louise y corrimos hacia la entrada, últimamente hemos corrido por todo. Le di nuestras cosas a la asistente del mostrador pero le dije a Louise que se adelantara, necesitaba un café rápido de Starbucks, ya que aún no partía el avión.
-Un Vainilla Skinny sencillo por favor- pedí a la chica del mostrador y esta se tardaba con mi orden.
-Ten, que lo disfrutes- le pagué y recibí el cambio, corrí con mi bolso porque las últimas personas estaban abordando.
Siempre hay algo malo en correr.
-Discúlpame- casi le tiró el café a un chico y me le quede mirando por un momento- ¿Dylan?
-Yo no me di cuenta por donde venía, lo siento, ¿Nos conocemos?- me miro lo suficientemente extrañado.
-Eh, creo que no, discúlpame, te confundí con alguien más.
-Último llamado a los pasajeros a abordar el vuelo H17 con destino a Londres, Inglaterra.
Lo deje ignorado al chico que creí haber visto antes y hasta sabía su nombre ¿Cómo? No lo entiendo. Me saqué de mis propios pensamientos y llegué a la entrada, estaban a punto de cerrar. Fui casi la última en entrar. Porque un chico venía detrás de mi.
Buscaba mi asiento al lado de Louise, y la escuché cantar y me di cuenta que estaba cerca de mí. Me dirigí al asiento y teníamos un largo viaje por esperar. Por suerte, traigo mis audífonos para distraerme un rato más.
Cerré mis ojos y por alguna extraña razón tenía la imagen de ese chico, recordando todo lo que me había pasado. Si no me equivoco, él fue el chico que me dejo tirada en el suelo después de que me empujara, el chico que recogí su cuaderno con un nombre pero no recuerdo cual era, no estoy segura si era Dylan. Pero no creo que fuera él, porque el chico con el que choqué hace unos momentos era más alto de lo que recuerdo y aún más guapo.
Narra Louise:
Veía un poco distraída a Selena, no tengo idea de porque se demoró tanto por un café si el servicio es rápido y no había nadie esperando uno. No creo que me incumba de porqué se tardó tanto. La veo un poco estresada, dejaré que duerma.
Soy tan curiosa que quise ver las personas que iban en este vuelo y entre ellas no podía creer a quien estaba viendo, había un chico súper guapo sentado convenientemente detrás de nosotras y tal ves ya lo había visto en otro lugar. Siento como si he perdido parte de la memoria que no me deja recordar a este chico.
Ya basta de suposiciones y mejor escucho a Iggy, amaba a esa mujer. Sus canciones son las mejores. Sin duda, una gran artista.
...
Narra Selena:
Después de 5 horas largas de viaje llegamos a nuestro destino, nuestro nuevo destino. Sentí como si el avión iba demasiado lento. Lo bueno es que no sentí el viaje por quedarme dormida con los auriculares puestos en mi oído y reproduciendo mi música de la biblioteca.
Estábamos en Inglaterra, ¡No puedo creerlo!
