Enamorado de mi enemigo (Mario x Bowser)

SEGUNDO FINAL: TE ESPERARÉ MI TOMATITO (MARIO X BOWSER)

Anteriormente:

M: “¿¡QUÉ!? ¿¡EN MENOS DE UN MES!?” Preguntó enfadado. “¡No creo estar listo en menos de un mes!”

B: “¿Es que no tienes ganas de sabes cómo se siente?”

M: “Pues por el momento no.”

B: “Venga, dale una oportunidad mi pequeño.”

Y continuamos:

Bowser estaba decidido a desvirgar a su amor, aun cuando éste no quería, pero algo en su alma le detuvo al ver a Mario aterrado y temblando.

B: “N-no… no puedo hacerte esto.” Retiró sus zarpas de los brazos de Mario y éste último se quedó confuso ante tal reacción. “Perdóname. Soy un auténtico idiota.” Lágrimas comenzaron a salir de sus ojos.

M: “¡Hey, no llores!” Se levantó y le dio unas palmaditas a Bowser en su caparazón. “E-está bien, si quieres dentro de un mes yo…”

B: “No Mario, es tu virginidad. Tú eres su dueño, no yo. Tú debes decidir qué hacer con ella.” Dijo retirándose las lágrimas. “Haces bien en protegerla.” Ante esas palabras Mario solo se limitó a cubrirse con sus manos sus partes íntimas, como si las palabras de Bowser le estuviesen incitando de verdad a protegerse de verdad. “Protégela, cuídala. Y cuando te sientas preparado para perderla, lo aceptaré.”

M: “Oh Bowser…” Su cara se sonrojó a más no poder. “Eres muy amable conmigo. Pero… ¿por qué lo eres? ¿Por qué te preocupas tanto por mí?”

B: “Verás Mario, yo…” En ese instante llamaron a la puerta del dormitorio.

Koopa: “¡Rey Bowser, es una emergencia!”

M: “¿Debería esconderme?”

B: “Sí, mejor. Métete debajo de las sabanas.” Mario se escondió tal y cómo Bowser le pidió, no solo para que no le viesen desnudo sino también por el hecho de que los súbditos de Bowser descubriesen su relación con Mario. “¿¡QUÉ SUCEDE!?”

Koopa: Abrió la puerta. “¡Luigi está aquí! ¡Le hemos atrapado!”

M: “*¿¡LUIGI ESTÁ AQUÍ!?*”

B: “¿Y por qué dices que es una emergencia?”

Koopa: “Si Mario se enterase de que atrapamos a su hermano, entonces él podría atacarnos.”

B: “¡Retírate, yo iré enseguida!”

Koopa: “¡Sí señor!” El Koopa se retiró y cerró la puerta.

B: Mario salió de su escondite y miró enfadado a Bowser. “L-lo siento mi lindo tomatito, es la costumbre todavía. Te prometo que no le vamos a lastimar."

M: “¡Más vale que así sea! ¡No sé qué haría yo sin mi hermano!” Se vistió y fue con Bowser hacia las mazmorras dónde tenían preso a Luigi. “¡LUIGI!” Corrió hacia la celda dónde estaba su hermano.

L: “¡MARIO!”

M: “¿¡ESTÁS BIEN!? ¿¡TE HAN HECHO DAÑO!?”

L: “¡No, estoy bien! ¿¡Bowser te ha herido!?”

M: “Tranquilo, todo está controlado. ¿Por qué has venido? Te dije que me esperases en casa.”

L: “¡Me preocupé de que Bowser te estuviese torturando y fui corriendo hasta aquí!”

M: “Oh bro.” Acarició la mejilla de Luigi. “No tienes que preocuparte tanto por mí.”

L: “L-lo siento.” Dijo triste. “No pude evitarlo.”