Enamorado de mi enemigo (Mario x Bowser)

CAPÍTULO 4: UNA PROPUESTA

En el capítulo anterior:

K: “Buenas.” Luigi se asustó tanto que cerró la puerta nada más que el mago solo dijese esa única palabra.

M: Al no recibir respuestas fue a ver qué pasaba. “Hey Luigi, ¿quién es?... ¿Luigi?” Su hermano estaba pálido y temblando mientras bloqueaba la puerta de la entrada con su espalda.

L: No paraba de tartamudear hasta que lo dijo. “K-kamek.”

Y continuamos:

M: “¿Kamek?” Luigi asintió súper asustado. “Déjame esto a mí.” Luigi se apartó de la puerta, confiado en que su hermano mayor se encargaría de darle un escarmiento, abriéndola Mario para encontrarse cara a cara con el brujo. 

K: “¡Qué modales tiene tu hermano de cerrarme la puerta en las narices!”

M: “¿Qué es lo que quieres?”

K: “El rey Bowser quiere hablar contigo de lo que… pasó.” Dijo mirando a Luigi.

En ningún momento le contó a Luigi lo que Bowser le hizo cuando le secuestro, no solo por lo irreal que sonaría sino también por no destruir su inocente mente. Lo que hizo que Mario reaccionase bruscamente cerrándole la boca a Kamek.

M: “¿¡Quieres callarte!? Luigi no sabe nada.” Dijo susurrando a Kamek. Luigi se quedó mirándolos bastante confundido. “Pero solo un rato, exijo una explicación.”

K: “Bien…” Dijo una vez Mario le soltó. “¡Amo, ya puede salir!”

En eso, Bowser salió de su nave ante la señal de Kamek. Luigi se refugiaba detrás de Mario asustado ante la presencia del rey de los Koopas mientras Mario le lanzaba miradas de odio y repudio por lo que le hizo cuando le secuestró. Ya delante de los hermanos Bowser dijo:

B: “Mario… ¡hablemos!”

M: “Entra en casa Luigi.”

L: “P-pero Mario…”

M: Se giró y le sonrió. “No te preocupes, lo tendré todo controlado.”

L: “O-ok…” Se metió en la casa y cerró la puerta.

M: “Muy bien Bowser, ¿qué es lo que quieres ahora?”

B: Se arrodilló ante los pies de Mario. “Disculpa. Lo siento muchísimo Mario.” Lágrimas salían de sus ojos. Mario lo miraba sorprendido: su mayor enemigo estaba pidiéndole perdón llorando, suplicando mientras sus garras agarraban sus talones. “Si hice lo que hice no fue para dejar desprotegido al Reino Champiñón… lo hice porque… ¡me gustas Mario!”

M: “¿¡QUÉ!?” Le retiró sus garras y le lanzó lejos. “¡SI ES UN CHISTE MÓRBIDO TE SALIÓ BIEN, PERO SI NO LO ES, ENTONCES ES QUE ESTÁS MUY ENFERMO!”

B: Kamek quiso detener a Mario, pero Bowser se lo impidió. “No Mario, es de verdad. Hace días que no dejo de pensar en ti, y no por lo frustrante que fuiste cada vez que me aguabas mis planes, sino por lo bonito que eres.”

M: Se sonrojó. “¿D-de… verdad? ¿Te parezco bonito?” Bowser asintió. “Vaya je, je.” Reía con nerviosismo. “La verdad es que nadie me ha dicho que yo sea bonito. Gracias por el alago… ¡Pero yo no siento lo mismo por ti! ¡No después de todas las veces que secuestraste a la princesa y de las veces que le hiciste daño a Luigi y al mundo entero! ¡So long King Bowser!” (*Nota de la autora: tenía ganas de escribirlo, lo necesitaba XD*)

B: Mario caminó en dirección a su casa. “¡Espera Mario! ¡Te propongo algo!”

M: Se detuvo y giró su cabeza. “¿Uh?

B: “Ven conmigo a mi castillo tres días. Tendrás tu propia habitación, mis cocineros te prepararán tus comidas favoritas y te dejaré hacer todo lo que quieras.” 

M: Mario le miraba entre sorprendido y dudoso. “¿Solo tres días?”

B: “Sí, tres días.”

M: Lo pensó por unos segundos, suspiró y le respondió. “Está bien. Pero si resulta ser una trampa te juro qué…”

B: Abrazó a Mario feliz. “¡Gracias, gracias!” 

M: “Suéltame… por favor.”

Tras una larga charla con Luigi éste último le costaba aceptar la propuesta de Bowser, ya que, al igual que Mario, sospechaba de que fuese una encerrona (*Nota de la autora: una encerrona es una forma de decir que es una trampa*) y que además Mario no le dijo los motivos para tal invitación. Temía por la seguridad de su hermano mayor, no sabía qué haría si él se fuese, por lo cual Mario le dijo, antes de embarcar en la nave de Bowser:

M: “Escucha Luigi, si no regreso en 72 horas ven a buscarme.”

L: “O-ok bro…” Le abrazó con todas sus fuerzas empapando la ropa de Mario con sus lágrimas. “Por favor, ten mucho cuidado.”

M: “Lo tendré, y en todo momento.”

Y esto es todo por ahora.

He de confesar que me puso triste escribir esta última conversación entre Mario y Luigi 😭

En fin, nos vemos 💕