Eso éramos nosotros... hermanos

SORPRESA

-Ale, ven- Louis me agarró de la muñeca y me llevó al comedor.

- ¿Qué ocurre?

- Hay algo que no te he dicho porque no era yo quien tenía que contártelo, pero, por favor, intenta llevarlo lo mejor posible.

- ¿De qué estás hablando, Louis?

- Tú has vuelto... ¿con los sentimientos claros?

- Mis sentimientos están más claros que nunca, Louis- sonreí y le acaricié la mejilla-. Vamos, tengo que hablar con los chicos.

- No creo que sea el mejor momento- dijo Hiroshi, apareciendo de la nada.

-Madre mía, estáis muy raros- sonreí-. Vamos a saludar a la gente que ha llegado, no seamos groseros.

Estaba un poco confusa, pero la alegría de ver a mis chicos me tenía en una nube. Sin embargo, esa nube se volvió negra y tormentosa. Cuando entré en el salón, me encontré con un grupo de mujeres en el salón.

-Buenas tardes- dije, acercándome a ellas.

- Oh, buenas tardes- me respondió una de pelo largo, castaño y rizado-. ¿Eres amiga de Subaru?

- ¿Eh? No, no- me incliné-. Soy Alejandra, su...

- ¡Ah! ¡La hermanastra de los chicos! - gritó una de pelo corto y negro.

- Mika, no seas grosera- una rubia de ojos verdes se acercó a mí-. Discúlpala, es demasiado indiscreta. Soy Ume Tanaka, encantada de conocerte, los chicos nos han hablado mucho de ti.

- Ya veo...- no sabía por qué, pero esas mujeres me hacían sentir incómoda-, y vosotras sois...

- ¿Ale? - una voz me llamó-. Ale, ¿eres tú?

- ¿Saka?

- ¡Ale! - corrió y me abrazó-, ¿cuándo has vuelto?

- Hoy- la miré, perpleja-. ¿Qué haces aquí?

- He venido por el cumpleaños de mi querido cuñadito- dijo.

- ¿Cu...cuñadito?

- Claro- entonces, se acercó a Yuusuke y lo agarró del brazo-. Todas hemos venido a celebrar el cumpleaños de Subaru.

Entonces, todas las mujeres se colocaron al lado de mis hermanos. Al lado de Natsume estaba la chica que nos encontramos una vez en el restaurante mientras cenábamos y que coqueteó con él descaradamente.

Yo me quedé sin palabras, mi cabeza no estaba procesando lo que estaba ocurriendo.

-Ale, deja que te expliquemos...- empezó a decir Masaomi.

- ¿Qué le tienes que explicar, cariño? - la mujer de pelo castaño lo agarró por el brazo.

- Pensaba que estabais en contacto- dijo una chica de pelo azul que agarraba a Iori de la mano mientras él apartaba la mirada de mí.

- Madre mía, ¿entonces no le has dicho lo de la boda, Masaomi? - intervino otra, la que estaba al lado de Kaname.

- ¿Qué boda? - me costaba respirar.

- Madre mía, menuda cabeza tenéis- se rio la que agarraba a Azusa por el brazo-. Masaomi, Ukyo, Kaname y Natsume van a casarse, ¿no es genial? A ver cuándo nos toca al resto.

- ¿Qué? - se me cayó el alma a los pies.

- Ale, íbamos a contártelo- empezó a decir Natsume.

- ¿Cuándo? ¿Cuándo ya estuvierais en la Luna de Miel? - apreté los puños e hice un enorme esfuerzo para mantener la compostura-. Pero bueno, lo hecho, hecho está. Me alegro mucho por vosotros, por todos. Está bien saber que habéis encontrado a unas chicas que os quieran y que os hagan felices.