En capítulos anteriores......Narra Meliodas
No me esperaba la pregunta de Elizabeth, me tomo por sorpresa, pero a que se refiere con que si "la quería aún siendo defectuosa" no lo entiendo, esto me está inquietando cada vez más.
De la nada Elizabeth aleja su rostro de mi mano y se voltea dándome la espalda; pero que diablos estoy haciendo, claro que no me importará si ella no es perfecta. Tomo a mi chica por los hombros y la volteo, quedando frente a frente.
Meliodas: Elizabeth, no me importa si te consideras fea o con muchos defectos, porque para mí tú siempre serás la unica, te amare con todo y defectos lo entiendes; así que quiero que habrás tus ojos y me mires.
Ella continúa sin abrir los ojos y con la cabeza baja, pero por lo bien que la conozco me doy cuenta que lo está pensando, porque esta mordiendo su labio inferior.
Meliodas: (me acerco a su oído y con mi voz más ronca digo lo siguen) si no abres los ojos.... te prometo que voy a levantar tu falda... Y te haré cosas sucias al igual que antes....
Me alejo de su rostro y veo como sus mejillas se tornan de ese rojizo que me encanta, acaricio su mejilla con mi mano, mientras veo como se pone más nerviosa, una sonrisa de lado se dibuja en mis labios.
Meliodas: Tomaré ese silencio como que puedo hacer lo que quiera, hasta que decidas abrir los ojos.
Elizabeth: Se que en cuanto abra los ojos usted no volverá a verme de la misma manera *su voz denota tristeza*.
Odio escuchar a mi princesa así de desanimada, pero creo saber a los que ella le llama defecto y si es lo que me imagino, creo que me voy a reír.
Para sorpresa de ella tomo su falda con mis manos y la levando, dejando a la vista sus hermosas bragas de color celeste y de igual forma ella abre sus ojos los cuales me miran con gran sorpresa.
Meliodas: (le dedicó una sonrisa de lado) Que pensabas que de verdad no lo iba a hacer.
Elizabeth: No creía que lo harías.
En cuanto mi princesa se percata que abrió los ojos los vuelve a cerrar y los oculta detras de sus manos al tiempo que voltea la cara así otro lado.
Meliodas: Nena, ya he visto tus ojos y aún me sigues pareciendo la más hermosa diosa, princesa y chica que ha pisado está tierra, por favor dejame ver esos hermosos ojos.
Tomo su cara y la volteo nuevamente en mi direccion, mientras acaricio su mejilla, mi hermosa chica me permite volver a ver sus preciosos ojos azules, con lo que ella le llama defecto, ahi confirmo mis sospechas al ver el emblema de las diosas en su ojo derecho; sonrio antes de acercarme a su rostro y besar ese ojo al cual ella le llama defecto.
Elizabeth: por favor no me tenga lastima señor Meliodas, esto debe ser muy desagradable para usted.
Meliodas: No quiero volver a oir que digas que eres desagradable, porque no lo eres.
Frunzo el ceño por lo que acaba de decir Elizabeth, no gusta que se sienta triste, escuchar que ella se diga devil y mucho menos que ella misma se haga inferior a los demas; tan solo oir eso me hace querer protegerla del mundo entero.
Me siento frente a ella, para luego tomar una de sus manos y atraerla hacia mi, haciendo que mi chica quede de cuclillas sobre mi regazo con su falda un poco levantada; la peliplateada me mira con sus ojos cristalizados, casi al borde de las lagrimas.
Pero me rehúso a verla llorar otra vez, coloco mi mano en su mejilla y acerco mis labios a los suyos, sellando los en un besos que calmo su casi llanto, mientras mi otra mano en su espalda baja hace que se le erize la piel. mis labios toman el total control de sus inexpertos labios, para enseñar le a mi princesa los besos que tanto le encantaban.
Profundizo el beso introduciendo mi lengua en su boca, jugando con su torpeza mientras muerdo de vez en cuando sus labios, mientras mis manos se pasean por debajo de su blusa al mismo tiempo que mi otra mano baja a su cintura acercando la mas mi, hasta que siento como el centro de Elizabeth rozo con mi miembro ahora erecto, de sus labios se escapa un pequeño gemido que es callado por mis labios.
Pero como todo lo bueno no dura para siempre, nuestro besos no era la exención ya que ambos necesitamos respirar por lo cual nos separamos con la respiracion agitada, mi diosa no me quitaba los ojos de encima y yo tampoco a ella; yo continue mi recorrido por su cuello donde comience a dejar un camino de besos y donde deje una mordida muy notoria y por la cual mi chica me regalo un grito de placer que me dejo mas duro de lo que estaba.
Elizabeth: Me..melioda!!! no hagas eso...
El cuerpo de mi chica tiembla para luego apoyar su cabeza sobre mi hombro, mientras trata de regular su respiracion; le hago caricias con mis dedos en su espalda, para que se relaje un poco. Al cabo de unos minutos ya estamos mas tranquilos, Elizabeth por su parte no ha querido mirarme por la verguenza que siente en estos momentos y yo no puedo dejar de sonreir por ser el causante de ese sonroja en sus mejillas.
Meliodas: Nena ya dejame ver, no pasa nada, te prometo que no pusiste caras raras.
Elizabeth: No, no volvere a verte hummm! (hace puchero).
Meliodas: Y que tal si te convenzo de mirarme.
Muerdo el lobulo de su oreja haciendo que la chica se sobresalte y se aleje un poco de mi, ahora estado frente a frente a mi, le dedico un sonrisa; antes de notar que el cielo de la nada se lleno nubes de tormenta, mientras se acercaba un aura muy conocida para mi.
Tomo a Elizabeth de la cintura, para levantarla junto conmigo y la dejo de pie a mi lado, mientras cuento 6 pasos a la derecha de ella, miro al cielo y luego a ella.
Meliodas: No te acerques.
Luego de eso un rayo cruzo justo a mi lado llevándome junto con el.............
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Bueno chicos/as como tenia tanto tiempo sin subir capitulo pense, porque no subir dos ya que se los debo de los meses pasados y pues aqui esta el otro, espero que le haya gustado lo suficiente para una estrella y pues hasta la proxima pecadores.
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Recuperando mi pasado
Fanfiction1500 años después de que la guerra santa se apaciguó nuevamente, ya en el mundo actual, Elizabeth, Diana y Elaine son estudiantes como cualquier otras con vidas normales y familia normal hasta que un día. Se escuchan tres estruendo en una feria en...