◆Tʜᴇ ᴍʏsᴛᴇʀʏ◆

꒷꒦꒷𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟑꒦꒷꒦

Adiós pelirrojo, hola soledad y problemas~

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"Muy bien, Anchor"- empezó a decir el pelirrojo, me gire y le preste atención dejando de lado el lápiz que antes estaba en mi mano -"Elige, guadaña o espada"- yo solo me le quede viendo confundido, Shanks tenia ambas manos detrás de su espalda. Era un tanto sospechoso y no parecía ser cauteloso al respecto. Yo solo carcajee con diversión.

"¿Disculpa?"- pregunte divertido con una ceja levantada, dándole un sonoro sorbo a mi café diario mientras desviaba mi mirada hacia detrás de Shanks. Vi que casi toda la tripulación, por no decir toda, tenia una mirada de irritación bastante notable. Solté una risita al ver a Beck pasarse la mano por la cara con frustración, totalmente abrumado por algo, ¿Qué habrá hecho Shanks esta vez?. Logre escuchar la leve carcajada de Makino que estaba detrás mío buscando una bebida debajo de la barra, obviamente había llegado a ver las expresiones de molestia de los piratas.

"Carajo, que elijas, guadaña o espada"- dijo ya algo molesto, desde que me entere que le jodía el sonido que hago cuando tomo café siempre procuro joderlo cuando tomo café, hecho patrocinado por Beckman y Yassop. Yo solo sonreí con diversión ante su molestia.

"Mmm, Espada"- elegí, dándole otro sonoro y ruidoso sorbo a mi café mientras que distraídamente veía de reojo los bocetos que hice en el cuaderno que hace no mucho me dieron, fue un gesto bastante lindo de Beckman dármelo por mi cumpleaños a decir verdad.

"... Intenta otra vez"- dijo ahora irritado y con el ceño fruncido, sacando una mano de detrás de su espalda y poniéndola en su cintura. Logre llegar a ver algo detrás de el, era como un tipo de vara o batuta diminuta de color negro, creo y tenia un lazo.

"Je, bien, guadaña"- respondí, ya dejando de lado la vacía taza de porcelana con una sonrisa relajada en mi cara.

"¡Buena elección!"- exclamo con emoción, sacando de detrás suyo un tipo de batuta hueca con un botón gris en uno de sus costados, tenia amarrada a ella un lazo dorado. Shanks presiono el botón y esta pareció plegarse, dejando a la vista una hoja plateada que más que emocionarme causo una leve conmoción en mi. Estoy seguro que mis ojos se oscurecieron más de lo que ya estaban mientras que mi espalda chocaba con la barra. 

Shanks volvió a presionar el botón y la maldita guadaña volvió a la apariencia de una inofensiva batuta, me lanzo aquel aparatejo y yo con torpeza lo atrape. Makino hizo acto de presencia con una botella de sake desde debajo de la barra, viéndome con una sonrisa de inocencia y duda. Yo solo temblaba.

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"Entonces... ¿Ya se van?"- pregunte con una mirada de pesar, viendo al pelirrojo hincado frente a mi que me veía con una sonrisa de comprensión.

En todo este tiempo que se quedaron, este año... Se había vuelto una persona muy importante para mi. Me podría atrever a afirmar que fue lo más cercano que pude tener como figura paterna desde que tengo memoria. Y digamos que dejarlo ir de un momento a otro no fue lo más grato. Le debía mucho, él junto con su tripulación, en especial él, me ayudaron en tener más... confianza en mi mismo...

Pero... Ahora se irían de esta isla para siempre... Él se iría de esta isla para siempre. Tal vez... Lo encuentre en el mar cuando ya sea un formidable pirata, o cuando ya cumpla mi sueño.

Pobre niño soñador, debería de tener los pies firmes en la tierra, en el mundo real.

Ahora que ellos se irían, toda la felicidad, toda la calidez que sentí junto a ellos... Simplemente... Se iría con ellos. Otra vez estaría solo, siendo rechazado por los demás, con Makino sintiéndose culpable de todo, llorando por la noche maldiciendo su falta de atención...