Le gusto.

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Sentía un brazo por mi cintura, no me incomodaba pero no entiendo porque siento eso.

Me desperté y vi que ami lado estaba Cellbit y me estaba abrazando, rápidamente me aparte y caí al suelo eso hizo que Cellbit también se despertará.

-¿¡Guapito!?
Mientras se levantaba para ayudarme.

-Ah... Me duele.

-¿Que pasó? ¿porque te caíste?

-Ah... No se, bueno... Es que...

-¿Qué?

Justo escuche el timbre y le dije a Cellbit que me esperará aquí... No quería que lo vieran si es que era Rivers o Mariana... Me joderan toda la semana. Abrí la puerta y era una cara conocida.

-¿Spreen?

-Hola capo.. Se que dijiste ayer que no me querias aquí pero no me diste tu número...

-¿Como? ¿Yo ayer hable contigo? Pero si no sali de ca... -

-¿No recuerdas nada?

-La fiesta... Mierda... ¿Tanto tomé...?

-Si, no recuerda ayer... ¿Como me decias que querías más?
Lo miro con una cara de confusión y me quedé pensando, en que amanecí con Cellbit en la cama ahora me está diciendo Spreen que yo le pedía más...

-Spreen no se de que hablas la verdad... Si es algo de ese tema que pienso, lo dudo mucho... Además tu ya estas con ese tal Juan

-Entonces... ¿Roier me ayudas?

-Claro, entra.

Entró y comenzó a explicarme lo que necesitaba pero antes de seguir le dije que me diera un momento, fui a la cocina para llevarle algo de comer a Cellbit.

-¿Un sándwich?

-Si.

-¿Para quien es?

-Para ti no lo es.
Dije mientras subía las escaleras, cuando entre vi a Cellbit dormido así que deje el plató en la mesita de noche y me acerque para verlo más de cerca.

Volví a bajar y vi a Spreen mirando unas fotos que tenía cerca de una mesa.

-¿Que hacés?

-Ah.. Nada.
Rápidamente se dio la vuelta y se acercó a mi.

-¿Nada cabrón? Acaso Nunca te enseñaron a no ver cosas que no soy tuyas.

-Yo so.... -

-Mejor ven a sentarte te ayudó.

Después de una hora y cuarenta minutos termine de ayudarle y lo llevé a fuera.

-Gracias por ayudarme capo.

-No es nada.

Por unos segundos hubo un silencio algo incómodo para mi pero después vi como se me acercaba y casi me agarraba dea cintura pero escuchamos un ruido así que le dije que me tenía que ir y solo cerré la puerta, cuando me vi la vuelta vi que esta Cellbit con un vaso y sentado en el sillón.

-Eres tú.. Hola gatinho.

-¿Por qué vino Spreen?

-Necesitaba ayuda en algo.

-¿Ayuda? Si no fuera por el ruido te iba a besa.

-¿Como sabés eso?

-Es obvio...

Me senté a su lado y puse mi cabeza en su hombro y estuvimos un rato así hasta que decidió irse. Cuando terminó de ducharse y cambiarse nos despedimos pero antes de hacer me agarro de la cintura y me beso rápidamente y después de eso salió de la casa.

Mi felicidad eres túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora