☂︎ 𓆰𓆪 «Al igual que sus dragones, los Targaryen no responden ni a dioses ni a hombres y estos Targaryen descubrirán que el amor es la magia más poderosa. El cual siempre los guiará hacia donde necesitan ir»𓆰
Se encontraba siendo curada cuando escucho como tocaron la puerta para luego de unos segundos alguien entrara a la habitacion.
-Me dijieron que casi mueres - comento el en forma preocupada pero a la vez burla mientras se acercaba a ella con delicadesa.
-Morir es una palabra muy fuerte - respondio ella mientras agarraba la mano de su hermano pero este enmediatanemte la abrazo con fuerza-
- Me dijieron que casi mueres- dijo en un susuro el- Casi te pierdo.
-Estoy bien, hermano, estoy aqui y no me ire - respondio ella en un intento de tranquilizarlo mientras se separaba - me dolio - comento ella haciendo referencia a las heridas de su espalda-
- Perdón - comentó apenado él, para luego dejar un beso calido en la frente de la chica.- ¿Cuan graves son? - preguntó Aegon a los maestres que curaban a su hermana.
-Las heridas de la espalda volvieron a abrirse y tiene unas nuevas en el rostro, la princesa necesita descansar para curar por completo o sus heridas pueden hacerse mas grandes - informó un maestre.
-Ahora no hay tiempo para descansar, debemos pelear, el trono de nuestra hermana fue usurpado - respondió la Targaryen mientras se recomponia para tratar de caminar.
-Princesa si no deja sanar sus heridas adecuadamente puede morir debido a una infección - volvió a reiterar aquel maestre con preocupación.
-Alexandra - la llamó su hermano.
-Aegon. - respondió ella mientras miraba atentamente a su hermano en espera que dijiera algo.
-Puede retirarse maestre, gracias - ordenó el mayor para luego ver cómo solo ellos quedaban en la habitación.
-Debes descansar.
-No podemos darnos ese lujo, debo ir a batalla, Aegon por favor - pidió ella.
-No nos sirve de nada un hombre herido en batalla, debes quedarte acá y ayudar a nuestra hermana en el consejo - informó Aegon con cierta demanda.
-Aegon, por favor. - pidió ella una vez más.
-No, es mi última palabra Alexandra - declaró Aegon mientras veía a su hermana bufar, ante esto fue y la agarro de ambas manos para comenzar a verla a los ojos - Escúchame cuando mejores volverás pero ahora debes descansar, puedes morir ya escuchaste y sabes que ahora más que nunca te necesito, te necesitamos. - dijo él para luego besar su frente.
-¿Como se encuentra mi bebé ? - preguntó Alexandra luego de unos minutos de silenció.
-Tu bebé de 10 metros se encuentra bien, está un poco herido pero bien - respondió él - Ambos salieron afectados de ahí.
-Cuidalo por mi, por favor y dile que estoy bien - pidió la chica.
-No te vas a morir, no seas dramática- dijo él con burla.
-Callate idiota - respondió ella mientras le golpeaba el hombro.
-Que delicada - comentó él mientras se sobaba el hombro - No entiendo como Lucerys aceptó a casarse contigo, eres un dolor de cabeza.
Ante este comentario la chica abrió la boca con ofensa.
-Se supone que soy tu hermana, animal - dijo ella.
-Por eso mismo lo digo.- respondió él para luego esquivar algo que la chica le había lanzado.- Que violenta.
-A todo esto,¿Como te fue en el norte? - preguntó ella .
-El norte recuerda hermana - respondió él - Los Stark son hombres honorables tanto como para que uno viniera hasta acá a jurar lealtad. - comentó este, para luego reírse de la reacción de su hermana.- Al parecer aún te afecta su presencia.
- Él y yo no terminamos en muy buenos términos y lo sabes.
-Si en muy buenos términos te refieres a haber roto su corazón para luego huir pues si. - comentó él con graci ante aquella pequeña desgracia de su hermana. - Quieras o no vas a tener que verlo tarde o temprano, solo quiere hacer un tratado por nosotros y debemos estar ahí.
-No quiero verlo, que le voy a decir cuando lo vea ?
-Nada- respondió Aegon - el pasado se queda en el pasado, es todo, además tú ya estás comprometida así que si sigue teniendo sentimientos del pasado sabe perfectamente que no van a ser correspondidos.
-Eso es lo que más me preocupa. - comentó ella con cierta duda mientras veía a su hermano negar.
-Eres menor y tienes más vida amorosa que yo, que vergüenza - comentó Aegon mientras le daba el brazo a su hermana para ayudarla a caminar.
-¿Segura que puedes ? - preguntó su hermano mientras la sostenía.
-Si, Vamos a recibir a nuestro invitado.
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