31

504 79 8
                                    

- ¡Levántense! - ordenó ella. - No vuelvan a faltarle el respeto a la princesa Rhaenys o a algún miembro de la realeza, o rodarán muchas cabezas, y Sir Alfred será el primero.

Ante esta declaración, la cara del lord pareció decaer con miedo, al igual que la de los demás lores.

-¿Y qué es lo que sugiere que hagamos, mi princesa, hasta que la reina Rhaenyra vuelva? - preguntó otro lord con cierto temor.

-Reforzaremos a nuestros soldados. Que nadie entre ni salga mientras el príncipe Jacaerys o la princesa Rhaenys no sean informados - ordenó la castaña. - Mandaremos a una tropa a patrullar la playa en busca de algún indicio de mis hermanos y cuñada.

Los lores asintieron de inmediato, para luego ver cómo la castaña hacía una pequeña reverencia a Jacaerys antes de salir de la sala, seguida por Lucerys.

-Ella da miedo - comentó un lord en un leve susurro, lo suficientemente fuerte para que todos escucharan y asintieran enseguida.

✧✧

-¿Estuvo bien? - preguntó con temor la castaña a su prometido mientras entraban a su cuarto. Él sonrió con ternura.

-Hasta me diste miedo - comentó él con una sonrisa mientras agarraba las mejillas de la chica para sembrar un pequeño beso en sus labios.

-No sabes el miedo que tuve; pensé que se iban a revelar o algo peor - susurró ella alarmada.

-Nunca hubiese dejado que te tocara un solo cabello - informó el príncipe con ternura mientras la abrazaba por la cintura y dejaba pequeños besos en las mejillas de su novia, tratando de calmar su ansiedad. - Si te tocaban, los hubiera matado en ese momento para luego reducir sus casas a cenizas.

La castaña abrió la boca para decir algo, pero fue callada de inmediato por el chico, que la besaba con necesidad.

-Mi Alexandra. Drīve hen ñuha se ñuha ope, vēzos qēlossās ñuho - habló él mientras se separaba del beso para comenzar a dejar pequeños besos en sus mejillas, haciendo sonreír y sonrojar a su chica. - Eres tan hermosa.

-Eso lo dices para enamorarme - comentó ella de forma graciosa mientras dejaba un besito en la nariz de él, para ver cómo este negaba con una sonrisa.

-Lo digo porque estoy tan enamorado de ti - indicó él para luego volver a besarla, esta vez con ternura, haciendo sonreír a la chica aún más.

-Deseo tener hijos contigo - habló de repente ella, sorprendiendo al muchacho.

Era obvio que en un futuro iban a tener hijos, pero nunca habían hablado del tema, pensó Lucerys mientras la veía en silencio, haciendo sentir a la chica insegura.

-Si no deseas tener hijos, lo entenderé - comenzó a decir ella al ver cómo Lucerys no decía nada, pero este la calló con un beso fugaz.

-Tendremos todos los hijos que desees - declaró él, sorprendiendo a la chica.

Sintió de repente cómo Lucerys la levantaba entre sus brazos para depositarla en la cama de su habitación, haciéndola acostarse junto a él y comenzando a abrazarla por la cintura sin despegar la mirada de sus ojos. La chica sonrió lo más que pudo ante esto para comenzar a besarlo con ternura.

-¿Incluso si deseo un ejército propio de niños de cabellos castaños? - preguntó ella con cierta ternura y gracia a su chico.

-Tendremos un ejército propio si así lo deseas; haría cualquier cosa por verte feliz - comentó él, besando cada parte de su rostro. - Casémonos hoy.

Ante aquello, la chica abrió los ojos con sorpresa para mirarlo y buscar alguna señal de burla en él, pero no encontró más que seriedad. Lucerys hablaba en serio.

- Desde que tengo memoria te he amado. Eres mi esperanza y la razón de mis deseos. Te necesito como el aire que respiro, mi corazón late por ti y clama tu nombre cuando no estás. Eres y serás la única mujer en mi vida y corazón - decía mientras agarraba las manos de la castaña y veía cómo sus ojos se cristalizaban mientras hablaba. - Concedeme el honor de ser tu esposo y pertenecerte; pondré a mi disposición todo lo que soy y lo que tengo. Prometo amarte y respetarte con todo mi corazón, y serte fiel en cada momento de nuestra vida juntos. Mi devoción por ti será infinita, y cada día lucharé por hacerte feliz.

La chica lo besó mientras asentía y abrazaba. Lucerys se levantó, separándose de ella, y se dirigió a un pequeño baúl en la esquina de la habitación. Sacó de él una pequeña cajita para abrirla y dejar ver dos anillos de oro. Uno de ellos llevaba una piedra roja de forma cuadrada en el centro, con unas piedras celestes alrededor. Lo que más llamó la atención de la chica fue que en el oro había pequeñas formas de un dragón y un caballito de mar.

-Los mandé a hacer hace una semana - comentó él con una sonrisa tímida. Ella vio cómo el chico tomaba el anillo con la piedra roja, que parecía brillar con una intensidad propia. Con cuidado, lo deslizó en el dedo anular de la mano izquierda de ella para luego tomar el otro anillo y colocárselo a sí mismo, ajustándolo con ternura.

-Te amo - comentó ella mientras tomaba las mejillas de castaña para besarlo.

-Vamos - pidió él, mientras salían de la habitación, listos para dar el siguiente paso en su vida y esta vez lo harian juntos.

-Vamos - pidió él, mientras salían de la habitación, listos para dar el siguiente paso en su vida y esta vez lo harian juntos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Se nos casan 🫂, vengo a dejarles un cap espero les guste 💗.

Pd: Quiero ver cómo van a reaccionar Aegon y Rhaenyra cuando regresen y vean como Lucerys y Alexandra están casados.

Pd 2: Lucerys estaba más preparado para ese momento que mis papás a mí nacimiento. 💪

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 07 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

T𝖍𝖊 𝖘𝖔𝖓𝖌 𝖔𝖋 𝖋𝖎𝖗𝖊 𝖆𝖓𝖉 𝖇𝖑𝖔𝖔𝖉~ 𝓛𝓾𝓬𝓮𝓻𝔂𝓼 𝓥𝓮𝓵𝓪𝓻𝔂𝓸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora