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Definitivamente se sentía bastante nervioso aunque no sabía bien la razón, había empezado su primer día de trabajo por fin,cuando estuvo ahí el personal de la mansión le dió las llaves del auto que estará a su disposición.

Siente su mandíbula caerse cuando observa un precioso auto negro con vidrios polarizados frente suyo, la pintura brillaba perfectamente con la luz del sol, se sentía humillado, ese auto debería costar su sueldo de 2 años en la oficina administrativa en la que estaba, y ahora era todo suyo solo por trabajar ahí, se sentía humillado pero a la misma vez complacido y ahora emocionado.

- Creo que nada podría ser más bueno ahora mismo.

Se recargó en el cofre del auto, el traje negro le asfixiaba bastante y eso no le gustaba , pero era como un uniforme así que no debería quejarse, sus palabras dichas con anterioridad fueron totalmente silenciadas en el momento en que vió una silueta salir por la puerta principal cargando una pequeña maleta deportiva.

- Señor Katsuki! Buenos días!

Deseó con ánimos el chico pecoso, a lo que el rubio no pudo evitar desviar su mirada a otro lado, Izuku estaba caminado hacía el auto con una licra deportiva de un tono negro y un top verde que dejaba ver parte de su bien formada cintura. La licra dejaba resaltar con perfección las bien marcadas piernas del chico pecoso, no podía con la visual frente a el, sintió la saliva atorarse en su boca provocándole ahogarse con la misma, mientras empezaba a toser desvío su mirada a otro lado trabando de procesar todo lo que sus ojos vieron.

Izuku logró llegar hasta donde estaba el chico rubio tratando de no morir, le observó un poco confundido y preocupado. Sintió la necesidad de preguntar que sucedió pero en cuánto le vio voltear y pararse derecho para aclararse la garganta y mirarlo con una expresión calmada , supo que no era tan necesario.

- Buenos días , Midoriya.

Habla con tranquilidad y se adelanta para abrir la puerta trasera del auto dispuesto a dejar entrar al pecoso, el mismo se acomoda la maleta que trae consigo en su hombro derecho para subirla al asiento trasero, antes de abordar el vehículo primero observa al rubio fijamente unos segundos, Katsuki se queda confundido y también nervioso, tal vez ya pasado algo por alto y no lo ha notado o también puede que esté siendo muy irrespetuoso, no conoce bien el carácter de Izuku y eso le hace dudar.

- Por favor me gustaría que me llames Izuku, quiero que nos llevemos bien si estaremos interactuando todo el día.

El rubio lo piensa un momento, se siente extraño ser tratado así de repente, todo el tiempo su vida laboral ha sido un desastre porque las personas y sus jefes le han tratado como si fuese una máquina que sólo recibe órdenes. Izuku le hace sentir raro, tiene una linda personalidad y eso da mucho de que hablar.

- Entiendo pero sólo si deja de llamarme señor por favor.

- Lo siento es que creo que eres más grande que yo, ¿Que edad tienes?

- 28.

Dice sin duda Katsuki a lo que Izuku se queda perplejo, en realidad lo único que lo hacía lucir mayor era el hecho de que era bastante alto, calculaba que el tuviera al menos unos 34 o 36 años, es impresionante.

- Nos llevamos unos años, no te llamaré señor de nuevo entonces.

Sonríe Izuku y se dispone a entrar al auto a lo que Katsuki le sigue para poder cerrar la puerta y el dirigirse al asiento delantero en la parte del piloto. El cenizo se sube, acomoda un par de cosas como su cinturón y también su espejo retrovisor para evitar cualquier incidente, de paso también los espejos a los costados delanteros del auto, no le gustaría tener que ser regañado por algún detalle que se pudiera escapar a la hora de manejar.

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⏰ Última actualización: Jun 01 ⏰

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DEAR FUTURE HUSBAND (KatsuDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora