De vuelta a casa

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Observando al Dios Astar e intentando pensarlo muy bien. Eithan vascilaba aún sabiendo la decisión que tomaría pero que prefería negar. Dió un gran suspiro para tomar coraje y responder.

—Esta bien lo haré —dijo Eithan.

En ese momento el lapicero se levantó convirtiéndose en un cuchillo afilado, el cual se clavo tres veces en la mano de Eithan formando aún especie de A y tomando la sangre que quedó en el cuchillo su nombre apareció en el contrato.

—Queda firmado el contrato te devolveré a tu mundo, espero que puedas entretenerme por un milenio si es posible —dijo el dios Astar mientras reía de manera siniestra.
—Solo una última pregunta ¿Que quería decir el mensaje ya sabes "HETDE"? —pregunto eithan ya que no lo comprendía.
—Es "hoy es tu día evitalo", intentaba advertirte, así escriben los jóvenes hoy en día ¿No? —Dijo el dios Astar antes de desaparecer.

En ese instante Eithan pensó que era un tonto, jamás comprendería algo así, entonces su entorno comenzó a cambiar nuevamente y cuando abrió los ojos estaba saliendo de la estación del tren 1145. Se alegro al ver que estaba vivo, se quedo pensado ligeramente en lo que algún día le tocaría enfrentar pero que por el momento tal vez no debería preocuparse. << Quizás fue un sueño >> al ver su mano noto la cicatriz del cuchillo que le había atravesado la mano, era una A, de Astar, en definitiva lo veré de nuevo.

Se dirigió entonces al coffestar nuevamente al mirar el interior noto que todo estaba como siempre.

—tal vez todo fue un sueño —penso Eithan mientras ingresaba el establecimiento.
Al entrar vio fijamente a Sofía, se veia tan radiante y con una hermosa sonrisa lo saludo.
—buenos días Eithan, ¿lo mismo de siempre? —pregunto Sofía sonrojada al verle.
—si, mi bella dama, además quisiera saber ¿si estaría dispuesta a tener una cita conmigo para cenar? —pregunto Eithan nervioso pero un poco seguro de su respuesta.
—Por supuesto, no hay ningún problema. Pero ¿a qué debe esa pregunta tan repentina? —pregunto Sofía ruborizada y nerviosa.
—La verdad es que me gustas y eres la razón por la que vengo cada día, pienso que no debería perder el tiempo para hacerte llegar mis sentimientos —Dijo eithan de manera segura.
—Tienes razón hay que aprovechar el tiempo al máximo —respondió Sofía mientras anotaba su número y le entregaba la nota a eithan.
—Te escribiré luego de clases para vernos ¿Te parece? —dijo Eithan con dulzura.
—Esta bien, nos vemos más tarde —respondió Sofía.

Eithan salió del café sintiéndose increíble y pensando en lo maravilloso que será su segunda vida. Camino a la universidad un hombre caminaba hacia el, Eithan lo reconoció de inmediato, pues era aquel hombre que había robado el café y quién lo había asesinado en su primera vida. De repente se sintió como si una lanza le atravesará el estómago. Era el recuerdo del disparo que había recibido antes, fue tan doloroso que lo hizo caer de rodillas.
Aquel hombre se acercó más a Eithan y un frío enorme recorrió su cuerpo, pensó que moriría nuevamente.
El entorno comenzó a cambiar a su alrededor y el espacio parecía distorsionado, una voz grave se escuchó entre los dos.
Lo
—Se han encontrado dos almas contratadas, dara inicio a un duelo entre el contratado del dios Astar y el dios Aftol su recompensa será agilidad sobrehumana ¡Inicien la diversión! —dijo la voz misteriosa.
Aquel hombre comprendió de inmediato que debía asesinar a Eithan, así que corrió directamente hacia el para poder sobrevivir. Eithan por otra parte se encontró en desventaja pues no era bueno para pelear y jamás había tenido un combate, el hecho de que aquel hombre sea un delincuente le daba mayor ventaja, pero no pensaba rendirse. Pensó en su madre y su pequeña hermanita Zoe que lo esperaban en casa y por supuesto Sofía había aceptado salir con él, no podía darse por vencido sin luchar.
El delincuente se abalanzó sobre eithan y comenzó a golpear el rostro una y otra vez, dejando un rastro de sangre al rededor. Eithan intentaría todo lo posible para quitarlo de encima pero era inútil, aquel hombre poseía una fuerza superior, antes de perder la conciencia saco de su bolsillo del pantalón un lapicero de los que siempre traía consigo primero lo clavo en la mano de aquel hombre, quien gritó de dolor. En ese momento Eithan vio la oportunidad y atravesó su garganta con el lapicero una y otra y otra vez hasta que aquel hombre dejo de respirar.
—he asesinado a un hombre?, Pero logré sobrevivir —dijo Eithan mientras lloraba de alegría y de dolor aquellas heridas que tenía en el rostro podía sentir un dolor intenso, pero estaba feliz de sobrevivir.
—el duelo ha finalizado, EL ganador es el dios Astar. la recompensa será para su contratado, le será entregado esta noche —dijo la voz misteriosa.

El ambiente volvió a la normalidad, el dolor desapareció y sus heridas también habían desaparecido, pero la sangre aún estaba por todo su cuerpo, miro hacia el lugar donde estaba aquel hombre y solo dejó una marca negra de cenizas en el suelo con su silueta.
Eithan corrió a la universidad para cambiarse rápidamente ya que tuvo problemas al verso de esa manera. al llegar Henry se encontraba en la puerta esperandolo. Vio a eithan cubierto de sangre y en su rostro se notaba la preocupación.
—Eithan ¿Qué te sucedió? ¿Te encontraste bien? —pregunto Henry extremadamente preocupado.

Eithan pensó por un instante contarle a su amigo, pero recordó la cláusula del contrato, lo que lo hizo sentirse solo y triste.

—No te preocupes solo es pintura estoy bien fue un accidente estaban pintando y no lo noté —respondió Eithan con una mirada sería.
Henry notó que su mirada estaba vacía y su rostro un poco inexpresivo, pero pensó que debía estar enojado así que no indagó más.
—Vamos te presto algo de ropa para que te cambies, así no puedes entrar a la clase amigo —dijo Henry gentilmente.
Tras cambiarse eithan se dirigió a sus clases ya había perdido la emoción de ver si puntuación en los exámenes era buena o no, pues su situación actual lo tenían desconcertado y muy preocupado.
<< ¿Que hare si me encuentro con alguien mas fuerte? ¿No creo poder correr con la misma suerte? >>
Esas preguntas inundaban la mente de Eithan.

El Contrato De Eithan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora