Un sufrimiento sin igual

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Eithan se encontraba aterrorizado ante la situación, pero sabía que era la única forma de salvar a sofia. Miro fijamente los rostros de los oficiales luego de disparar el arma, dos de ellos tenían una expresión de terror al llegar a pensar que morirían en manos de un adolescente. al mismo tiempo un brillo de tristeza podía notarse en sus ojos, al pensar en asesinar a un joven con tanta vida por vivir. 

En cambio el tercero observaba fríamente con un gesto algo turbio, excitado por la situación. dispuesto a matar a un joven para satisfacer sus deseos de sangre. Al ver la maldad de aquel oficial Eithan reflexionó en ese momento.
—Hay todo tipo de personas en el mundo, tenía razón mi madre —pensó Eithan en aquel pequeño instante, antes de que la primera bala impactará en su cuerpo.

De acuerdo a su contrato debía sufrir tres veces  cada que moría, pero no especificaba que todo sería tan lento y tan tortuoso. Al entrar aquella bala por su hombro derecho pudo sentir como se rompía el tejido de su piel y atravesaba los músculos hasta llegar a la articulación esférica y destrozarla por completo, terminando por sali, por la parte de atrás de su hombro.
Tan pronto como salió la primera bala la segunda ingreso en la parte alta de su abdomen, pudiendo sentir como atravesaba sus órganos internos y se quedó alojada en su cuerpo, una bala de calibre 22 tan diminuta capaz de ingresar al torrente sanguíneo destrozando todo a su paso. La última bala que sintió la disparo aquel hombre que lo miró de manera siniestra, apuntando su arma de 9 mm directo a su cabeza. La bala ingreso entre sus ojos, Eithan logro sentir perfectamente como rompía su cráneo e ingresaba a su cerebro destrozandolo totalmente, hasta salir por la parte posterior dejando ver su interior, mientras caía lentamente al suelo, Eithan sintió como si su cabeza estuviera siendo aplastada por una roca gigante innumerables veces sin cesar.
El dolor no se detuvo aproximadamente en un minuto cuando por fin comenzó a calmarse, entre tanto el entorno comenzó a distorsionarse, en ese momento frente a Eithan aparece una figura de oro tal cual como el lapicero para firmar el contrato. pero está vez era un número dos, Eithan comprendió que era la segunda vez que moría. Tan pronto desapareció Eithan se sintió algo extraño, pero ignoro ese sentimiento ya que solo le importaba saber si Sofía se encontraba  aún con vida.
Al abrir sus ojos se encontró saliendo de la universidad, de golpe sintió dolor por dónde las balas habían atravesado su cuerpo recordándole el terror que vivió en ese momento.

Intento recomponerse lo más rápido posible, golpeando su rostro con ambas manos y se dispuso a ir a coffestar a cumplir su promesa con Sofía.
Al llegar Sofía se encontraba saliendo del establecimiento, Eithan la admiro tan hermosa y divina como siempre,  un cuerpo fuera de la imaginación, sus hermosos ojos verdes, que parecían un hermoso bosque en verano, su lacio cabello que rozaba delicadamente su cintura. Parecía salida de otro mundo pensaba, mientras no podía evitar derramar algunas lágrimas al verla nuevamente sonriendo.

—Buenas noches, mi bella dama —dijo Eithan con una enorme sonrisa en su rostro.
—buenas noches Eithan, pensé que me llamarías para vernos —dijo Sofía extrañada por su repentina aparición.
—ese era el plan principal, pero decidí sorprenderte y acompañarte al salir de tu trabajo. Es muy peligroso a esta hora —dijo de manera sutil Eithan.
—si que me sorprendiste, tienes razón es muy peligroso a estas alturas de la noche —respondió Sofía mientras le acercaba su brazo para que el lo tomara al acompañarla.
Eithan tomo el brazo de Sofia y comenzo a caminar en direccion opuesta a aquel callejon donde la habían asesinado.

Sofía miraba a Eithan fijamente le parecía increíblemente atractivo, 1.78 de altura, gran contextura física, brazos fornidos y tonificados, cabello dorado como pintado por un pincel y sus ojos azul profundo. Lo que más le agradaba de Eithan era su personalidad tan humilde, gentil, amable, caballeroso e inocente en muchos sentidos.

—¿A dónde iremos a cenar? —pregunto Sofía desviando la mirada para que no notará que lo miraba fijamente.

—Pensaba en rocket planet ¿Qué te parece? —pregunto eithan a Sofía, improvisando ya que no había tenido tiempo de planear nada.
—Esta bien ¿Veremos una película? —pregunto Sofía entusiasmada
—Si eso tenía en mente —dijo Eithan mientras contaba en su mente cuánto dinero le quedará en la billetera.

Al llegar se encontró por una película de terror, lo interesante de Rocket Planet es que era tanto restaurante como cine, tenía muchas promociones y eso podría ayudar a Eithan a pagar la cuenta. decidieron cenar mientras veían la película, al llegar a la taquilla para pagar, Eithan saco de su billetera  40 dólares que le quedan y Sofía saco dinero de su bolsa tambien.
—¡Por favor no te preocupes! —le exclamó Eithan a Sofía.
—Por favor Eithan no arruines todo con pensamientos machistas, yo pagaré mi parte y tú la tuya compartiremos los costos te gusta o no —respondió sofia con un tono de disgusto.

Eithan sonrió disipando todo el enojo de Sofía, quien al ver su sonrisa pensó que no podría enojarse con él.
Disfrutaron de su gran velada, al profundizar la noche eithan se dispone en tomar valor. Quiere declararle sus sentimientos a Sofía asi que espera al final de la noche para preguntarle a Sofía.

El Contrato De Eithan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora