Endor
Desperté con mucha energía, sabía que iba a ser un día bueno, hoy era el día en que iba a confesarle todo a Nerea.
Habían pasado ocho meses desde que nos conocimos, bueno, "conocernos" cómo tal no era el término correcto ya que nunca nos habíamos visto en persona por motivo de la pandemia, pero desde que nos conocimos por Tinder, no sé en qué momento pasó, pero me empezó a llamar la atención como algo mas que una amiga.
Sabía que las cosas eran complicadas porque desde el principio nunca nos habíamos visto como algo mas que amigos, yo le contaba sobre mis conquistas y ella me catalogó como un fuckboy, siempre me aconsejaba que hacer con cada chica, tampoco es que no supiera como tratar a una dama, pero nunca viene mal la opinión de una; cómo tratarlas, qué decirles, qué regalarles, etc. Su manera de ver las relaciones era muy diferente, era muy centrada y tiene una idea del amor muy rosa y cursi para mi gusto. Algo que aprendí de ella es una frase "El amor es lo más cercano que los seres humanos tenemos a la magia", la frase es de una de sus películas favoritas, "Aquamarine: Mi amiga la sirena", les dije, muy cursi. Pero era eso, su forma de ver la vida era lo que me estaba cautivando, siempre veía lo bueno en las personas, siempre trataba de sacar algo bueno de lo malo, como cuando en su único día trabajando en una guardería los niños la empaparon y terminó adolorida por varios días, esa noche platicamos y dijo entre risas que había tenido el baño de la semana y había ejercitado lo equivalente a medio año; a ella le rompieron el corazón, fue una tal Andrea, la engañó y la dejó, me contó parte de la historia, recuerdo nuestra plática por la noche de ese día.
—A veces pienso que es difícil quererme y que por eso ella decidió hacer lo que hizo y alejarse—dijo Nerea con una voz algo triste mientras se sonaba un poquito la nariz.
Me dolía verla así, esa noche no era la chica alegre que yo había conocido desde el principio, por primera vez la veía vulnerable y frágil, quería correr los kilómetros que nos separaban y abrazarla para decirle que yo la quería y que no se me había hecho difícil llegar a hacerlo, que me gustaba verla reír, cantar mientras cocinaba y verla maquillarse tan creativamente, quería decirle que me gustaban sus dibujos de gatos y vacas y que podría maratonear Barbie solo por ella, me era muy difícil decir estas cosas porque era la primera vez que estaba sintiendo algo así, además que no soy tan expresivo. Salí de mis pensamientos y le contesté serio.
—No Nerea, es simplemente que hay gente cobarde y a veces eligen el camino más fácil, no es que sea difícil quererte, simplemente ella no sabía lo que quería, le tuvo miedo al éxito—mantuve la voz firme pero suave, quería que se riera.
—Me sentí reemplazable, es decir, aún no entiendo, dijo que iba a mejorar, pero eligió bloquearme y sacarme de su vida—lanzó un suspiro—no lloro por ella, lloro por cómo dejé que me tratara, por cómo me sentí, porque se que soy valiosa y una gran mujer, pero en ese momento me sentí muy chiquita, sé que eso no era amor porque el amor no te engaña, no te deja pensando si fuiste suficiente o no, en el fondo sé que no es difícil quererme porque yo me amo, se que tenerme como pareja y como amiga es increíble y no es porque tenga el ego muy alto, pero me conozco—hizo una pequeña pausa y continuó—cuando papá abandonó a mi madre supe que no quería un amor a medias, quería que alguien me escogiera todos los días no porque ya había un compromiso sentimental conmigo, sino porque de verdad la idea de tenerme en su vida le pareciera tan fascinante que le emocionara a diario el compartir su día a día conmigo. Se que mi forma del amor es muy romántica, pero también tengo los pies puestos sobre la tierra, el amor es una decisión, pero también se que es magia y hay millones de personas en el mundo, se que una de ellas está destinada para mi—vi cómo sonrió y sus hoyuelos se formaron—lo siento por abrumarte con este tipo de cosas, pero se que puedo confiar en ti.
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Pura Magia
Teen FictionCreo que es increíble como tu vida puede cambiar en tres años, para bien o para mal, muchas cosas han pasado desde la pandemia del covid 19, por cierto, me presento, soy Nerea Salazar, tengo 23 años y mi vida siempre ha sido algo aburrida hasta que...