ensayo

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—Ni Thomas, ni Thomas
—¿Por qué tuviste que pagar tú?
—Porque me estoy quedando en tu casa a comer, a desayunar, y me he quedado a dormir
—Sí, y hoy te vuelves a quedar
—¿Y eso?
—Porque te vas a ver conmigo las pelis de maze runner
—Ayy— Thomas se tiró en el sofá boca arriba
—Gracias por las cosas guapo— le di un beso el la mejilla y fui a la cocina a calentar la pizza.
Eran las 15:00 pm, calenté la pizza, cogí vasos de coca-cola y los llevé al salón, puse la peli que le dije que veríamos, y Thomas se puso en la esquina otra vez, y me hizo ponerme recostada en él.
—¿Estás cómoda?— me preguntó con una sonrisa
Asentí con la cabeza.
Terminamos la pizza, y continuamos viendo la película. Cuando terminó, fui al baño a cambiarme, y sentí como Thomas entraba en mi habitación, y estaba hablando con su padre.
Thomas:
Dime papá
¿Cómo eso que tienes novia? (la conversación del padre __ no la escucha)
Haha, no es mi novia, no todavía
¿Y cómo se llama?
__
¿Y cómo es?
Es linda, amable, sincera, tiene una sonrisa hermosa, y unos ojos verdes preciosos, su pelo castaño con mechas rubias es brillante y hermoso, tiene un fisicazo, pero eso es en lo que menos me fijo
Ay hijo, suena a que estás enamorado
La conozco desde hace tres días, pero he pasado una noche aquí en su casa, y he comido aquí, desayunado, y hoy duermo aquí otra vez
Tu madre y yo tenemos ganas de conocerla
Cuando pasen unos días más, creo que le pediré salir, pero tengo que estar seguro
Bueno, no te molesto más, te queremos
Yo también os quiero papá
Narra __:
Salí del baño, y Thomas se puso rojo.
—No sabía que estabas ahí— dijo nervioso
—No te preocupes, bueno, ¿vemos las pelis?
—Claro
Fuimos al salón, y nos vimos las tres pelis, en la última me puse a llorar como una magdalena.
Thomas se puso la mano en la cabeza, y se rió.
—¿Cómo te puedes reír?, es muy triste— dije llorando
Thomas volvió a reír.
—Shh que ahora viene la peor parte
—La carta
—Exacto
—Pues no sabes tú la pereza que me dio a mi escribir eso
—Pues es lo que toca
Seguí llorando, y Thomas me abrazó.
—Deja de llorar boba— dijo Thomas mirándome
—Déjame, se merecía vivir— dije llorando otra vez
—¿Qué hora es?— pregunté
—La 1:00 am
La película terminó, cogí a Thomas de la mano y lo llevé a la cama.
—Buenas noches rubio
—¿Dónde vas?
—Al sofá
—No, me voy yo al sofá— dice Thomas dando la vuelta
Le cojo de la mano y le digo que se acueste en la cama.
—Si me acuesto yo, te acuestas tú
—No quiero incomodarte rubio
—No me incomodas
Me fui al baño a cambiar, y salí
—Si quieres quitarte la camiseta para dormir puedes, o si quieres te puedo dejar una, tengo camisetas de hombre— le dije a Thomas
—Si no te importa que me la quite
—No hay problema rubio
Thomas se quitó la camiseta, y me quedé unos segundos mirando a su abdomen marcado, Thomas se echó, y yo también lo hice, era el segundo día que Thomas dormía aquí, y llevábamos conociéndonos desde hace tres, y mañana sería viernes, el fin de semana tendríamos que ensayar, porque el lunes empezaba el rodaje.
—Buenas noches rubia
—Buenas noches rubio.
Thomas me despertó, cuando abrí los ojos y logré enfocar la vista, Thomas estaba con una bandeja, tenía tostadas, fresas, zumo, y unas flores para decorar.
—¿Pero esto que es?— reí
—Buenos días rubita
Me senté, y Thomas puso la bandeja en la cama, empecé a desayunar, y Thomas me miraba.
—Bueno, hoy me tendré que ir, ¿no?— preguntó Thomas
—Si quieres sí, si quieres quedarte puedes, me gusta tu compañía— dije riendo
—Bueno, pues por lo menos ir a por ropa
—Vale, tráete una maletita— dije sonriendo
—Voy a por ella, tu desayuna tranquila
—¡Coge mis llaves!— grité antes de que saliera
—¡Vale!— me respondió
Me quedé desayunando, y cuando acabé fui a fregar, las flores las puse en el salón, y luego fui a mi cuarto a cambiarme, me puse una camiseta corta blanca, y unos pantalones vaqueros cortos con un cinturón, me puse mis vans, y esperé a Thomas.
Unos minutos después llegó.
—Ya estoy aquí guapa
Traía una maleta de mano, y la fue a llevar a la habitación.
—¿Cómo está mi rubia favorita?
—Con dolor de ovarios
—¿Necesitas algo?
—Nada, voy a por un paracetamol
—Yo te lo traigo, ¿donde los tienes?
—En el armario de la derecha
Thomas fue y me lo trajo con un vaso de agua.
—Aquí tienes guapa
—Muchísimas gracias Tommy, eres un cielo
Thomas se sonrojó.
Se sentó a mi lado, y me preguntó si ensayábamos un poco.
Empezamos a las 11:30 am, y ensayamos hasta la 13:00 pm, luego hice la comida, y comimos, volvimos a ensayar un par de horas, y a las 17:00 pm, Thomas me preguntó si íbamos a dar una vuelta.
—Claro
Thomas se levantó, cogí las llaves y el móvil.
Me abrió la puerta del copiloto, y estuvo un rato conduciendo, me llevó a una playa, y aparcó.
—Que bonito— dije mirando a la playa a través del cristal
—Como tú— dijo Thomas riendo
—Y tú— dije riendo
Thomas me abrió la puerta, me cogió de la mano entrelazando los dedos, y caminamos por la arena descalzos.
Thomas y yo nos sentamos en la arena, él estaba sentado con las piernas abiertas, y yo estaba entre ellas, y mi cabeza en su abdomen.
—Que bonito, ¿verdad?— dijo Thomas
—Es precioso
Estuvimos ahí un buen rato, y luego volvimos a casa, cenamos, y nos fuimos a la cama.
Al día siguiente me desperté, y miré hacia el lado, vi a Thomas dormir, me quedé un rato mirándolo, se veía precioso durmiendo, me quedé pensando en lo lindo que se veía. Cogí mi móvil y miré la hora, eran las 10:00 am, me levanté y le hice el desayuno a Thomas, le desperté y le di el desayuno.
—¿Pero y esto?— dijo Thomas con una sonrisa
—Pues tú me lo hiciste ayer, hoy me tocaba a mi
—No tenías porque, encima que me acoplo en tu casa, no vas a hacerme el desayuno
—No estás acoplado, estás aquí pues porqueee...— me quedo pensando en que responder
—Porqueee— dice Thomas esperando mi respuesta
—Porque si
—Buena respuesta— dice riendo
Thomas y yo reímos, y luego de que terminó de desayunar nos pusimos a ensayar.
—Oye __—interrumpe Thomas después de un rato
—Dime
—¿Te apetece ir a comer fuera hoy?
—Mmm bueno, vale— digo dudosa, ya que no estoy acostumbrada a comer comida de aquí
—Invito yo— dice Thomas guiñando el ojo
Me río y me acerco a él.
—Más quisieras cielo— digo guiñando el ojo
Miro la hora, las 14:00 pm, que rápido pasa el tiempo cuando estoy con Thomas.
—¿Vamos a vestirnos?— pregunto mostrándole la hora a Thomas
—Claro— dice Thomas sonriéndome
Fuimos a la habitación, y él se iba a cambiar.
¿Thomas Brodie-Sangster estaba a punto de cambiarse delante de mi?, ¡Dios mío!, me di la vuelta rápidamente, para no incomodarle.
Yo también comencé a cambiarme, y él respetó mi privacidad.
—Listo— le dije a Thomas, y este se dio la vuelta
—Estás preciosa— dijo sonriendo
—Tú también— dije sonrojándome
—¿Nos vamos?— dijo Thomas
—Dame un segundo, me maquillo un poco y vamos
Thomas se acercó a mi, me cogió de las manos, y me sonrió.
—No necesitas maquillaje, eres preciosa como eres
Sentí mis mejillas arder, y supe que estaba roja
—¿Y esa sonrojada?— dijo Thomas riendo
—Eeh, n-nada— dije tartamuedando
¡__ no tartamudees!— me dijo mi  subconsciente
—Vamos anda— me dijo Thomas mientras me llevaba de la mano
Cogí mi bolso, y salimos de la casa, Thomas como siempre me abrió la puerta del copiloto, y puso Nirvana, y comenzamos a cantar ambos.
Underneath the bridge—Thomas se me une—
Tarp has sprung a leak, and the animals I've trapped, have all become my pets, and I'm living off of grass, and the drippings from my ceiling, it's okay to eat fish, cause they don't have feelings.
Continuamos cantando, hasta que llegamos a un restaurante. Entramos y pedimos, tardaron alrededor de veinte minutos en traer la comida.
Thomas comenzó a comer, y yo me quedé unos minutos mirándole.
¿Este hombre se ve lindo en todas las maneras?, durmiendo, comiendo, riendo, fumando...
—¿Qué miras rubia?— dijo Thomas riendo
—Pues lo mono que te ves comiendo brócoli— dije riendo
Thomas soltó una carcajada, y acto seguido yo.
Cuando terminamos de comer, miré la hora, las 16:30 pm.
—La cuenta por favor— digo levantando la mano
—45 dólares por favor
Saqué la cartera y pagué, el camarero me dio el cambio, y miró a Thomas.
—¿Tú eres el actor?— dijo el camarero riendo
—Sí, sí— respondió Thomas riendo
—Ay dios, dame un autógrafo que mi hija pequeña es una fanática por favor
Thomas le dio un autógrafo, y el camarero le agradeció varias veces, luego me cogió de la mano, y salimos fuera.
Thomas sacó un cigarro, y me ofreció uno.
—¿Quieres?
No solía fumar a menudo, pero como podía rechazar un cigarro de este dios griego.
—Gracias— cogí el cigarro
Thomas me dio el mechero, y lo prendí.
Noté que Thomas miraba.
—¿Que miras rubio?— solté el humo
—Te ves preciosa fumando— dijo riendo
Le di otra calada, y volví a soltar el humo.
—Tú también— respondí
Terminamos el cigarro, y fuimos al coche, Thomas me volvió a abrir la puerta, de verdad, entre lo guapo que es, y lo caballeroso, es como un príncipe azul.
Nos montamos, y esta vez no puso Nirvana, puso Queen, puso una canción, y me miró a ver si la reconocía.
—¿La conoces?— me pregunta sonriendo
—Claro
—Bien, cantemos— Thomas subió el volumen
Is this the real life? is this just a fantasy, caught in a landside, no escape from reality, open your eyes, look up to the skies and see, I'm just a poor boy, I need no sympathy. Because I'm easy come, easy go, little high, little low, any way the wind blows doesn't really matter to me, to me.
Venía mi parte favorita, y comenzamos a gritar.
Mamaaaa, just killed a man, put a gun against his head, pulled my trigger, now he's dead, mamaa life had just begun, but now I've gone and thrown it all away. Mamaaaa, oooh,
didn't mean to make you cry, if I'm not back again this time tomorrow, carry on, carry on as if nothing really matters.
Llegamos a casa, y yo estaba cansada, así que nos fuimos a dormir la siesta.
Unas horas después, un dolor de barriga insoportable me despertó, y fui corriendo al baño. Tuve que cambiarme entera, de verdad que ser mujer es una porquería.
—¿__, estás bien?— preguntó Thomas picando a la puerta
—Sí, espera
Salí del baño sudando.
—¿__?, estás pálida
—Debe ser por la regla
—Estás ardiendo— dijo Thomas tocándome la frente
—Estoy bien Tommy
—Vamos al hospital ahora mismo
Thomas me cogió en cuello, y me llevó a la cama, me puso ropa abrigada, y una sudadera suya, me volvió a cargar, y me bajó al coche, me puso cuidadosamente en el asiento, y me puso el cinturón, condujo y empezó a conducir, a mitad de camino me desmayé.
Cuando desperté estaba en una camilla, y Thomas estaba a mi lado cogiéndome la mano.
—¿Que ha pasado?— dije confundida
Iba a levantarme, cuando Thomas me detuvo.
—Quédate ahí quietecita
—¿Que ha pasado Thomas?
—Te has desmayado, ha sido solo un susto— dijo Thomas mientras se acercaba
—¿Y cuando me puedo ir?
—Voy a avisar que despertaste, y ya me dirán ellos
Thomas salió del cuarto, y yo me quedé esperando, me sentía como si me hubiera atropellado un tráiler. Pasaron unos minutos, y Thomas entró por la puerta con una enfermera.
—¿Cómo te encuentras?— me pregunta amablemente la doctora
—Sinceramente, como si me hubiera atropellado un camión
La doctora rió.
—Ha sido una bajada de tensión, estarás bien, puede haber sido por poca hidratación, la pérdida de sangre por la menstruación, o que te has expuesto a una alta temperatura.
—¿Me puedo ir ya?
—Sí, trata de beber mucha agua, y no exponerte a altas temperaturas
Le agradecí, y Thomas y yo fuimos al coche.
—Anda que vaya susto me has metido, rubia
—Ohh te preocupas por mí, que bonito— dije burlándome
—Pues sí, me importas, y mucho— dijo Thomas serio
—Tú a mí también— le di un beso en la mejilla
—¿Qué hora es?— dije mirando al cielo
—Las 22:00 pm
—Mañana tenemos que ensayar, el lunes empieza el rodaje—
—Lo sé rubia, pero lo vas a hacer genial
—No sé yo— dije dudosa
—Te he dicho que lo harás genial— Thomas tomó mi mentón
Thomas arrancó el coche, y comenzó a conducir, volvimos a casa, y nos fuimos a dormir. Al día siguiente sería domingo, teníamos que ensayar ya que el lunes empezaba el rodaje de la película, estaba muy nerviosa, y a la vez muy feliz, porque no sólo estaba cumpliendo mi sueño, sino que iba a hacerla con Thomas Brodie-Sangster.
Logré conciliar el sueño, y antes de dormirme, noté como Thomas se acercaba a mi, y me abrazó, no me incomodó en absoluto y me dormí.

Thomas Brodie-Sangster y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora