[ Mate Y Atole ] Messi × Ochoa 🧉

[ Mate ]

Messi tomó algunos alfajores y su botella de mate nueva antes de salir.

—Orale Lio ¿Y esa botella? No la había visto—

—Es nueva, la mande a hacer con una marca en instagram ¡Me querían dar 50 botellas más!—

—¿La puedo ver?—

—No, me las vas a querer robar—

—Andale...—

—Nopi—

—¿Si te doy un beso puedo ver la botella?—

—Tendrán que ser dos y un abrazito—

Ochoa tomó con suavidad los labios de Messi, inclinó su cabeza y dio dos besitos rápidos.

Pero al estrujar a Messi lo hizo con todas sus fuerzas y tomándolo por la cabeza.

—¡Ya sueeltaaameeeee!—

—Bueno ya enséñame la botella de mate—

—Mira—

Messi sacó de su mochila una botella envuelta aún en plástico burbuja.

—Abrela Guille, pero no te voy a dejar quedarte con ella...—

Ochoa desenvolvió aquello con una intensa curiosidad casi como un niño en navidad.

Al separar el envoltorio de la botella se le derritió el corazón, estaba personalizada con fotos de ellos dos.

En esa botella se encontraban fotos de sus tres grandes amores; el barcelona, argentina y Ochoa.

—Lio esto es... hermoso... ¡Yo también quiero uno!—

—Te puedo pedir uno pero ni loco te voy a dar el mio—

—¿Ni por todos los besitos del mundo?—

—No y ya vámonos a la terraza, ¡Estoy emocionado por que te conozcan mis amigos mi niño!—

—¡Pero no me e arreglado aún! Todavia me falta bañarme, secarme el pelo, ponerle mascarilla, definirlo con calor, ponerme mi skin care, escoger mi outfit, ponerme perfume y retocar el maquillaje de las heridas—

—¡Bue yo me iba a lavar la cara y solo porque me manché!—

Ochoa miró a Messi con unos ojitos de niño pequeño, era imposible negarle algo.

—Está bien, tenés 40 minutos—

—¡yupi!—

—Pero solo si me puedo bañar contigo... digo tenemos que ahorrar agua y... te puedo limpiar la espalda o tallarte la..—

Ochoa le cerró la puerta en la cara y gritó desde dentro.— ¡No voy a dejar que me veas lleno de tierra y todo sudado!—

—¡No me importa, amor! ¡Dejame pasar! ¡Necesito cariñitos! ¡Quiero amorcito!— Messi golpeaba y aruñaba la puerta

— ¡Ya me estoy quitando la ropaaa!—

—¡Dejame pasar!—

—¡Uy, ya no tengo nada de ropa puesta! ¡Que frio!—

—¡Dejame entrar Guille!—

Messi comenzó a dejar de tener respuesta alguna de Ochoa y se tuvo que olvidar de la idea de bañarse juntos.

Estaba sentado en la cama viendo fijamente el reloj esperando a que Ochoa saliera.

El tiempo pasaba así que Messi decidió preparar algo de mate con su nueva botella.