En la escuela Oxford estaba por comenzar un nuevo año escolar, como de costumbre, en los dormitorios de la institución habían fiestas, reuniones y todo tipo de cosas para ponerse al corriente después de unas largas vacaciones.
Se hablaba de gente nueva que acababa de llegar, y apesar de ser un campus grande, todo se sabía.
Habían comenzado las inscripciones para las instalaciones de dormitorios para los chicos nuevos y un tour por el campus.
Janie una estudiante de 3er semestre, acaba de llegar a Oxfordshire en Inglaterra.
Como muchos ahí, habia logrado tener una beca, aún sin pertenecer al país, ella venía de New York.
Janie sin saber que mierda hacer, bajo del carro de su padre, y unos papeles que contenía en la guantera. Lo miro y una vez más le pidió que la acompañara ya que no entendía el bobo acento británico, a lo cual su padre se negó.
-Por favor Janie estas apunto de cumplir 20 años, debes comenzar a hacer tus cosas sola y tienes que acostumbrarte a el "bobo acento británico". Su padre con una sonrisa en la boca, abrazo la chica y le dio un beso en la frente. -Vamos baja o te quedaras sin un buen dormitorio-
Janie con el ceño fruncido, volteo los ojos, tomo su mochila y los papeles de la guantera y salio del auto dando un portazo.
-Ey! Ten cuidado,no te desquites con mi bebe. Carlos su padre, le daba gracia ver a Janie molesta ya que parecia una niña pequeña haciendo berrinche.
-Si, como sea, eres un pésimo padre sabes?. Dijo mientras soltaba una carcajada.
Janie tenia una muy buena relación con su padre y siempre bromeaban entre sí.
-Y aún asi me amas loca. Ya vete se me hace tarde.- Carlos arranco el carro y mientras janie cruzaba la calle este le hecho el humo encima intencionalmente y el carro abanzo lo más rápido posible.
-IDIOTAAA!!, carajo mi pelo se va a esponjar, llegando a casa lo mato enserió.- Tratando de sacudir su cabello y evitar que este se esponjora fue muy tarde, su cabello gano la pelea y ahora era un león.
A lo lejos escucho unos pasos acompañados de unas carcajadas, en cuanto subió la mirada observo a un chico un poco más alto que ella, de pelo rubio en las raices y rosa en las puntas, de cabello largo, delgado, con lentes y ropa más olgada a su talla.
-De que te ríes idiota?!.- Janie estresada por no saber que hacer y ahora su pelo, reacciono mal ante las risas del chico.
-Ey tranquila, veo que ese idiota del carro arruino tu pelo. Ocupas ayuda?, nunca te había visto por aquí asi que supongo que vienes por las inscripciones a los dormitorios y el famoso tour de mala muerte.- El rubio con una sonrisa en la cara tomo la mochila del piso de la chica y la coloco en su hombro a lo que Janie hizo que aceptara su propuesta.
-Ese "idiota" es mi padre, -Solto una carcajada y una mirada de reojo al rubio dandose cuenta de su asombro-y si me vendría bien algo de ayuda, por lo que escucho no eres británico, y tienes un acento... peculiar.
-... ahhh sisi no, no soy británico para mi mala suerte, si lo fuera conquistaria al mundo, soy español de Madrid para ser exactos. Acomodo sus gafas y su pelo poniendolo atras de sus orejas.- Bien entonces te gusta llamar idiota a todo el mundo cierto?
-Todos son unos idiotas a veces hay que recalcarlo. Mientras sostenía una sonrisa y caminaba a la par de el rubio y este carcajeo ligeramente. -Y bien cómo te llamas idiota.
-Solto un bufido y un carcajada y la miro observando su lindo perfil y su tono verde de ojos, era muy linda. - Me llamo Gustavo, pero me dicen Yoshi, y tu niña que tampoco es de aquí. El lo había notado desde el primer momento ya que tampoco tenía un acento británico.
-Janie, me llamo Janie y soy de New York. -Acomodo su cabello esponjado y sonreía ya que apesar de apenas haberlo conocido, se sentía comoda con el.
-Bien, tienes que hacer algo de papeleo en aquella mesa donde esta la señora de pelo corto y gafas verdes, la señorita Margareth. - Lo dijo intentando imitar su tono agudo y viejo de la señora y en susurros comento- Es una desgraciada.- Guiño a la chica mientras ella se acercaba a la mesa y volteba para asegurarse de que este no se fuera.
-Siguiente. Ah eres nueva por aquí, bien dame tus papeles. - Comenzo a hojearlos y quedarse con las copias de estos.- Bien con estos haremos tu expediente, tienes 5 llamadas de atención, si llegas al límite te quitaremos tu dormitorio, y se lo daremos a alguien que lo necesite. Toma tu edificio es el 3, habitacion 23.
El rubio comenzo a acercarse para escuchar que habitacion había tenido esta.- Genial! Nos toco en el mismo edificio, yo soy 17. La abrazo con un brazo rodeando sus hombros y Janie se daba cuenta que el era muy calido.
-Ah señor Laszlo, que hace aquí no debería estar dando un tour?.- La señorita Margareth al parecer no le agradaba encontrarlo ahí y lo miro con una cara de desagrado.
-Quiza, pero habia una leona en apuros. -Tomo los lentes de la señorita y los limpio dejandolos más sucios. - Ay...eh...es hora de irnos. -Cogio la mano de la chica y las llaves de la mesa y corrió, lo que no se esperaban era que estaban a punto de tropezar.
Ambos comenzaron a tambalearse en el pasto y Yoshi cayó primero sin soltar la mano de esta y luego tratando de buscar la mirada de la chica volteo y solo la vio caer. Ambos soltaron a reír ya que su huida termino en el piso.
-Creo que seguire llamandote idiota. -Mientras reía sin despegar su mano.
-Ay dios, apenas te conozco y ya me quieres en el suelo.- Limpio sus lagrimas de felicidad y se levanto del suelo dandole la mano a Janie. -Llamame como quieras linda.
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Cambios a cambio de
Romance* Tu vienes de la ciudad de los rascacielos, yo del lugar de los castillos. Enseñame lo que yo no conozco, y dejame enseñarte lo que soy.*
