Perder el tiempo con alguien más

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Joe:

Honestamente, entre todo lo que nos pudo suceder, no creí que él me fuera a decir que me cocinaría el desayuno, honestamente esperaba que me mandara lejos y que me dijera que nunca me quería volver a ver por ser todo un stalker y espiarlo cuando él estaba vulnerable.

Cuando lo vi solo y acurrucado sobre él solo, quería protegerlo de todo el mal que le pasara, quería estar ahí con él diciéndole que todo saldría bien, tuve el impulso de querer hacerlo honestamente, pero para que mentirles, no tuve la valentía para hacer eso, y solo lo disfrace diciendo que él talvez no me querría ahí con él.

Cuando me abrazo y sentí su cuerpo contra el mío, solo pude sentir como si todo volviera a reconectar en mí, como cuando uno mira en las películas que sale el sol y todos los campos de flores vuelven a tener vida, así como cuando por fin el villano se va o muere y todos viven felices para siempre.

Solo quería tenerlo más tiempo así, no quería que estuviera dañado, solo quiero que él vuelva a ser feliz, ser él, quiero que él sepa que yo seré esa estrella en las noches de oscuridad de el aunque ya no me queden más ganas de brillar.

Así que cuando decidimos ir hacia nuestro vecindario, me propuse ser el que iba liderando nuestra pequeña ¨caravana¨ honestamente, solo quería sentir el aire para mí solo, poder llorar con el aire en mi cara, con Gianni (mi moto) y ver que ese inicio en carretera de la montaña a las casas era como cuando uno mira en los finales de las películas que todo comienza para la secuela, pues algo así quise y más bien dicho sentí.

Lo vi por atrás para saber si seguía ahí, solo quería asegurarme de atesorar ese pequeño momento que pude ver y pude notar que él estaba hablando con alguien, así que sencillamente lo que se me cruzo por la cabeza para calmar los nervios fue llamar a Tomás, honestamente siempre he creído que él es como ese guía espiritual en mi vida, así que no dude en llamarlo. Sorpresa, él responde siempre a la segunda llamada, pero esta vez pareciera que estaba esperando mi llamada.

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Tomás: ¿A que se debe que el tipo que odia hacer llamadas me llame a estas horas de la mañana y no este de mal humor?

Yo: Nunca estoy de mal humor

Tomás: Que va si tú tienes la personalidad de todo un gato, de esos que arañan por solo respirar cerca de ellos.

Yo: Bueno, qué va, parece que me quieres poner de malas

Tomás: ¡PARA NADA, DIME QUE PASA!

Yo: Bueno, mmmm creo que volvimos a intentar algo con Luc

Tomás: ¡SI ESTO ES UNA BROMA, TE JURO QUE YO MISMO TE MATO!

Yo: Para nada, es cierto, estábamos en la montaña y no sé todo paso muy rápido, lo dejé estar solo, él me vio, me abrazo, me dijo que todo era un caos, pero no sé que yo daba paz o algo así, y yo solo lo abrace más, y pues ahora vamos camino a nuestras casas a que él me haga el desayuno.

Tomás: ¡TE JURO QUE NO PUEDO CON ESTO, EL AMOR VOLVIÓ A VIVIR HOY SEÑORAS Y SEÑORES!

Yo: Tomás solo es un dizque inicio, pero por eso dime que no hacer para cagarla con él

Tomás: Veo que volví a ser tu doctor corazones, ¿sabes?, eso se paga muy caro

Yo: Tomás no seas una mierdilla y solo dime que puedo hacer para no cagarla

Tomás: La cosa aquí es que ya todo lo has hecho para cagarla, así que no hay nada que no hacer, solo cosas por hacer

Yo: Tengo como una hora de estar despierto, explícame qué quieres decir

Justo donde me dejasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora