three

50 8 0
                                    

Sus dedos se movían con suavidad sobre las cuerdas de la guitarra, produciendo acordes dispersos que resonaban en el aire sereno. Cerró los ojos, tratando de sintonizarse con el flujo de la naturaleza, buscando captar algún susurro del viento que pudiera guiar su creatividad. Pero cada intento era en vano.

JiSung se removió inquieto en su lugar, sintiendo la tensión crecer en su interior. ¿Cómo podía transmitir sus emociones más íntimas a través de la música si no podía encontrar las palabras adecuadas? Los tulipanes, con sus variados colores y su fragancia embriagadora, solían ser su fuente de inspiración. Cada pétalo era como una nota musical en sí mismo, y la armonía de sus formas le susurraba melodías en sus sueños.

Pero hoy, la magia parecía haberse desvanecido. Las notas que una vez fluían libremente ahora estaban atrapadas en un enredo confuso de melodías inconclusas. Miró a su alrededor, esperando encontrar algún destello de inspiración en la belleza de las flores que lo rodeaban. Sin embargo, incluso el jardín de tulipanes, que solía ser su refugio, parecía no poder brindarle la chispa que necesitaba en ese momento. Sentía que le faltaba algo, una conexión profunda con su música.

En ese preciso instante, cuando la tensión llenaba el ambiente y el peso de la incertidumbre se hacía palpable, MinHo hizo su entrada triunfal. Avanzó decidido hacia JiSung, con una expresión de profunda preocupación dibujada en su rostro. Era como si pudiera leer los pensamientos angustiados de su amigo, y no estaba dispuesto a quedarse de brazos cruzados.

Ambos habían acordado encontrarse una vez más en ese lugar concreto, un rincón donde habían compartido risas, confidencias y sueños más de diez veces en el último mes. Pero en esta ocasión, en lugar de la alegría habitual, el castaño había percibido la frustración y la desesperación en la mirada de JiSung.

—¿Todo bien, Sung?—preguntó con delicadeza, sentándose a su lado y colocando una mano reconfortante en su hombro. Su preocupación genuina brillaba en sus ojos mientras observaba a su amigo con atención.

Han dejó escapar un suspiro cargado de frustración y dejó caer su guitarra sobre sus piernas. Miró a su amigo, agradecido por su presencia reconfortante. Era la primera vez que se atrevía a compartir su bloqueo creativo con alguien, pero la conexión que sentía con él le daba confianza para abrirse.

—Es solo que... las palabras no fluyen como solían hacerlo— confesó buscando las palabras adecuadas para expresar su frustración.

—Me siento atrapado en un mar de ideas confusas y no logro encontrar la melodía perfecta. Es como si hubiera perdido mi magia—.

MinHo le dio una sonrisa comprensiva y apretó ligeramente el hombro del rubio en un gesto de solidaridad.

—Todos los artistas pasan por momentos de bloqueo creativo. Pero quiero que sepas que tú eres un músico talentoso y apasionado. La magia sigue dentro de ti, solo necesitas darle tiempo y espacio para que florezca nuevamente —.

Esas palabras en el músico, llenándolo de esperanza. Era reconfortante saber que alguien tan cercano a él creía en su talento incluso cuando él mismo dudaba. Lentamente, una chispa de determinación comenzó a encenderse en su interior.

—Quizás, en este momento, te encuentres en busca de una renovada fuente de inspiración— planteó MinHo reflexivamente —No necesariamente tiene que ser un objeto o algo de tu alrededor, tu nueva inspiración podría ser alguien—.

Una idea cruzó la mente de JiSung, quien pensó que tal vez MinHo podría ser precisamente esa fuente tan anhelada, pues en su compañía encontraba una calma reconfortante y percibía que no requería el reconocimiento de nadie más para validar su talento. En la presencia de él, sus pasiones florecían y se sentía pleno, alimentando una llama que lo impulsaba a explorar nuevos horizontes creativos y a desatar todo su potencial.

१˖࣪ symphony in the tulip garden  | minsung ۪୨୧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora