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[Final Alternativo]

—Por favor papá, te prometo que te devolveré hasta el último centavo

—Giorno, cien mil euros es mucho dinero, no entiendo porque te endeudarias por alguien como ese patán, no estoy de acuerdo en que lo ayudes después de lo que pasó

—Eso tiene una explicación pero no puedo decírtelo por teléfono, por favor, hazlo por mí

—No Giorno, no pienso ayudar a ese idiota, asi que no me molestes más

Suspiro resignado, la única persona que conocía que tenía esa cantidad de dinero en el mundo era su padre, y no parecía querer ayudarlo.

Leone tuvo una recaída el día que se reencontraron, pero con suerte lograron estabilizarlo y hasta ese momento estaba bastante bien, pero el trasplante era necesario, las probabilidades que viviera con el hígado que tenía eran nulas, solo que nadie poseía el dinero suficiente para un trasplante... estaba bastante preocupado, necesitaban el dinero lo más pronto posible y cada vez quedaba más corto de ideas.

—Giorno... deja de insistirle, no creo que me ayude

—Entonces, ¿qué hacemos?... Tiene que haber alguna solución— se sentó en la cama mirando a su prometido, ahora que habían hablado y acordado retomar su compromiso la vida parecía aún ponerles tantos obstáculos —Creo que iré a hablar con algún banco, tiene que existir alguno que pueda prestarme esa cantidad

—Vendamos el departamento, está a tu nombre ¿no? Podemos reunir algo con eso

—No lo había pensado... ¿Tienes los papeles?

—Los deje ahí

—Iré a revisar entonces— le dio un beso en la frente —Vuelvo pronto

Con suerte consiguió que una inmobiliaria comprara el departamento en dos días, y gracias a eso había completado la mitad del total para el trasplante, el hospital aceptó hacerlo esperando que el resto faltante se completará en el plazo máximo de una semana.

—Todo saldrá bien, tú puedes, Leone— tomo su mano apretandole con fuerza —No te dejaré solo ¿entendido?— si bien ahora iban a operarlo, las probabilidades de que sobreviviera a la intervención eran del cincuenta por ciento debido a su condición, tenía miedo de no volverlo a ver después de que ingrese al quirófano

—Giorno, si no llegará a sobrevivir-

—¡Eso no va a pasar!

Sonrió —De acuerdo, sobreviviré, anhelo que volvamos a vivir juntos y retomemos nuestra boda

—Te estaré esperando

—No tardaré

Cruzaron miradas por última vez, el resto lo dejaban en manos de los profesionales.

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No hubo día más feliz en su vida que el de su ansiada boda, aún le parecía un sueño estar ahí a minutos de entrar y casarse con el amor de su vida.

El trasplante fue un éxito, y aunque la recuperación tardó muchos meses, lograron volver a vivir juntos, ahorraron de sus respectivos empleos (esta vez empleos legales) para la boda y cuando organizaron todo para el evento no pudieron sino estar contentos.

Abbacchio había aprendido muchas cosas en la vida, aunque de la peor manera, ahora mejor que nunca sabía que no cometería los mismos errores, y dejaría atrás todo para empezar de nuevo, después de todo la vida le había dado una segunda oportunidad, y no iba a desperdiciarla.

El día de su boda fue el más feliz para ambos quiénes sonrieron de oreja a oreja durante todo el evento, sus amigos los felicitaron y les desearon lo mejor.