Años atrás
Leone acababa de pasar por uno de los peores momentos de su vida, había sido despedido de su trabajo de policía por aceptar sobornos y aquello a su vez había sido la causa por la cual su compañero de trabajo había muerto, una vez más era su maldita culpa, tal y como fue la muerte de sus padres, otra vez, otra maldita vez donde él había arruinado su alrededor, era un perdedor, y en ese momento, decidió caer, no, siempre estuvo en el suelo y aunque quería levantarse, cada intento falló, por lo que, esa vez era igual, era igual, quitándole el hecho de que se sentía peor que una rata de alcantarilla, aquel compañero suyo, con quien pasó varias veces, a quien fue el primero en conocer apenas ingresó a aquel trabajo, quien fue muy amable, y podría decirlo así, un amigo, le había arrebatado la vida a un hombre que consideraba bueno, que tenía una esposa y un hijo por el que vivir, una persona que si tenía una vida a diferencia de él.
Por eso no pudo evitar sentirse de esa manera, ni siquiera había pasado unas semanas desde aquello pero estaba jodido, lo sabia pero tampoco quería hacer nada para cambiarlo, si era posible, esta vez, quería morirse, y que no fuera otro de sus intentos de suicido fallidos; se había vuelto un alcholico en todos lo sentidos de la palabra, era un idiota, porque el poco dinero que tenia solo lo invertia en ello, el vino se había transformado en su "alimento" diario, y sabia que a ese paso pronto, llegaría su ultimo respiro. Sin embargo, una noche, con botella en mano, donde una tormenta caía vorazmente volvió a reencontrarse con un amigo de sus días de universidad, Bruno Bucciaratti, no lo había visto hace muchos meses y se sorprendió de que estuviera ahí, con una sombrilla, tan cerca de donde vivía; al parecer el pelinegro lo estuvo buscando durante mucho tiempo y al fin había dado con él, quien sabe como, pero se había enterado de su despido y quería ayudarlo, le sugirió la idea de que fuera a vivir a su departamento y no supo cómo tomárselo, a Bruno le debía tanto, porque prácticamente lo apoyo cuando sus días fueron los más difíciles, cuando no hubo nadie él estuvo ahí, lo consideraba como su familia, porque aunque él fuese el peor tipo con un carácter horrible Bruno no se había rendido, nunca se rendía, Leone nunca fue estable emocionalmente y en ese momento tampoco estaba del todo bien, por eso, no quería ser prácticamente un estorbo y molestarlo más de lo que ya debía... ¿Acaso aquel hombre no conocía la palabra "suficiente"?
Terminó por aceptar varios días después, no porque quería, sino porque a quien rentaba prácticamente lo hecho a patadas, era lógico, puesto que no había pagado renta en mucho tiempo; cuando llegó a vivir con Bruno, se propuso no ser un estorbo encontrar un empleo y marcharse apenas tuviera algo... por supuesto... solo se lo propuso. Su estado psicológico iba de mal en peor, no podía dormir la mayoría de veces y terminaba saliendo por las noches y madrugadas hasta llegar muy ebrio o simplemente parar en quien sabe donde, por supuesto que eso no estaba bien, aquello le imposibilitaba en estar siquiera un poco presentable para encontrar un empleo, se había vuelto muy terco, el pelinegro muchas veces le sugirió ir donde un psicólogo y él se negó rotundamente, todas las veces. Su "trabajo" prácticamente se basaba en apuestas en lugares que a nadie le gustaría pisar, pero que él estaba ahí por voluntad propia, para conseguir algunas monedas y consumirlo en alcohol. Siempre se pregunto porque Bruno no terminó por echarlo de ahí, al contrario, continuaba intentando persuadirlo para que tomara otros caminos y cambiará, quizá tanta insistencia y unos cuantos gritos lograron hacerle entrar en razón, y de una maldita vez fue a un psicólogo, que luego, prácticamente lo transfirió a un psiquiatra, este último lo veía una vez a la semana y le había mandado pastillas para dormir, pero esa tontería no ayudaba, ni siquiera ese "doctor" parecía ayudarlo, pero lo intento, dejó de beber, bueno, bebía pero ya no hasta estar ebrio solo hasta cierto punto, busco un empleo, que por cierto fue tan difícil por como lucía físicamente así como por su constancia en el sistema del anterior empleo, pero finalmente lo encontró, aunque fuese siendo un asistente de cocina, no se sentía realizado ahí y tampoco es que le encantará lavar platos y limpiar todas las noches antes de culminar su turno, las mesas y el local, pero al menos tenía un ingreso, ya no sería un estorbo como lo estuvo siendo por meses en el departamento del pelinegro. Empezó a aportar y se dividieron las cuentas, eso lo tranquilizo de alguna forma, dejó de asistir a terapia a escondidas, porque si Bruno se enteraba probablemente le hablaría por unas cuantas horas, y se dedicó a hacer deporte, que era algo que había dejado durante su etapa de perdición.
En una de esas tantas tardes de domingo un grupo de mocosos llegó al departamento, Leone se encontraba leyendo un libro de criminalística, de antelación el moreno le había avisado que llevaría a unos amigos a su casa esa tarde, más bien, a esos molestos ya los conocía, habían ido ahí tantas veces que ya se sabía sus nombres de memoria, algunos ya trabajaban mientras que otros cursaban aún la universidad. No le dio mucha importancia, algunos le saludaron como normalmente lo hacían y se fueron sentando en el sillón junto a él, como de costumbre asentía en silencio, solo que esa vez, alguien diferente había ido, estaba seguro de que no había visto a ese mocoso de cabellos rubios rizados.
─Disculpa Leone, hoy Mista decio traer a uno de sus amigos espero no te moleste─ hablo el pelinegro dejando en una mesa junto a la entrada su maleta
─¡Oh, es cierto! Abbacchio te presento a mi amigo Giorno Giovanna─ hablo despreocupadamente tomando un refresco en lata de la nevera
─Un gusto─ dijo el rubio intentando sonar amable tomando asiento junto a Fugo
─Tch─ bufo mostrando su molestia, no le caía la gente extraña, o generalmente así era con cualquiera que conocía al inicio, quizá en algún momento se lleven bien, pensó, pero de inmediato lo negó, ese rubiecito con cara de Barbie se veía arrogante, muy arrogante, no parecía conocer su lugar ahí
─¡Bucciaratti ¿Puedo pedir una pizza?! ─ grito el de bandada naranja atrapando la bebida que le lanzaba Mista
─Por supuesto─ dijo el pelinegro encendiendo el televisor para colocar cualquier película o serie que hubiera en Netflix, ya que eso realmente pasaría a segundo plano, puesto que por lo general solían ponerse a conversar y entre tanto alboroto apenas comentaban sobre lo que veían
─Pizza Margarita ¿verdad?
─¿Por qué haces preguntas tan estúpidas Narancia? ─ chasqueo la lengua levemente enojado
─Callate Fugo, siempre es mejor preguntar
─¿Qué diablos dijiste?
─Maldita sea callense de una vez
─¡No te metas Mista! ─ exclamaron los dos al unísono, empezando una guerra de insultos ahora los tres
─ ¡Ustedes tres pedazos de idiotas ¿Podrían callarse de una maldita vez?! ─ exclamó furioso el albino, y eso fue remedio para que los tres dejaran de discutir
─Vez te dije Mista, era mala idea que yo viniera, este tal Abbacchio es un completo amargado─ susurro para su amigo
─No te preocupes Giorno, al inicio Abbacchio es así pero luego te das cuenta que es peor─ dijo este pero en un tono más alto siendo escuchado por todos los presentes, quienes se quedaron en silencio, a excepción de Bruno que rió un poco ante aquello
Furioso se levantó de su asiento tomando del cuello de la camisa al rubio ─¡¿Qué mierda estabas hablando de mi mocoso?! ─ grito
─...─ se limitó únicamente a mirarle a los ojos sin decir nada más, a veces su mejor amigo era un poco... ¿Por qué siempre debía de meterlo en problemas así?
Definitivamente no habían tenido el mejor comienzo, realmente con nadie tuvo un buen comienzo.
🐞🍷🐞🍷
Buenas mi gente de Morioh👀
Este fic no tendrá fecha de actualización pero no lo dejaré al abandono obviamente
La semana que viene no voy a actualizar ninguno de mis fics en emisión porque participaré con fics xD en la semana Abbagio
Me hubiese encantado participar también en la semana Diokak pero al parecer este año no hubo...¿Qué les va pareciendo la historia? ¿Alguna sugerencia?
Saludos
~FerDann31~
ESTÁS LEYENDO
•|Se Fossimo Insieme|• •|AbbaGio|•
Hayran KurguLeone Abbacchio nunca tuvo la mejor vida posible, paso por varios momentos que marcaron su vida, se volvió un desastre, si es que no lo fue siempre, sin embargo, en su vida aparecio alguien que cambiaría sus oscuros y solitarios días, y que aunque G...