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Hajime jadeaba entre los besos que Ran le dedicaba, cada vez mas intensos y sucios.

Y temblaba de miedo cada que este simulaba embestidas entre sus intimidades, quería huir. Su omega lloraba cada que el alfa tocaba su vientre hablando de llenarlo y marcarlo.

Lo estaba rechazando por cada caricia repartida, pues el ya tenia un alfa, tenia a Sanzu que si bien no era perfecto era a quien su omega reconocía como su gran amor.

— Estas muy tenso cariño —le susurro en la oreja, dando un largo sorbo en su cuello humedo, parecia no estar consciente de la marca, Hajime asumía que se debia a su euforia de tenerlo, junto a su celo— Te voy a ayudar a relajarte..

Sus manos fueron a su ropa, y Hajime reaccionó pataleando e intentando empujar al alfa pero era inútil, Ran tenia mucha mas fuerza que él. Sin embargo hacia el trabajo de desnudarlo mas difícil, cosa que estaba irritando a Ran.

— ¡Quedate quieto, mierda! —le grito sosteniendo el rostro del omega que tenia sus labios hinchados y rojos, cuando ambos se miraron, Hajime le escupió— Pequeña perra...

Una bofetada hizo sollozar al omega, y Ran sonrió con satisfacción al verlo quedarse quieto finalmente, cuando comenzo a quitar la ropa, escucho el ruido de la puerta principal y antes de poder hacer o decir algo, sintio como era arrastrado y golpeado, se defendio al tercer golpe y cuando enfocó a su agresor, se quedo pasmado.

Era Sanzu, mostraba sus colmillos de forma mordaz y sus ojos parecían inyectados en sangre, estaba gruñendo, enfadado y a pesar de la euforia conecto los puntos tan rápido como pudo.

Hajime estaba en una relación con... Sanzu.

No lo creía, no lo entendía, pero el olor del alfa solo delataba la escena, estaba defendiendo a su omega.

Ambos comenzaron a golpearse, pero Sanzu tenia mayor ventaja al ser este el mas activo de los dos en las misiones de Bonten, cuando Ran cayo Sanzu lo sostuvo contra el suelo aplastando sus costillas en el proceso, Hajime reaccionó al escuchar a Ran gemir de dolor.

— ¡Sanzu!, ¡espera! —grito acercándose Hajime apresurado a la escena, Sanzu lo miro enfadado y antes de reaccionar Hajime se acerco a donde Sanzu y plantó un profundo beso que dejo al pelirosa confundido, miro al peliblanco encantado, aquel beso fue alagador— Mátalo

El de cicatrices sonrió, y Ran jadeo, asustado, sabía de lo impulsivo que llegaba a ser Haruchiyo, aquello lo asusto.

— ¡No pueden matarme!, ¡Soy un ejecutivo!, ¡Soy importante para Bonten!

Antes de poder balbucear algo mas Hajime pateo su rostro con cólera.

— ¡Cierra la boca!, ¡Me estas poniendo nervioso! —dijo dando otra patada, un hilo fino de sangre comenzo a bajar de la nariz del haitani, Sanzu miro a Hajime y le susurro algo en el oido.

Tan pronto Hajime salio del campo visual de ambos alfas, Ran comenzo a reconsiderar toda la situación, Hajime y Sanzu eran amantes, ¿Desde cuando?

Nunca los veía juntos, y hasta hace poco siempfe veía a Hajime siendo tan frio y malo con Sanzu, que al verlo ser amable con él pensó que tal vez tenia oportunidad. Pero por otro lado, si Hajime estaba de novio con Sanzu, eso explicaría el por que la separación de Manjiro y Sanzu.

¿Manjiro sabía?

Cuando estaba dispuesto a hablar, se quedo mudo al ver lo que Hajime llevaba.

Sanzu sonrió satisfecho.

— ¿Ya sabes lo que va a pasar ahora, verdad Haitani? —dijo sosteniendo el arma que el omega le entregaba.

No podia ser, no lo iban a matar por eso, no habia motivo, simplemente se habia equivocado de persona, el unico motivo por el que lo quisieran muerto solo significaba una cosa.

— Manjiro no sabe que Hajime esta marcado —dijo en voz alta al llegar a su conclusión, ambos le miraron y Hajime solo se encogió de hombros mientras Sanzu desvío su mirada incomodo.

— Nadie lo sabra, prometí cuidarlo Haitani, lo hubieras pensado mejor —dijo cargando el arma.

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Rindou lloraba mientras Sanzu lo consolaba, Takeomi y Mochi se lamentaban por Ran, tan joven y alfa, Hajime no había asistido muy ocupado con todos los papeleos detras de el accidente.

Ran había sido atacado por la yakuza, Manjiro no lo creía del todo, pese a las pruebas de que Ran a toda ley era un traidor pues segun graficos e informes Hajime destapo todo su dinero desviado a empresas fantasmas o cuentas de mafiosos reconocidos, estaba transfiriendo su dinero a otras personas, el dinero de Bonten.

La rabia lo invadia pero la impotencia también, lo tenia tan cerca y nunca se dio cuenta.

Sin embargo no solo eso lo frustraba, sino como Rindou se acogia entre los brazos de Sanzu llorando desconsoladamente.

No tenia que ser muy listo para saber quien era el nuevo interes de Sanzu, eran tan obvios frente suyo que lo irritaba.

Pero el tenia algo a su favor, si el Haitani mayor cayó por traición, el menor lo haria por complice, se deshacía de un peso menos tan pronto pudiera, pues Haruchiyo ya era de su pertenencia.

Cuando se llevaron el cuerpo, Manjiro con voz sombria llamo a Rindou que con sorpresa y confusión miro al omega. Sanzu también, vio como este sostuvo los hombros de Rindou como con miedo de que lo alejaran.

— Tenemos que hablar, ven —pero antes de seguir aclaro— a solas.

Sanzu mostro sorpresa y luego preocupación pero aun así le dio un gran abrazo a Rindou diciendole que el estaría esperando sus llamadas y que todo estaria bien, a Manjiro le dio asco.

Y una vez ambos omegas estuvieron fuera de su visión, sonrió satisfecho de su trabajo.

Con Rindou como señuelo, Manjiro no sospecharia nada. Se tomo la libertad de llamar a Hajime que no habia salido de su oficina desde lo de Ran.

Al tercer timbre contesto.

— Todo salió como dijiste, ¿voy a tu oficina?

No Deseado ; Sankoko/omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora