Nothin' Lasts Forever [SEUNGBIN]

𝒩𝑜𝓋𝑒𝓂𝒷𝑒𝓇 𝑅𝒶𝒾𝓃 𝒫𝓉. 𝟷

Jisung y Minho se habían hecho amigos cuando ambos cursaban la primaria, en ese tiempo Jisung había tenido la oportunidad de conocer al padre de su amigo, quien parecía ser alguien realmente agradable, sino fuera porque el día que lo había conocido el señor le había dicho a su esposa que le había sido infiel.

Jisung no entendía bien lo que significaba eso, pero la señora Lee había empezado a llorar y Minho estaba enfurecido porque su padre de nuevo había hecho llorar a su madre, entonces molesto le había reclamado por sus acciones.

Jisung no comprendía como un ambiente tan cálido de repente se había vuelto muy turbio, pero con nerviosismo se había escondido en el cuarto de Minho mientras los gritos de furia le recordaban a su padre y a sus tíos. Entonces comenzó a llorar mientras se tapaba los oídos y esperaba que esa pesadilla se acabara.

Después de un rato Minho había llegado a la habitación y al ver a Jisung adentro suspiró aliviado, pero verlo llorando solo lo hizo sentirse mal y acercándose lo abrazó murmurando— Perdón, no quería que vieras eso.

Jisung negaba mientras devolvía el abrazo y entristecido confesó— No sé porque tu madre estaba llorando...y porque de repente estabas gritándole a tu padre...no entendía nada...pero todo me recordó a mi padre...

Estaba llorando atemorizado, entonces Minho enfrascó todo su enojo en una persona que no era su padre, sino en aquel ser que le causaba daño a su alegre amigo.

Ahora no solo quería ser amigo de Jisung, sino que quería estar a su lado y aparte quería protegerlo de aquel hombre. Entonces no dejaría que aquel chico llorara de nuevo, en realidad lo haría la persona más feliz del mundo y buscaría que sonriera siempre.

Minho tenía esa mentalidad mientras reconfortaba a Jisung, y así pasaban los años, donde muchas cosas habían ocurrido alrededor de ellos, pero eso nunca los había separado, porque siempre se tomaban de las manos confirmando que su unión era más que una simple amistad, pero no sabían como llamarla.

Uno de esos cambios había sido que la señora Lee se había embarazado cuando ambos iban en secundaria, entonces Minho se había convertido en el hermano mayor de la familia. Y no era el único, porque Jisung también había pasado por lo mismo, solo que la diferencia era que su padre se había vuelto a casar con una mujer que siempre lo despreciaba.

Por lo mismo Jisung no solía volver mucho a su casa y prefería estar en la escuela estudiando o simplemente irse con Minho a su casa, donde seguían conversando de cualquier cosa que les pasara. Después de esos sucesos pasaron los años donde sentía que siempre tendría a Minho a su lado, pero su amigo un día le confesó— Me gusta una chica de mi salón, pero no sé si deba declararme.

Jisung solo había sonreído falsamente, su estómago le dolía mientras su mundo daba vueltas, incluso había sudado frío mientras fingiendo emoción le dijo— Declárate, de seguro te dirá que si acepta.

Jisung no lo veía, pero Minho se había quedado mudo, más cuando Jisung había tomado sus cosas y apurado decía— Me tengo que ir, te veo en la escuela.

Al momento que salió de la casa de Minho empezó a sentir que su mundo daba vueltas, sin comprender qué emoción le estaba afectando tanto en ese instante, así que prefirió irse de la casa del causante para intentar tranquilizar su frágil corazón.

Tampoco quería volver a su hogar, entonces prefirió irse a una biblioteca, donde podía leer a gusto mientras el silencio le ayudaba a entender sus confusas emociones. Mientras leía una novela de romance comenzaba a imaginar que en las escenas estaba Minho y su próxima novia, mostrando una relación muy bella y perfecta.

Entonces Jisung sintió alguna clase de enojo y frustrado tiró el libro murmurando— Minho, ¿por qué tiene que gustarte una chica?

Al día siguiente el malhumor se notaba en su rostro, entonces todos preferían mantenerse aún más alejados del hijo del mafioso. Pero a todos les había restado importancia su presencia cuando escucharon el rumor de una confesión, por lo que todos habían salido corriendo para presenciarla.