No soy Akane! (Drakenui)

Capítulo 1

Nota: Este Fanfic solía estar publicado en mi cuenta anterior, "HitomichanNamikawa", pero ya que esa cuenta fue eliminada, he decidido resubirla aquí. Espero la disfruten~

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Su vida acabó en aquel incendio. En el momento no tuvo idea de que lo había iniciado, sólo sabía que había sobrevivido por error, siendo rescatado por su mejor amigo, quien en realidad quería salvar a su hermana, la dueña de su amor y afecto... Inui Akane había muerto, la hija favorita se había ido, la muchacha que quería ser cirujana, la chica que tenía un montón de amigos, extremadamente sociable, refinada y hermosa... y él había sido el sobreviviente, aquel de quien todos se quejaban, ese que se peleaba todo el tiempo en la escuela, que no tenía amigos sólo porque odiaba compartir espacio con personas que no fueran de su interés, que era serio, antipático y reservado, el constante motivo por el cual sus padres suspiraban agotados... Inui Seishu, pese a haber sido salvado, había muerto ese día por el bien de su familia

- Akane, cariño, despierta – habló su madre moviéndolo con suavidad hasta despertarlo; Seishu se sentó en la cama y con una gran sonrisa miró a su madre

- Buenos días, mamá

- Lista para tu primer día? – quiso, instintivamente, chasquear la lengua, pero no lo hizo, ya estaba acostumbrado

- Por supuesto, mamá

La mujer sonrió ampliamente y salió de la habitación de su hija, cuyas paredes estaban pintadas de un rosado que te dejaba ciego. Las blancas e inmaculadas sábanas fueron dejadas atrás y se dirigió a su baño personal, se dio una buena ducha con gel corporal olor a miel y un champú cítrico, salió envuelto en una toalla y abrió su armario... Bragas púrpura con encaje, un pequeño sostén copa A y encima, el uniforme femenino de su nueva escuela; ni siquiera sabía a que clase iría y la verdad, le daba igual, hace años que se resignó a ser "Akane" para mantener a su familia unida y en el proceso recibir algo del cariño que no había tenido en su niñez

Secó y peinó sus rubios cabellos, pensó en usar una cola de caballo, pero descartó la idea a último momento, se afeitó los pocos vellos que le habían salido y maquilló con base cada imperfección de su rostro, acomodó su falda, subió sus medias hasta la mitad del muslo y bajó las escaleras fingiendo entusiasmo

- Akane, andando, es tu primer día de clases! – le animó su madre

- Voy!! – respondió saliendo de la casa

- No me saludas, cariño? – habló su padre, por lo que le abrazó fugazmente y besó su mejilla; puso su mochila sobre su hombro izquierdo y se sentó en el asiento trasero del vehículo

Todas las miradas estaban sobre él, sintiéndose muerto de vergüenza y queriendo que la tierra se lo tragara, se presentó ante la burlona multitud como Inui, sin especificar un nombre, y se sentó en el puesto que el maestro le asignó, junto a un sujeto enorme de ojos amarillos y cabello en diferentes tonos de azul, sujeto que no dejaba de mirarle en silencio... No pudo dejar de oír los murmullos referentes a su aspecto durante la primera hora, por lo que apenas inició el receso, tomó su mochila y corrió al baño de varones, espantando a un par de incautos al ver una "chica" cruzar el umbral. Se quitó las medias y la falda, sacó de su mochila un pantalón negro y unos calcetines hasta los tobillos, se vistió, guardó lo que traía puesto antes y se miró en el espejo listo para salir

- Mejor no me quito el maquillaje – se dijo a sí mismo, queriendo evitar otra hora más de miradas incómodas dirigidas a su cicatriz

- Inupi! – le saludó animadamente su mejor amigo, quien le esperaba afuera; habían planeado empezar a asistir a la misma escuela ese año, pero habían quedado en clases separadas debido a sus calificaciones