capítulo 8

451 44 30
                                    

Macao estaba nostálgico, y se sentía muy mal, al parecer vincenzo había encontrado a alguien mejor que él, siempre lo pensó, pero nunca se imaginó que llegaría tan pronto.

Porchay le gritó desde la cocina que bajara a desayunar para poder ir a la escuela, aunque Macao no se sentía con ánimo de ir, había faltado unas semanas, así que por obligación tuvo que ir.Macao bajo a la cocina y vio a porchay y a Kim sentados en la mesa comiendo su desayunó, él se acercó a la mesa y se sentó en la silla sobrante.

Pasaron unos minutos y ya todos habían terminado de desayunar, salieron de la casa y entraron en el auto para ir a la escuela.

(...)

Macao estaba en clase sentado al lado de la ventana de cristal y no pudo evitar mirar por la ventana, por alguna razón aquella acción, hacía que recordara a vincenzo por lo linda que se veía la vista.

No sabía cómo sentirse, ya se imaginaba que vincenzo no duraría mucho con él, él es muy poco para él y vincenzo es mucho, pensar en esto hacía que su corazón doliera más que nunca.

Luego de un rato Macao salió del aula de clases y fue al baño, en el baño vio a un chico que lo miraba mucho, parecía ser de un curso más alto que el de él, se sintió incómodo por la fija mirada del chico en él.

Unos minutos después salió del baño, pero fue atacado por el mismo chico del baño y lo entró a la fuerza a una de las aulas, Macao estaba un poco asustado, temía que le pasará algo.

Macao vio cómo otros chicos entraban en el aula de clases, haciendo que el temor que sentía Macao fuera más grande, realmente pedía que no le hicieran nada.

—chicos quién se quiere divertir un poco con este chico—hablo el chico que estaba en el baño haciendo que Macao se estremeciera del miedo.

—Yo quiero ser el primero—dijo uno de los chicos que estaban ahí.

El chico se acercó a mí y me dio una patada en la boca del estómago, haciéndome caer inmediatamente por el dolor.

—¿Podemos violarlo?—pregunto el mismo chico, haciendo que Macao abriera grandemente los ojos por el susto.

—No, por favor no me hagan daño—suplico Macao mientras sus lágrimas bajaban por sus mejillas.

—No te preocupes, todo será rápido, lo prometemos—dijo el chico del baño acercándose también a Macao y tomándolo de la barbilla.

—Todo terminará pronto—hablo el chico del baño riéndose burlonamente.

Macao estaba llenó de miedo, necesitaba que alguien interrumpiera a estos chicos, para poder salvarse de esto.

(...)

Vincenzo se encontraba entrando a la escuela de Macao, lo fue a buscar a la casa, pero no estaba ahí, así que recordó que Macao tenía clases, fue por varias aulas, pero no lo encontró.

Porchay al ver a vincenzo se acercó a él un poco curioso por saber qué hacía vincenzo allí.

—¿Qué haces aquí?—pregunto porchay a vincenzo quien lo miraba fijamente.

—Vine a hablar con Macao, necesito verlo y explicarle qué, lo que vio no es lo que creé.

—Bueno, no creó que puedas hablar con el yo, también llego rato buscándolo y no lo encuentro, talvez se fue a casa.

—No creó, acabó de venir de allá—respondió vincenzo serio.

—Bueno, entonces vamos a buscarlo—dijo Kim acercándose a ellos.

cómo te conocí (Vincenzomacao)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora