La identidad de Elizabeth

Capítulo 9 (Relato de Leonel)

Ahora que por fin estamos los tres reunidos podré escuchar lo que ha pasado mi hija durante todo este tiempo con la seriedad que le caracterizaba cuando las cosas era muy importantes. Mire a mi hijo estaba un poco nervioso por la presencia de mi amigo, pero le toque el hombro para poder relajarlo y así lo hizo.

Comienzo el relato Enrique por favor, dijo el rey y asi comence la historia de como habíamos llegado a esta ciudad en el siglo 21:

Todo fue tan repentino... (Comente nervioso porque el rey me miraba muy serio, pero debía darle mi informe de todo este tiempo que él estuvo ausente ya que era la primera vez que él venía al siglo 21)

Al momento que éramos enviados a esta época el ángel nos explicaba que nos trasladaría al siglo 21 ya que así sería difícil que Vladimir nos pueda encontrar con sus hechizos unos buenos siglos adelante, aquel hermoso ser celestial abrió un gran portal mediante un verso que todavía lo recuerdo como se fuera ayer:

"El tiempo es la verdadera causa por la que el espíritu se hace fuerte y con el valor del alma, el hombre enfrentará las pruebas de la vida."

Antes de irse dijo que rezaría por nuestro bienestar y cerró el paso del tiempo entre dos siglos totalmente diferentes. Aparecimos en un parque que solamente alumbraban algunas farolas por la noche y la oscuridad cubría toda esta ciudad, tenía un poco miedo de utilizar mi magia por temor a que nuestros enemigos nos hallarán u otras personas esten del bando contrario buscandonos estaba realmente asustado no sabía en dónde nos encontrábamos.

Me aseguré de que la princesa estuviera bien y así fue ella dormía y muy tranquila ya que no había ruido que la despertara, permanecí quieta por algunas horas en aquel parque sin ver rastros de nuestros enemigos o alguna aparición humana.

Empecé a caminar lentamente hasta llegar a una pileta muy hermosa que se llama "El canto del ángel" me llenó de nostalgia porque se parecía a uno que tenemos en nuestro hogar. Debido a que no había luna llena para poder guiarme ni estrella a cuál seguir. Me hallaba desolado tampoco sabía si hablábamos el mismo idioma todo era muy difícil para mí.

(No pude más con la presión y sentía como unas lágrimas empezaron a brotar de mis ojos). Aclaré mi voz y proseguí.

Caminé por todo el parque, el cual tuve que inspeccionar para asegurarme que no había ningún peligro o bujo y así fue como casi daba el amanecer. Lo más curioso que encontré es que aquel lugar estaba protegido por grandes barreras de metal.

Las primeras personas que el sol trago parecían ignorarme como si no existiera o fuera un vagabundo, recordé que me había dado una pócima para acoplarme a su idioma. Su forma de vestir era diferente a la nuestra por lo cual era visto por todos los ojos curiosos.

Las personas empezaron a aglomerarse en el parque, unas me veían con desprecio otras con lastima o con curiosidad. Las personas me daban monedas pensando que necesitaba conseguir un poco de alimento, pero lo que ellas no sabían es que estaba completamente perdido en su época, no sabía a dónde ir o a quien acudir trataba de acercarme alguna persona pero todas me miraban con temor menos una su nombre era Lucia que igual acababa de dar a luz a una hermosa niña y estaban de paseo por el parque, me dio una tarjeta con la ubicación de su pequeño hotel al cual nos invito sin ningún costo con tal que la princesa estuviera bien ya que pensaba que era mi hija y luego se marchó

Me quedé un poco con la duda y desconfiado de que tal vez era una trampa y así que no fui de primera instancia por temor a cualquier cosa. Descansamos del sol bajo un gran roble, su princesa por alguna razón seguía dormida pensé que era algo malo así que la traté de despertarla, pero no reaccionaba ponía pequeñas gotas de agua en su boca y un pequeño gemido me tranquilizo, su pequeña manito sujeto mi dedo y lo retiró de su boca diciéndome que solo quería seguir durmiendo. Saqué un poco de pan y vino de la bolsa de provisiones, mientras comía pensaba en un plan así para sobrevivir esa noche.