Capítulo 4

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— Nadie, solo me devolvió la cartera que perdí y ya- dije enseñandosela

— Si claro, no te hagas el tonto. Es guapa la chica y parece buena persona

— Sabes que no tengo tiempo para esas cosas. Estoy demasiado ocupado últimamente con la nueva empresa

— Si quieres nosotros te ayudamos con el tema de la empresa, pero debes buscar alguna mujer con la que casarte, mírate tienes 21 años. Aún eres joven para preocuparte por eso, buscate una buena mujer hermano- dijo poniendo su mano en mi hombro

— ¿Y Younes? También debo cuidar de él hasta que sus padres vuelvan del viaje de negocios

— Lo puedo cuidar yo- dijo mi otro amigo Omar

— Lo ves, no tienes de qué preocuparte, nosotros te ayudaremos siempre, nunca lo dudes- dijo Yassin

— ¿Pero cómo voy a encontrar una mujer así de la nada?- pregunté

— Haz du3a y pídele a Allah que te una en halal con tu futura esposa- dijo poniendo las manos como haciendo du3a

— De acuerdo, In Shaa Allah haré du3a- dije mirando al cielo

Luego de hablar de eso volvimos a casa y celebramos el 3id con mi familia y amigos. Younes estaba conmigo y recordé las galletas que me dió Yousra. Estaban en una cajita donde había una pegatina que decía "Eid Mubarak" y al abrirla veo unas galletas muy bien decoradas con formas y tenía dibujos hechos con chocolate. Cojo una y se la doy a Younes, el la mira y la prueba.

— ¡Que rico!- dijo enseñándome la galleta mordida- prueba una tito

Así es como él me llama, siempre me dice tito y la verdad que no me molesta en absoluto. Hago lo que me ha dicho y pruebo una, él tenía razón, estaban muy buenas.

— Estabas en lo cierto Younes, están muy buenas- digo al probarlas

—  Uy, ¿y de quien son? - pregunta mi hermana menor Halima

— De una chica de ropa lila- dijo Younes recordando el khimar lila que ella llevaba en la mezquita

— Con que una chica eh Ayoub- dijo dándome un golpecito con el codo

— Ella fue la que me devolvió la cartera nada más

— Pero le regaló flores- dijo Yassin dándole una sonrisa cómplice a mi hermana

— Ayoub, ¿algo que decir?- se rió mi hermana

— Bueno, ya tengo que llevar a Younes al parque- dije mirando la hora y tratando de librarme de sus preguntas

— Siiiii parqueeee- grita felizmente mi sobrino

— Venga vamos

Le doy la mano y salimos de casa hasta su parque favorito. Lo subo al columpio y comienzo a empujarlo suavemente.

— Mira, estoy muy alto- dijo mientras se columpiaba

— Ya lo veo ya, estás muy arriba

Seguí columpiándole hasta que vi llegar un pequeño niño muy mono Allah Ibarik. Detrás de él venía una chica con una abaya azul que lo seguía y le decía que no corra tanto.

— ¡Cuidado con el columpio!- gritó su femenina voz

Inmediatamente cojo al niño antes de que se golpee con el columpio y ella viene corriendo. Dejo el niño al suelo cerca de la chica y ella le dice que se espere un poco y no vaya corriendo por todas partes.

Al levantar la cabeza me encuentro con sus bellos ojos de un marrón atardecer con un ligero tono verde oscuro que profundizaba su mirada y allí veo que es ella, Yousra. No se cuantos segundos habrá durado esa mirada pero su voz me hace salir de ese trance.

— Gracias, casi se da con el columpio si no fuera por ti- dijo cojiendo al niño en brazos

— No es nada enserio

— Has venido con Younes, últimamente nos encontramos mucho ¿no?

— Si, la verdad es que sí, nunca pensé que vería a la pediatra de mi sobrino en la mezquita y ahora en el parque jaja- dijo rascándose la cabeza

— Bueno, el Qadr de cada uno de nosotros ya está escrito y pasará como Allah quiera. Pero eso no significa que no podamos hacer du3a para cambiarlo, porque puede que Allah haya ordenado que el 9alam escriba "como desees" y allí es donde tu deseas lo que quieres. Pero Allah u A3lam, no soy experta en el tema.

— Yo también estoy de acuerdo con eso- dije y miré al niño pequeño que estaba en sus brazos

— Es tu hijo?- pregunté y una parte de mí se sintió mal al imaginar que podría llegar a serlo

— Nooo- dijo riendo- es mi hermano pequeño Mohamed, tiene solamente 3 años. No es la primera vez que me preguntan eso pero me sigue sorprendiendo jajaja

Al oír eso sentí mi corazón aliviarse, no se que me está pasando. Recién la conozco pero despertó en mí unos sentimientos que jamás he sentido.

— Pues ambos se parecen mucho, especialmente en los ojos, teneis la misma mirada y el mismo color.

— Si, nos suelen decir eso muy a menudo y en verdad me alegra parecerme a mi hermano, siento q nos une más, no se si me explique

— Claro, si lo entiendo- dije mirando al niño pequeño y luego a su hermana

Yousra

Veo como mi hermano estira sus brazos en dirección al columpio dónde está Younes y sé que lo que quiere es subir para columpiarse el también.

— ¿Quiere subir?- dijo Ayoub

— Si pero deja que Younes se columpie un rato más, él puede jugar en el tobogán pequeño o otra cosa mientras tanto.

— Si quiere subir yo me puedo bajar- dice Younes

— Aww qué amable por tu parte pero en serio Mohamed a pesar de su edad entiende cuando le toca esperar, le educamos así desde pequeño- dije haciéndole mini cosquillas a mi hermano

— Cuando quieras me avisas, ¿vale?- dijo Younes dirigiéndose a Mohamed

— Dile vale- dije

— Vaie- dijo pronunciando una I en vez de una L

Ayoub siguió columpiando a su sobrino y yo me senté en un columpio redondo de estos que tienen como una red que son grandes y te puedes tumbar. Me senté allá medio tumbada con mi hermano a mi lado.

Estuvimos un rato mirando a la nubes del cielo y de repente sentimos que alguien nos empuja. Levanto mi cabeza y al mirar atrás me encuentro con Ayoub riéndose.

— ¿Te has asustado?- dijo entre risas

— Puedo subir?- pregunta su sobrino

— Si claro ven al lado mío, hay sitio- dije subiendolo al lado contrario del de Mohamed

— Agarraos fuerte para no caeros- dijo y comenzó a empujarnos

Empecé a sonreír por el momento, era muy bonito y la verdad que también único. SubhanAllah, nunca imaginé que acabaría encontrándome con él de nuevo tan seguido. Mire a mi hermano y él se estaba riendo, le divertían mucho los columpios.

Estuvo columpiandonos un buen rato hasta que me llega la notificación de una llamada perdida de mi hermano. Cojo el teléfono, busco su número y le llamo. Se tarda un poco pero al final contesta, Ayoub al verme en llamada para el columpio y se queda quieto.

— Salam, ¿que pasó?- digo a mi hermano

— A papá le ha vuelto a dar tos y fiebre alta, ven a casa a revisarlo mientras llega la ambulancia- dice tristemente

Mi MaktubDonde viven las historias. Descúbrelo ahora