Capítulo 10

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— ¡Halimaaa!- le digo con los ojos abiertos como platos

Miro a Ayoub y noto un ligero tono rosado en sus mejillas y al ver que lo estoy mirando tapa su cara con la mano excepto sus ojos.

— Halima porfavor eh, no incomodes a la chica

— Pero si no está incómoda, al contrario- dice con su mirada pícara de nuevo

— Waaa Halimaaa 3afak- digo levantandome

— Cuidadooo- dicen ambos a la vez

— Wakha safi me siento antes de que me echeis una bronca jajaja

— Soy capaz- dice la hermana de Ayoub

— No si yo lo evito- dice él

— Uyyyyy, es la primera vez que le veo tan interesado en defender a una chica- dice con una sonrisa

Ayoub se pone de pie y al estar en la puerta antes de salir me dice que me prepare y que me espera abajo.

— Iría contigo pero debo acabar unos asuntos

— No te preocupes, estaré bien

Me pongo una abaya de Halima y me arreglo el pañuelo. Me pongo mis zapatos y saludo a sus padres que al estar en la habitación aún no los he visto

— Mi hijo ya nos contó que te pasó. Allah Ishafik- me dice su padre

— Amin- contesto

— Ves con cuidado mi niña y no te preocupes, mi hijo cuidará de ti- dice su madre

— Si, confío en él- digo y salgo cuidadosamente

Halima me acompañó hasta la puerta del ascensor y luego bajé sola. Al llegar abajo Ayoub me abre la puerta del ascensor y la de fuera y me ayuda a caminar hasta el coche. Me abre la puerta del coche y una vez he subido la cierra. Él se sube y arranca hasta llegar al hospital.

Entramos y lo primero que hace Ayoub es sentarme en una silla de ruedas y conduce hasta el piso que nos han indicado.

En un pasillo largo y liso se pone a correr y al sentir la velocidad me agarro fuerte a la silla. El se da cuenta y en vez de bajar la velocidad la aumenta hasta que vemos a una doctora pasar y se detiene para que no se enfaden por correr

Nos reímos por lo sucedido mientras esperamos y al oír mi nombre Ayoub me vuelve a empujar en la silla hasta entrar a la sala. Una vez dentro él se sienta en la silla y explica el motivo de la visita.

Ayoub

— De acuerdo, puede que sea un esguince. Ahora le revisamos y le avisamos- dice la doctora

— Vale, gracias- digo

— ¿Eres su pareja?- pregunta

Ahora no, pero إن شاء الله si

Era lo que quería decir pero ese momento no era el indicado

— Actualmente no- contesto mirando a Yousra

He dicho lo mismo pero de otra forma. Luego salgo a la sala de espera mientras a ella le hacen la radiografía y espero a que nos den los resultados.

Una vez tomada la radiografía otra doctora sale y me la muestra.

— Como puedes ver es un esguince tal y como suponíamos, pero no hay nada de lo que preocuparse. Si en 1 semana más o menos aún duele volver y le repetimos la radiografía- me explica

— ¿Y ella dónde está?- pregunto

— Sigue dentro, le estamos vendando el tobillo y sobre las muletas ya no nos quedan, llegan la semana que viene. Pregunte en alguna farmacia si aún tienen de préstamo para asi no gastarse tanto dinero en ellas.

— De acuerdo gracias por avisar. Debe tomar reposo por los siguientes días y cualquier cosa volveremos para repetir la revisión- digo

— Exacto, debe tomar reposo pero mover un poco el pie para que se acostumbre, caminar unos 5 minutos cada 1 o 2 horas- explica de nuevo

Luego la doctora se va y un rato más tarde aparece Yousra en la silla de ruedas. Me acerco a ella y al mirar su tobillo derecho lo veo envuelto en vendas. Esta vez el vez de llevarla en la silla decido hacer otra cosa

— Ponte de pie un momento porfavor- pido

— ¿Eh?- dice confusa

— Confia en mi

Al decir eso ella me hace caso y se pone de pie apoyándose en su pie izquierdo y levantando el derecho. Yo sin pensarlo dos veces la tomo y la cargo como princesa. Ella se agarra fuerte a mi cuello al hacer esto tan desprevenido.

— Bajameee, puedo ir sola- dice

— Ya se que eres capaz pero no, yo quiero llevarte con mis propias manos- respondo

— Wa safeee, se que eres fuerte Tbark'Allah 3lik pero déjame seguir

Sin hacer caso la tomo más fuerte para que no se suelte y la llevo hasta el coche. La dejo en su sitio y finalmente deja de quejarse.

— Te ha costado dejarme eh- dice

— Si, mucho- respondo

— Me he he dado cuenta

— A una mujer hay que tratarla como una reina y tu no eres la excepción

— Osea me estás diciendo que tratas asi a todas las mujeres

— No, a todas no, solo a ti. Las demás mujeres no tienen nada que ver en mi vida porque solo tengo ojos para una en específico- digo mirándole a los ojos

Empiezo a sentirme nervioso y miro hacia el volante arrancando el coche. Aún puedo sentir su mirada en mi. Me encantaría mirarla por siempre, pero aún no. Prefiero esperar y hacerlo Halal con ella lo más pronto posible.

Aparco delante de una farmacia y bajo del coche, le digo que me espere en el coche y entro. Encontré unas muletas de color lila muy bonito y se las compro sin dudarlo.

Vuelvo al coche y le pido que baje un momento para que las pruebe y vea que tal le van.

— ¿Pero esto cuánto cuesta?- pregunta

— Nada comparado a lo que vale tu comodidad

— Pero Ayoub, no hacia falta

Me encanta oír como pronuncia mi nombre con su hermosa voz.

— Porfavor deja de decir que no hace falta todo lo que hago. Lo hago por ti, porque me preocupo y no esto es solo lo mínimo

Ella no dice nada y solo me mira a los ojos. Se forma un silencio que, a pesar de que no se oye nada, lo dice todo.

— Espérame aquí, voy a buscar unas cosas y vuelvo. Si tienes calor deja la puerta abierta para que te de al aire- digo y me dirijo a una tienda detrás del edificio

Yousra

Abro la puerta del coche y me siento sintiendo el aire en la cara. Estaba tranquila cuando veo a dos tíos acercarse.

Mi MaktubDonde viven las historias. Descúbrelo ahora