Capítulo 5

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— Pero… vale ya voy - mejor no iba a preguntar tanto así que cuelgo y directamente bajo del columpio para ir a casa lo más rápido posible.

— Lo siento, me tengo que ir ahora, tengo prisa- digo bajando a Younes y a mi hermano del columpio- mi padre no se encuentra bien.

Siempre que alguien no se encuentra bien soy yo la que les revisa porque al estudiar medicina se me da bien eso, me gusta poder ayudar en esos casos pero a la vez no porque se ve el cansancio de la persona en los ojos y duele ver así a alguien.

— Te llevo yo si quieres, ven vamos al coche- dice cogiendo las llaves del coche

— No, no hace falta, vivo cerca

— Enserio sube y te acerco- insiste

Acabó insistiendo y logró convenciéndome de ir con él, rápidamente subimos al coche y le di la dirección. En verdad no vivía tan cerca, salí a dar un paseo con Mohamed y acabé llegando al parque que está en la otra punta.

Sinceramente tenía un precioso coche negro con unos hermosos asientos blancos cómodos. Habían reposa vasos a los lados junto a unos botones que no sabía de qué eran cada uno. Arriba, había una mini tele colgada para los asientos de atrás. Miro por la ventana y veo que estamos cerca de casa.

— Bájame aquí, ya la casa no está tan lejos, puedo ir caminando

— Pero puedo acercarte más- dice bajando la velocidad del coche

— Gracias, pero enserio puedo ir sola- digo y bajo del coche una vez aparcado.

Subo al 2do piso y entro a la casa. Dejo a mi hermano en su habitación y voy directamente a la habitación de mis padres sin siquiera quitarme los tacones. Al entrar me encuentro a mi padre tumbado en la cama.

Inmediatamente agarro mi botiquín de enfermería y cojo el termómetro, al medirle la temperatura veo que esta muy alta y busco el medicamento necesario para bajar la fiebre. Le doy unas pastillas y un jarabe y pongo toallas con agua fría en su frente para que baje su temperatura corporal mientras esperamos a la ambulancia.

Ayoub

Estaba en el parking con Younes cuando oí la sirena de la ambulancia. Yousra se bajó antes, no la llevé hasta la puerta de su casa, dijo que no hacía falta que el camino que quedaba lo caminaría sin problema perola preocupación me ganó y sin pensarlo fui al hospital para ver que esté bien. Llamé a mi amigo para que se lleve a Younes mientras esté en el hospital.

— Se mejorará In Shaa Allah- le digo a mi amigo después de contarle lo sucedido

— Si, In Shaa Allah- dice él

{...}

Ya había pasado 1 hora desde que llegué al hospital, su padre ya se encontraba mejor y no tenía nada grave, solo fue fiebre alta y gracias a que Yousra se hizo cargo antes de que llegaran se mejoró antes. Estaba sentado en la sala de espera cuando la veo acercarse a mí.

— Lo siento por meterte en esto- dijo ella mirando al suelo

— No, no pasa nada, no podía quedarme sin hacer nada viendo como todos os preocupais

— Gracias por tu ayuda

— Nada que agradecer la verdad, lo único que he hecho ha sido acercarte a tu casa- dije entrelazando mis dedos -¿y cuando le dan el alta?

— Puede que hoy aunque también nos han dicho que quizá mañana porque prefieren asegurarse que todo vaya bien.

— Allah Ishafih

— Amin, todo está en manos de Allah

— Si- digo y me levanto -Bueno, ya me tengo que ir, me deben estar esperando. Cualquier cosa que pase me llamas, mi número quizá aún lo tengas por la llamada del otro día.

— De acuerdo, Jazzak Allahu Khairan

— Amin

— Cuidate- dice despidiéndose

— Igualmente, descansa

Salgo del hospital y recibo la llamada de mi hermana

— Salam

— Salam Ayoub, te llamo para saber dónde estás, está anocheciendo y sigues sin volver

— Recién salgo del hospital- digo acompañado de un suspiro

— ¿Te ha pasado algo?- dice preocupada

— No, a mi no, acompañe a unas personas al hospital y pues me quedé para asegurarme que está todo bien

— Espero que no sea nada grave. Bueno pues no tardes mucho que mamá y papá están esperándote para cenar

— Si de acuerdo ya voy, adiós- digo y cuelgo la llamada

{...}

Ha pasado 1 semana desde que estuve en el hospital y sigo sin tener noticias de nadie. Espero que todo haya ido bien.

— Salam Aleikom- dice mi padre entrando a la casa

— Aleikom w Salam- respondemos todos

— Vuelves muy temprano hoy, ¿no?- pregunto mirando la hora

— Si hijo, hoy vamos a casa de un hombre que conocí en el hospital y quiso invitarnos a su casa- dice al sentarse en el sofá

Mi MaktubDonde viven las historias. Descúbrelo ahora