»Capítulo 5

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«Tu pequeña sonrisa duele por alguna razón».


     —Muchas gracias por su compra —JungKook realizó una reverencia con su cabeza al cliente al frente, este le sonrió antes de marcharse, por lo que no le prestó tanta atención a la inspiración sonora de su compañera de turno. 

     Se rascó la nuca un tanto nervioso y no le quitó los ojos de encima al chico hasta que desapareció por la salida. Él conocía muy bien ese tipo de sonrisas y estaba seguro de que si fuese menos tímido, también coquetearía sin tapujos. 

      Nunca ha tenido una relación seria con un chico, de hecho, recuerda muy bien el último beso que tuvo con uno y fue hace unos meses en la época de la universidad cuando, junto a sus compañeros, jugaban a verdad o reto en una fiesta de un desconocido. Todos se hallaban lo suficientemente ebrios como para pensar con claridad. Fue así como terminó besándose con un varón del que no recuerda su rostro, un beso tan desmesurado que finalizó con casi algo más que la lengua de otra persona dentro de su boca. 

     —¡JungKook, pon tu gay panic a un lado y mira esto! —la chica le señalaba su teléfono con su índice mientras mantenía la boca bien abierta al igual que sus ojos. Su vista no era la mejor, tenía un grado de miopía bastante alto y le daba flojera usar sus lentes, así que no veía absolutamente nada de lo que le mostraba. 

     —Espera...¿ese es mi teléfono? —palmeó sus bolsillos delanteros y los traseros, también buscó a su alrededor. La fémina tenía la costumbre de robar su celular para jugar Piano Tiles. No entendía por qué solo no se descargaba el juego en su propio teléfono. 

     Se aproximó a ella para poder ver mejor —. Es un correo, ¿ves? —le acercó de lleno el aparato en la cara, JungKook se sintió mareado —. ¡Felicidades!      

     Sus ojos se agrandaron sorprendido. 

     —No pensé llegar tan lejos —no podía dejar de ver el correo, aquel que le afirmaba que había pasado la audición online y ahora le tocaba presentarse de manera presencial en la mismísima empresa de entretenimiento —. Esto era para complacer a mamá, ¿qué se supone que haga? 

     Su compañera de trabajo lo abrazó por sus hombros y con las mismas lo acercó de golpe, hizo que mirara a la nada de forma inspiradora —. Le darás la noticia a tu madre, te pondrás tu mejor traje e irás a presentarte, Jeon JungKook. 

     Obviamente no iba a hacer eso.  


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       Los flashes de las cámaras eran el pan de cada día para el grupo. Todos estaban normales, sonreían y hacían una que otra bobada para que quedara captada por siempre. Todos menos Kim TaeHyung y eso él no lo diría. Aunque sonrió a las cámaras varias veces, fue el primero en entrar al auto, caminó muy rápido, casi no le dio tiempo a los paparazzis de fisgonear su imagen. 

     Tenía bastante claro que era su trabajo, pero a veces simplemente no lo disfrutaba, menos este día. Quería llegar rápido a la empresa para poder encerrarse en su estudio y seguir con algunas cosas que tenía a medias. 

Máscara || KTH+JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora