Capitulo Dos

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Rock Lee mezcló ropa sucia con  limpia mientras maldecia a su amiga ¿Porqué no habia avisado con tiempo? ¿Porqué era todo tan repentino? Si ella sabia de su mediocre  estado...
Ya no sentia la juventud correr por sus venas, ya no era el mismo de antes. Su  mundo era gris sin fuerzas, sin alegría,  sin amor, sin juventud...

Horas más tarde, Lee se encontraba  estacionando  su Ford Mondeo al frente de  la casa de su nueva compañera de trabajo en el barrio South Beach de Miami. Se preguntó que hacia mal para no poder comprar una casa en ese lugar o no poder comprar otro Mondeo igual al que acababa de pasar. Si lo hubiera hecho, si se hubiese arriesgado, ella quizás... no.

Atino a salir del coche cuando divisó una  cabellera rojiza  caminar en su dirección.

----Hice lo más rápido que puede----Se disculpó Lee; troto hasta la puerta del acompañante para abrirla,  aunque no estaba en el esplendor de su juventud no era excusa para ser descortés, cogió la maleta y la guardo en el maletero. Volvió  a trotar hasta la puerta del conductor, se ajustó el cinturón de seguridad y miró con dirección a la mujer.

-- ¿Salimos?-- la mujer  lo miraba  fijamente,   se acomodó los anteojos y sonrió asombrada.

-- ¡Hola! Me llamo Karin Uzumaki, y esta casa no es mía, es de mi jefe, permite que viva con él. Soy especialista en ilustraciones, dibujo  todo los  generos, desde infantil hasta erótico.

Lee sintió vergüenza, en todo  este tiempo no se había presentado, él no era así. Bajó la cabeza, pero al instante la alzó.

--- Soy Rock Lee, vivo en West Kendall  y últimamente--dijo arrastrando la palabra-- soy especialista en arruinar todo, si sigo así, me convertiré en un desempleado más.-- Karin volvió a reír, hacia mucho que no veía un ser tan transparente como él.

Cerca de la noche arribaron al poblado  donde yacia el flamante  establecimiento  carcelario.

Al llegar al hotel, ambos presentaron sus credenciales a la  recepcionista;  una jóven tan  avarienta como inexperta que emocionada por la cantidad de huéspedes no dudo en tomar atribuciones.

----Espero que no se molesten, pero debido a que hubo muchas demandas compartirán la habitación.

Rock Lee quiso protestar pero  Karin lo detuvo.

-- Oh!! Nos acomodaremos, no se preocupe.

La habitación no  era lujosa pero si espaciosa. Cuando Rock Lee entro se quedó sin aliento ¿Cómo harían?  Se preguntó, se sentía incómodo. ¿Cómo haría pasar cinco días encerrado en esa habitación?  Solo, con una mujer que no era ella... pero Karim hizo uso de su practicidad para acomodarse.
Eran distintas.
Rock Lee volvió a respirar, no imaginaba que aquella pelirroja con voz chillona, fuera capaz de hacerlo sentir de nuevo cómodo  con el sexo opuesto.
Se acomodaron y cada uno se refugió en su improvisada intimidad.

Un amor para Rock LeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora