El Mundo de Fernand

UN MUNDO SIN MIDGE

Pasando los días, la condición de fernand mejoro, solo dejó que los días avanzarán, ella solo quería que Midge pagará por todo lo que hizo, su madre ya no le importaba. Fernand seguía con su día a día.

Las investigaciones continuaron en contra de Midge, la siguiente en ser entrevistada sería ella, momentos decisivos se venían, la pequeña Fernand buscaba justicia y respuestas.

--- Midge ya es hora de que me lleves a la escuela, acuérdate que hoy tienes la entrevista con Benazir --- Fernand le dijo a Midge, tomó su mochila y se alejo de ella.

--- Ya se, no tienes que estar recordándome las cosas --- Midge le dijo Fernand con voz irritada.

Llegando a la escuela, Fernand se pasó a las instalaciones sola, no quiso la compañía de Midge, El rechazo era evidente.

Cada minuto era crucial para su vida, preguntas hechas propiamente para poder encontrar una respuesta.

Por otra parte, la entrevista tuvo muchas emociones que, al terminar, Midge salió con lágrimas en los ojos.

---¿Podrá haber sentido un poco de miedo al saber que nos perdería?, ¿Existirá la manera de que ella nunca vuelva a estar con nosotros?, porque no estoy segura como será un mundo sin Midge, tal vez raro, pero a la vez fascinante. ---- pensó Fernand.

Midge busco a sus hijas, pero no le seria tan fácil, ya que San no volvería, a estar con ellas un largo tiempo, y Fernand sería la única que tendría que estar con su madre. En ese momento ve a su madre y solo pudo decirle que bueno que estas aquí, pero en mi vida no te quiero más, pero qué más da, estarás presente.

--- No seas así, soy tu madre, algún día entenderás todo--- Midge acaricio a Fernand, mientras lloraba al decir estas palabras.

--- Ya lo veremos --- Respondió Fernand.

Fernand vivió un tiempo ignorando a Midge, pasaba las tardes en su cuarto estudiando, pensando, leyendo o incluso dibujando, San, casi no llamaba a Fernand y poco a poco se olvidó de ella, aprendió a estar sola. Claro en veces el dolor la invadía, pero amor de su padre Albert la consolaba en momentos difíciles.

El mundo sin Midge era agradable para la pequeña, pero a su vez extrañaba a su madre, peleas constantes por el no obedecer, la vida en la escuela era menos pesada, pero sus calificaciones lograron aumentar.

Todo esto sin Midge, pero necesitaba su amor, la vida sin ella provoco un vacío, que poco a poco la llevo a nuevas vivencias llenas de inmadurez y a una pérdida total.

Pero aprendes que no es culpa tuya las acciones o lo que pasa en la vida de los demás, debes aprender a que uno mismo es quien debe cambiar y no la persona que está generando algún suceso en tu vida.

Ley del crecimiento: Nosotros somos quienes necesitamos cambiar y evolucionar, no las otras personas.

¡Sin ti, mi vida mejoro Midge!